Análisis: Las estrategias en el GP de Austria F1 2017. Aciertos y errores

Sí que merece echar un ojo a la distribución porcentual de las estrategias seleccionadas, como vemos a continuación:

Todo el mundo, salvo un piloto –Daniil Kvyat–, hizo un solo paso por boxes. Y, en realidad, esta estadística está falseada, ya que el ruso entró por primera vez en la Vuelta 1 de resultas de su carambola en la Curva 1 de Spielberg para reparar daños y de paso poner otras gomas. Después haría otra parada más, como todo el mundo. Así que ¡el 100% de los pilotos hizo la misma estrategia!

Terrible. No había más opciones en un circuito sin degradación y con unos neumáticos tan duros. Si a ello añadimos lo estrecho del trazado, más las dificultades para adelantar por las turbulencias traseras y la reducción del espacio de frenada, tenemos lo que se preveía desde pretemporada: una reducción del espectáculo. Esperemos que vengan mejores pistas...

La ausencia de degradación que hemos analizado en nuestro artículo anterior, y que es la base de esta falta de opciones estratégicas, se aprecia a la perfección en el descomunal tamaño de los stints con todas las gomas disponibles:

En realidad, cualquiera de ellos podría haber hecho toda la carrera sin necesidad de cambio alguno y eso que estamos hablando de la gama más blanda de Pirelli. Sin haberlo deseado nadie –y ante la falta de previsión de la FIA– estamos en una situación similar a la que se tenía con Michelin, cuyas gomas duraban toda la carrera y más. Pero por aquel entonces, había cierto juego estratégico gracias a los repostajes, qe hoy no tenemos.

Repasamos las estrategias de forma global en una infografía de Pirelli, que ya hemos publicado y a la que sólo os remitimos como recordatorio:

Veamos, pues, la variaciones que hemos detectado en esta estrategia de una parada y las que funcionaron mejor o peor.

LA ESTRATEGIA MÁS COMÚN

• Una parada.
• Seguida por Valtteri Bottas, Sebastian Vettel, Daniel Ricciardo, Kimi Räikkönen, Romain Grosjean, Sergio Pérez, Esteban Ocon, Stoffel Vandoorne y Marcus Ericsson.

Nueve de los 16 supervivientes la siguieron. Eso lo dice todo. Fue la estrategia mejor para empezar la carrera, por el pequeño margen de agarre que daban los ultrablandos, dejando para la segunda parte de la carrera los superblandos, que duraban igual y apenas se notaba una reducción nde rendimiento. Así que los pilotos que optaron por ésta, fueron los que mejores opciones tuvieron en carrera.

LA ESTRATEGIA ALTERNATIVA

• Una parada.
• Seguida por Lewis Hamilton, Lance Stroll y Pascal Wehrlein.

Sólo una variante de lo anterior. Nada más. Resaltar que no significó nada partir con los ultrablandos o lo superblandos, pues ninguno de los pilotos que partió con ellos tuvo una caída de rendimiento en la salida. Decir que Hamilton pudo comenzar con este compuesto gracias a que clasificó con ellos en Q2. La idea de Mercedes –que no sirvió de nada– fue estar más tiempo en pista mientras los rivales de delante poaraban para hacer rodar al británico con aire limpio y hacer recuperar mucho terreno de cara a su primera y última parada. Al final, no les salió y tuvo que ser el primero de los de cabeza en pasar por boxes para hacer un undercut a Räikkönen que sí logró ante la imposibilidad de pasarle en pista.

LA ESTRATEGIA MÁS CONSERVADORA

• Una parada.
• Seguida por Felipe Massa, Jolyon Palmer, Nico Hülkenberg y Daniil Kvyat.

Sin duda, la estrategia equivocada. De nada sirvió rodar con blandos frente a las gomas más blandas que no degradaban. No obstante, la estrategia no le salió mal ni a Massa ni Palmer. El primero acabó noveno y el británico, rozó los puntos y quedo, además, por delante de su compañero de equipo, Nico Hulkenberg, que también los montó y tuvo un pésimo rendimiento con ellos.