La semana que vivimos 'peligrosamente': confianza y decisiones

"Confío en mi padre, pero eso no significa que yo no tome mis propias decisiones", dijo recientemente Max Verstappen, en relación a cómo equilibra las opiniones de su progenitor respecto a lo que luego debe hacer en su día a día. Y como ejemplo puso la carrera de Malasia 2017: "Tuvimos algunas mejoras en el coche que no funcionaron para Ricciardo en clasificación, pero yo estaba convencido de que serían beneficiosas en el mío, así que decidí usarlas", obteniendo luego un excelente resultado en carrera al lograr la victoria. Esto no impide que Max confiese lo siguiente: "Hemos tenido opiniones diferentes, pero al final él suele tener razón nueve de cada diez veces. Ambos tenemos grandes egos, pero eso está en nuestra sangre y nos ha llevado a la Fórmula 1". Sin lugar a dudas, Verstappen Sr. fue clave en su momento para el ascenso de su hijo dentro del equipo Red Bull.

El que no necesitó de padre para ascender hasta un volante en Red Bull fue Daniel Ricciardo, aunque siempre ha contado con el apoyo moral e inestimable de alguien como Mark Webber. Es por ello que éste dijo recientemente sobre su compatriota lo siguiente: "Creo que lo mejor que puede hacer es vencer a Max. Él lo sabe y hará todo lo posible para lograrlo". Y con respecto al importante tema de la continuidad de Ricciardo más allá de la actual temporada con los de Milton Keynes, dado que concluye contrato con los mismos, Webber comentaba: "Evidentemente si superas a Verstappen y el Red Bull vuelve a ser rápido, ¿por qué irse?". Por tanto, todo girará en la pugna y el éxito comparado entre ambos pilotos, además de las posibles vacantes que puedan surgir en otros dos grandes equipos, con vistas al 2019.

Tras algunas declaraciones un tanto apresuradas y optimistas del director ejecutivo de McLaren, Zak Brown, sobre podios casi inmediatos, Éric Boullier trató de mantener los pies en el suelo al comentar. "Es parte del juego, pero tenemos que mantenerlo bajo control y asegurarnos de no hacer comentarios muy fuertes para seguir una línea: prometer poco y cumplir mucho. Esa es la clave". Bien es cierto, que el francés como responsable en pista, conoce en profundidad lo complejo que han sido los últimos tiempos en la escudería de Woking, por lo que confesaba seguidamente: "Emocionalmente es muy difícil, pero es parte de mi trabajo gestionarlo, incluso siendo un poco más latino que la mayoría de mis compañeros británicos". Finalmente sólo podía añadir que el secreto estará en ser muy profesionales y mantener la calma, es decir, tiempo al tiempo.

Quizás por todo lo anterior y desde la mismísima dirección técnica del equipo, la encabezada por Tim Goss, se supo más tarde lo siguiente: "Gran parte del éxito de un buen monoplaza de Fórmula 1 en estos tiempos es darle al piloto un coche que pueda explotar al máximo", es decir, un bólido que pueda llevar al límite según sus posibilidades, respecto a sus dotes como profesional del volante, dentro "de un amplio entorno operativo". Por todo ello, en palabras de Goss, los de Woking siguen, desde hace meses, una línea prioritaria basada en obtener el mayor rendimiento al "comprender la física del flujo de aire y así tratar de obtener una buena aerodinámica además de un equilibrado comportamiento en cualquier tipo de rango". Todo lo anterior junto a un propulsor potente y fiable como el procedente de Renault, es lo que puede marcar un antes y un después.

Lo que sí ha quedado claro por parte de los galos, es que McLaren deberá adaptarse al propulsor actual, sin poder aportar medida alguna hasta dentro de un tiempo. Así Cyril Abiteboul, como responsable de los del rombo comentó: "Nosotros desarrollamos una completa unidad motora antes de trabajar con McLaren, por lo que no será como lo fue con Honda, dado que los parámetros de la misma están bajo nuestra responsabilidad". El francés seguidamente añadía que esto podrá cambiar con el tiempo, pero que "claramente para 2018, e incluso 2019, es muy tarde para que McLaren tenga alguna influencia en el hardware del motor", aunque siempre recibirán con gusto sugerencias. Finalmente confesaba lo siguiente: "Vamos a tener que ver cómo evoluciona todo, pero si va bien, no hay razón para que no pueda ir más allá".

El brasileño Felipe Massa ha quedado algo sorprendido, y no gratamente, con lo dicho en fechas recientes por el que fuera su compañero de equipo en Williams durante el año 2017, ya que Lance Stroll, tras su paso por las 24 Horas de Daytona, no tuvo otra ocurrencia que comentar: "No recibí, en absoluto, ningún consejo ni ayuda por parte de Massa". La cuestión parece compleja de aclarar, aunque desde luego, tras el difícil arranque de temporada de Stroll con cuatro abandonos consecutivos, algo debió ocurrir dentro de la escudería y de su fuero interno cuando mejoró notablemente desde entonces. Finalmente y lejos de entrar en polémicas, Massa acudió a la ironía a través de la redes sociales confesando lo siguiente: "Mejor no hacer comentarios", junto a dos emoticonos con aspecto de extrañeza. Algunos dicen que 'juventud divino tesoro', pero en ocasiones ésta te puede volver algo olvidadizo.

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