¿Mentor o no? Las visiones opuestas de Massa y Stroll

Stroll debutó en Fórmula 1 con tan sólo 19 años. A su lado tuvo a un compañero de 35 primaveras, un veterano en el ocaso de su carrera profesional. Desde el primer momento, se dijo que Massa haría todo lo posible para transmitirle su experiencia y ayudarle en su adaptación a la categoría reina. Lance nunca lo vio así, al menos delante de los micrófonos.

El canadiense sólo se refirió al brasileño como su "mentor" en una ocasión. Fue en un vídeo compartido por el equipo en febrero de 2017, justo antes de los test invernales.

"Tengo ganas de que Felipe sea mi mentor. Somos rivales, pero es una persona muy respetada y tiene mucha experiencia. Es un jugador de equipo. Espero aprender con él y conseguir lo mejor para el equipo, para que la escudería esté lo más arriba posible".

Después de aquello, Lance cambió su discurso. Su lógica era que podía fijarse en la metodología de Massa para aprender cosas que le beneficiaran en el futuro, pero que ese aprendizaje se produciría de forma autónoma y sin tutorización. 

"Para mí será una referencia, en especial en aquellos circuitos en los que aún no he estado. Será positivo en muchos sentidos. Es un buen tipo, una persona directa. Tiene ganas e conseguir buenos resultados y eso es positivo", dijo después de los entrenamientos de pretemporada.

En Australia ya hablaba claro: "Felipe no está aquí para ser un entrenador. Él es un competidor y todos los equipos tienen dos pilotos que luchan per terminar lo más arriba posible. Eso no cambia. Yo me centraré en mis propias cosas y lo haré lo mejor que pueda, como siempre. Eso no cambiará".

Stroll adoptó una posición individualista el resto del año.No negó el valor de su compañero, pero sí evitó mostrarse como una figura dependiente de él. Criticado por su discreto debut, obvió a Felipe al mentar a las personas que le ayudarían a superar ese bache.

"Yo tengo a mi gente. Tengo amigos y gente que me ayuda en la pista. Mis ingenieros. Todos estamos juntos en el mismo barco. Tengo a mi equipo y estoy contento. No creo que busque a nadie más", declaró en la previa del Gran Premio de Mónaco, cuando aún no había sumado ningún punto.

Ese individualismo se repitió en Japón, cuando Stroll y Massa coincidieron en la misma rueda de prensa.

"-Lo aprendido- queda entre nosotros dos, pero aporta mucha experiencia y yo he podido usarlo como referencia en mi primera temporada. Él ha ayudado a mejorar el coche y yo me he quedado con algunos detalles que he podido aplicar en la pista. Me he quedado con muchas cosas".

Huelga decir que la visión de Felipe Massa es diametralmente opuesta. El brasileño sí sentía un profesor de la joven promesa. Se sentía responsable de su crecimiento y se mostró como una figura paterna en lo profesional.

"Le paso información con más facilidad que Michael Schumacher conmigo. Yo le preguntaba más de lo que él me decía, pero también me decía muchas cosas. Le veía como un profesor, un maestro, y no tenía miedo de hacer preguntas", señaló una vez.

"A Lance le ayudo mucho e intento transmitirle todo lo que veo. Nos llevamos muy bien y hago lo posible por ayudarle. Si en una curva yo hago X y él pierde tiempo, él me pregunta y yo le digo cómo hacerlo. No es un problema. Intento hacer todo lo que puedo por él. Es un placer hacerlo. Es un gran talento y estoy aquí para ayudarle".

Massa también le defendió cuando le llovieron críticas de aficionados y prensa especializada. “No ha tenido un buen inicio de temporada, pero debe tener paciencia y darse tiempo. Le doy toda la información que puedo. Le digo todo lo que veo para ayudarle a mejorar y aprender".