Hamilton gana en China; Ferrari prioriza a Vettel sobre Leclerc

El equipo Ferrari ha impartido órdenes de equipo entre sus pilotos para priorizar a Sebastian Vettel en la pelea por el podio, cuando creían que el alemán podía apretarle las tuercas a Mercedes. Pero no fue así. Leclerc expresó su descontento por radio, pero acto seguido cayó a la quinta posición víctima de un undercut de Max Verstappen durante las paradas en boxes.

La carrera de Carlos Sainz y su compañero Lando Norris se ha visto comprometida en el momento de la salida. El motivo, un Daniil Kvyat desbocado que les ha embestido en la curva seis durante la primera vuelta, condenándoles a las últimas posiciones.

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La Fórmula 1 festejaba en China el Gran Premio número 1.000 puntuable para el Mundial de Pilotos, que nació en Gran Bretaña 1950 después de que la Federación Internacional de Automovilismo, heredera de la Asociación Internacional de Clubes Automovilísticos Reconocidos, constituyera la competición en coordinación con la Comisión Deportiva Internacional para ordenar un deporte que había florecido en Europa desde finales del siglo XIX, en tiempos de guerras mundiales y pioneros.

Valtteri Bottas salía desde la Pole Position después de haber superado a su compañero Lewis Hamilton por 28 milésimas en la sesión de clasificación, con tres décimas de margen sobre Ferrari. Primera parrilla monocolor para Mercedes. Puede que Shanghái tuviera rectas imponentes, pero las curvas rápidas del segundo sector beneficiaban al W10, que se perfilaba como un coche más completo que un SF90 que tenía en la potencia pura su punto más fuerte.

Sebastian Vettel ocupaba la tercera posición, con Charles Leclerc en la cuarta por tan sólo 17 milésimas. El monegasco estaba decepcionado con su actuación, porque creía que podría haberlo hecho mejor el sábado. El domingo se le presentaba la primera carrera desde la desolación de Sakhir, donde un cortocircuito le privó de una victoria que tenía amarrada cuando tan sólo faltaban 15 vueltas.

Max Verstappen partía quinto tras verse involucrado en una polémica con Vettel en la Q3. El holandés no pudo disponer de una última vuelta rápida porque cruzó la línea de meta cuando el reloj ya había llegado a cero. Su argumento es que el tetracampeón rompió el pacto de caballeros que existe entre pilotos; el tetracampeón respondió que sólo quedaban 10 segundos y que no podía comprometer su resultado. En la piscina de tiburones que es la Fórmula 1, un problema de honor.

A nivel técnico, Mercedes introdujo el viernes un nuevo alerón delantero, pero tuvo que modificarlo después de que la FIA declarase ilegal el diseño de sus endplates. Ferrari cambió la centralita electrónica de sus dos coches, sin por ello recibir sanción. También lo hizo Haas en sus monoplazas. Nico Hülkenberg y Daniil Kvyat estrenaron la segunda unidad de potencia completa –excepto batería y centralita–; Daniel Ricciardo y Lando Norris también cambiaron el MGU-K. Alexander Albon empezaría desde el Pit-Lane después de los cambios efectuados en su coche tras el accidente de los Libres 3.

Los neumáticos disponibles para la carrera eran el C2, el C3 y el C4, que se identificarían como el compuesto duro, el medio y el blando. Representaban la misma selección que en Australia. Los dos Mercedes, los dos Ferrari y el Red Bull de Max Verstappen tomarían la salida con el medio; los cinco coches restantes del Top 10, con el blando. Por detrás, dominio absoluto del compuesto de color amarillo con la excepción de los dos últimos –Antonio Giovinazzi, Alexander Albon–, que optaron por el rojo.

En la vuelta de formación, la baja temperatura de los neumáticos les jugó una mala pasada a Max Verstappen y Robert Kubica, que protagonizaron un trompo. Los dos pudieron regresar a la pista y ocupar su posición en la parrilla.

Salida. Lewis Hamilton reaccionó mejor que Valtteri Bottas y le arrebató la primera posición en el sprint hasta la primera curva, devolviéndole la jugada de Melbourne. Por detrás, Charles Leclerc le ganó la partida a Sebastian Vettel para ponerse tercero. Los Red Bull se respetaron: Max Verstappen mantuvo la quinta posición, Pierre Gasly la sexta.

Pero la salida tuvo un protagonista: Daniil Kvyat. El piloto ruso se abrió en exceso en la salida de la curva seis y se llevó puesto a los McLaren de Carlos Sainz y Lando Norris. Dirección de Carrera decretó un coche de seguridad virtual. Los dos MCL34 visitaron el Pit-Lane de forma simultánea para someterse a reparaciones; se reincorporaron últimos, a 40 segundos del resto. Los comisarios sancionaron a Kvyat con un Drive-Through.

La bandera verde regresó sin que ningún líder hiciera una parada. Hamilton puso pies en polvorosa y encadenó vueltas rápidas para construir una ventaja de 1,5 segundos sobre Bottas, suficiente para controlar el ritmo de la carrera. Leclerc cedía dos segundos respecto al finlandés, con Vettel a seis décimas de él. Verstappen era capaz de rodar al mismo ritmo, dos segundos por detrás del alemán.

Mientras tanto, Daniel Ricciardo lideraba la pelea de la zona media con 1,6 segundos de margen sobre Sergio Pérez, que había recuperado cuatro posiciones desde la salida. Nico Hülkenberg y Kimi Räikkönen completaban el Top 10. Por detrás, Sainz y Norris seguían a más de medio minuto del pelotón, aunque recuperaban un segundo por vuelta.

En la vuelta 11, Ferrari impartió órdenes de equipo. El equipo le preguntó a Vettel si podía ir rápido. El alemán respondió que hacía lo posible por acercarse a Leclerc, que estaba a un segundo de él. Acto seguido, la Scuderia le pidió al monegasco que apretara el ritmo porque, si no lo hacía, se exponía a una orden, que finalmente se produjo con un escueto 'let Sebastian by' –deja pasar a Sebastian–.

Los italianos estaban preocupados por partida doble. Preocupados porque los Mercedes se escapaban en solitario –Hamilton tenía ocho segundos de ventaja– y preocupados porque Red Bull se acercaba –Verstappen a dos segundos–. Vettel era un par de décimas más veloz que su compañero, si bien la diferencia entre ambos se mantuvo estable en el segundo, como antes de la comunicación por radio.

Leclerc era el primero en constatar que su ritmo era prácticamente calcado que el de su compañero. En la vuelta 13, verbalizó su frustración: "¿Y ahora qué? Da igual". En la vuelta 15, volvió a la carga: "Estoy perdiendo mucho tiempo. No sé si queréis saberlo o no". La realidad es que todo seguía igual que las órdenes de equipo: Hamilton ya tenía doce segundos de margen y Vettel no conseguía escaparse.

El baile de paradas en boxes empezó en la vuelta 18. El primero en entrar fue Max Verstappen, que calzó el neumático duro para intentar llegar hasta el final. En la 19, Ferrari eligió parar a Sebastian Vettel para proteger el podio. Charles Leclerc siguió fuera; Ferrari retrasó su parada tres vueltas y condenó la cuarta posición con una nueva decisión errónea.

En la vuelta 20, Verstappen intentó adelantar a Vettel. El Red Bull se salió de su aspiración y se tiró por el interior de la curva 14, pero llegaba tanta velocidad que se fue largo. Los dos emergieron en paralelo en la aproximación hacia la 16, pero el Red Bull tuvo que levantar el pie para evitar el contacto. El Ferrari conservó así la delantera.

Bottas hizo su parada en la vuelta 22 y se reincorporó cuatro segundos por delante de Vettel. Hamilton entró en la 23, salió un par de segundos al frente de Bottas. Leclerc también hizo su cambio de ruedas en ese mismo giro. Regresó a la carrera por detrás de Verstappen, lo que consumaba la pérdida de dos posiciones desde las órdenes de equipo.

Lewis Hamilton lideraba la carrera con 2,4 segundos sobre Valtteri Bottas al llegar a la vuelta 28, el ecuador del Gran Premio. Sebastian Vettel era tercero a 10,5 segundos, con Max Verstappen cuarto a 14,8. Leclerc cedía 23,4 segundos, pero recuperaba terreno a marchas forzadas y trataba de dar caza al holandés de Red Bull, al que arañaba cuatro décimas en cada paso por meta. En la vuelta 32, Carlos Sainz ya era decimocuarto y había dado cuenta del que había sido su verdugo en la salida, Daniil Kvyat.

Pasaban los minutos, pero pasaban pocas cosas en la pista. Lewis Hamilton gobernaba con cuatro segundos de renta sobre Bottas; Vettel estaba a siete segundos tanto del piloto que le precedía como del que le seguía. Y Leclerc, en plena remontada, ya estaba a menos de cuatro de Verstappen. Completamente anónima era la actuación del segundo Red Bull, el de Pierre Gasly, que era sexto y cedía 20 segundos con su compañero.

La estabilidad cambió en la vuelta 35. Max Verstappen cambió de estrategia e hizo una segunda parada, en su afán por intentar atacar a los Ferrari. La reacción fue inmediata: la Scuderia llamó a Sebastian Vettel en el siguiente giro para proteger el podio. Charles Leclerc se quedó fuera, con un margen de 10 segundos sobre sus perseguidores, pero con gomas más viejas. Mercedes también movió ficha con una doble parada en la misma vuelta sin que Lewis Hamilton y Valtteri Bottas perdieran tiempo.

Bottas regresó a la pista a la estela de Leclerc. Le intentó pasar en múltiples ocasiones, pero el monegasco vendió cara su piel. Su resistencia tenía todo el sentido del mundo para el equipo, pues ejercía de tapón y Vettel cerraba la brecha con el Mercedes. Resistió un giro entero, en el que el alemán recuperó dos segundos.

Vettel pasó en la vuelta 42 a Leclerc, cuyas gomas ya estaba en las últimas. El monegasco entró entonces en boxes para efectuar su segunda parada, de la que emergió quinto, a 14 segundos de Verstappen. Por delante, el primero de los Ferrari se mantenía a menos de cuatro segundos de un Bottas que ya había dicho adiós a toda opción de victoria.

Nada cambió en el tiempo restante. Lewis Hamilton completó una actuación férrea para anotarse la segunda victoria de la temporada y asumir el liderato del Mundial de Pilotos por primera vez en la temporada 2019. Valtteri Bottas le acompañó en segunda posición para brindar a Mercedes su tercer doblete de tres posibles, con Sebastian Vettel en tercer lugar.

Charles Leclerc completó la carrera en el quinto puesto, detrás de Max Verstappen. Adelantó a Vettel en la salida y tuvo el podio en su mano, pero recibió y acató las órdenes de equipo para dejar pasar a su compañero. El transcurso de la prueba confirmó que ésa fue una decisión errónea por parte de Ferrari. A partir de ahí, la lógica necesidad de proteger el podio le dejó vendido ante Max Verstappen en el baile de las paradas.

Daniel Ricciardo terminó séptimo y líder de la zona media, por delante de un Sergio Pérez y un Kimi Räikkönen que protagonizaron una gran actuación desde la duodécima y la decimotercera posición de la parrilla. Alexander Albon completó la zona de puntos, en una remontada fulgurante desde el Pit-Lane. Más desgraciada fue la actuación de los McLaren, condicionada en la salida por Daniil Kvyat: Carlos Sainz fue decimocuarto, su compañero Lando Norris abandonó en las últimas vueltas.