Últimos en su especie: los deportivos que vieron las últimas cajas de cambio manuales

Los coches con caja de cambios manual son una rareza hoy en día, incluso los modelos más generalistas ya ofrecen un cambio automático, y únicamente las variantes de acceso o modelos básicos tienen la posibilidad de seguirse ofreciendo con esta opción. En el campo de los deportivos, donde alguien podría pensar que se hace necesario esa conexión hombre—máquina a través de la palanca de cambios, ocurre de una manera parecida desde hace unos 20 años, cuando el tercer pedal comenzó a desaparecer en pro de las cajas de doble embrague.

Por suerte para los puristas, todavía queda en la actualidad un reducto de fabricantes dedicados a la conducción 'a la vieja usanza', sin embargo hoy recordaremos los últimos estandartes de la conducción analógica para las que hoy en día podemos considerar los “grandes” entre las marcas de lujo.

EL ÚLTIMO FERRARI MANUAL

Como olvidar la clásica palanca de cambios en rejilla de los deportivos del 'Cavallino'. El honor de ser el último de esta estirpe corresponde al Ferrari California, el modelo de acceso a la casa Ferrari y que estuvo en venta entre 2009 y 2017, pasando a ser sustituido por el Portofino.

El California representa ciertamente un punto de inflexión para la marca en cuanto a transmisiones se refiere, pues asimismo fue el primer modelo en incorporar una caja de doble embrague, única opción cuando llegó al mercado en 2009. En 2010 se amplió la oferta para incorporar también la mencionada caja de cambios manual, pero en 2012 se eliminó esta posibilidad debido a la bajísima demanda de este opcional. Para hacernos una idea, entre los años 2009 y 2012, se fabricaron unas 8.000 unidades del California, de las cuales, manuales, solo fueron… ¡dos! No en vano, estas unidades son las más cotizadas actualmente, y una de ellas se vendió en 2016 por el equivalente actual a más de medio millón de euros.

En cuanto al último V12 de Ferrari con palanca de cambios tenemos al 599 GTB, manufacturado entre 2007 y 2012, de las 4.179 unidades que se calculan que se vendieron —versiones especiales incluidas—, únicamente 30 salieron con esta opción y solo 10 permanecieron en Europa. En febrero de 2023, una unidad con matrícula española se vendió en París por 623.750 euros.

EL ÚLTIMO BUGATTI MANUAL

El renacer que vio la mítica firma francesa sobre suelo italiano en la década de los 90 nos trajo uno de los 'hypercar' más míticos de la historia. El EB110 surcó con orgullo las carreteras y las hojas de las revistas como el coche más rápido de su tiempo. No en vano, contaba con un V12 de exiguo tamaño, 3,5 litros, pero con nada menos que cuatro turbocompresores que en su variante Supersport hacía que la mecánica ofreciese más de 600 caballos.

Por supuesto contaba con caja de cambios manual de seis relaciones, y otros aspecto que lo hacía realmente especial era que contaba con tracción a las cuatro ruedas. El último de estos Supersport salió de la factoría de Campogalliano en septiembre de 1995, tras lo cual la empresa terminó en bancarrota. El intento de la adquisición de Lotus y el desarrollo infructuoso de la berlina hicieron que terminase en manos del grupo Volkswagen.

Ellos se encargaron entonces de llevar a Bugatti a la cumbre del automovilismo, cambiando el paradigma de lo que debía ser un superdeportivo. Hablamos del Veyron, que se retrasó hasta el año 2005. No era para menos, pues se trataba de un compendio tecnológico tan complejo que no se había visto hasta el momento. Por supuesto, su transmisión también fue novedad, implementando por primera vez una caja de doble embrague para un coche de este calibre, con siete marchas —la primera de su clase—, para digerir así todo el torrente de más de 1.000 caballos de potencia. El resto, ya es historia. EL ÚLTIMO LAMBORGHINI MANUAL El Gallardo, en producción entre los años 2003 y 2013 fue el último de la firma del toro de lidia en contar como opcional con palanca de cambios y pedal de embrague, aunque durante toda su vida comercial también estuvo disponible con una caja robotizada E-Gear, con los mismos elementos actuadores que la manual pero con el embrague accionado hidráulicamente y de manera automática. Todo sea dicho, el último ejemplar con caja manual fue un Gallardo LP560-2 50º aniversario.

En cuanto a los V12, ese honor pertenece al Murciélago, lanzado en el año 2001 y en venta hasta 2011, cuando llegó el Aventador, su reemplazo. Lo cierto es que se vendieron muy pocas unidades manuales desde que en 2004 comenzó a ofrecerse con el cambio robotizado. En 2006 llegó su lavado de cara, el LP640-4, de los que, según algunos datos, apenas 50 se realizaron con este tipo de transmisión. ¿Los más apetitosos? Los cinco SV existentes, con 670 caballos.

EL ÚLTIMO MASERATI MANUAL El Coupé, fabricado en distintas versiones desde el año 2001 hasta 2007, fue el último del Tridente en poder equipar un cambio manual de seis relaciones, aunque a partir de 2006, éste ya no estuvo disponible. La alternativa era una caja de cambios robotizada al estilo de la del Gallardo, con fama de ser terriblemente fiable. Lo cual es una pena pues, aunque no tenemos datos concretos, se estima que entre el 60 y 90 % de los Coupés salieron de fábrica con este tipo de cambio.

EL ÚLTIMO ASTON MARTIN MANUAL

Por extraño que parezca, el Vantage actual todavía podía comprarse en 2021 con una caja de cambios manual de siete velocidades. Y es que la firma británica quería desmarcarse del resto en este aspecto, manteniendo la manera tradicional y más directa de entender la conducción.

Y con ese orgullo lo transmitían al mundo, hasta que hace escasamente año y medio, anunciaron que a partir de 2022 dejarían de ofrecerlo a sus compradores. La razón no fue otra que la de mejorar las cifras de consumo y emisiones de sus coches, preparándose así para los próximos cambios de normativas anticontaminación y el inevitable salto a la electricidad.

LOS QUE TODAVÍA QUEDAN

Por suerte, no todo está perdido para aquellos que prefieran la 'libertad' de la palanca de cambios y un tercer pedal. Tal vez el que esgrima este estandarte con mayor ahínco sea el Porsche 911 GT3. Sí, esta bestia casi de circuito y más de 500 caballos ofrece una mecánica atmosférica que se estira hasta las 9.000 vueltas, ¡y se ofrece con cambio manual de seis relaciones!

Eso sí, la correspondiente al cambio PDK es medio segundo más rápida que ésta, tiene un consumo de 12,4 litros a los 100 kilómetros frente a 13,3 y unas emisiones de 283 gramos de CO2 por kilómetro frente a 304 gramos. Porsche afirma que el 45% de los conductores se va a decantar por el cambio manual, ¿y vosotros?

Por otra parte tenemos también a los fabricantes artesanales, quienes si no van a continuar con la manera tradicional. El Noble M500 presentado en 2021 hizo volver a la palestra al fabricante británico, con una mecánica Ford V6, tracción trasera y cambio manual como una opción de compra. No podemos olvidarnos de Pagani, que seguirá ofreciendo la combinación de motor V12 y cambio manual en su nuevo modelo, el Utopia, o los GMA T.50 y T.33 de Gordon Murray -padre del McLaren F1, entre otros-.