La semana que vivimos 'peligrosamente': buena armonía

"Tenemos a dos pilotos con la ambición y la habilidad de ganar un campeonato. Depende de todos nosotros ser conscientes de esa situación y recordar que Sebastian Vettel o Charles Leclerc pueden meterse rápidamente en la pelea, así que no podemos confiarnos". Seguidamente el austriaco se acordaba de las tiranteces entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg en el pasado e insistía en el grato ambiente que existe en la actualidad. Finalmente y a modo de recordatorio, Wolff volvía a echar la vista atrás al concluir: "No permitiríamos que una relación entre pilotos se deteriorara hasta un punto donde sea negativo para el equipo. Si ese fuera el caso, tras lo de Nico y Lewis, sacaríamos las tarjetas amarillas o rojas".

El expiloto Mark Webber comentaba hace unos días el bajo estado de forma del equipo Renault, al verles faltos de ritmo, además de los escasos puntos sumados hasta la fecha debido a sus múltiples abandonos: "Están muy atrás, tienen mucho trabajo que hacer". Luego, con cierta sorpresa, Webber señalaba que la marca francesa durante el invierno hablaba de poder estar peleando en la parte alta de la tabla, junto a los equipos más potentes. Sin embargo, la realidad es que actualmente están muy lejos de poder cumplir con esos propósitos. Finalmente, respecto a lo que pueda sentir su compatriota Ricciardo, sentenciaba lo siguiente: "Está siendo muy difícil para Renault y desde luego Daniel. Él está bien valorado, pero ahora mismo no está en una buena posición. Necesitas resultados y eso es lo que me preocupó desde su fichaje. Si no hay rendimiento, quizás otros pilotos intentarán hacerse un hueco".

Quizás por lo anterior, Cyril Abiteboul desviaba el foco de la atención mediática, para reclamar la importancia de la marca del rombo en la progresión durante años del equipo Red Bull, mediante la colaboración que tuvo con ellos al ser su proveedor de motores. Así que el francés comentaba que recientemente había leído que Max Verstappen estaría contento al recibir una sanción por cambios de motor, para intentar dar un salto en cuanto a las prestaciones de su actual unidad de potencia y seguidamente añadía: "Estoy de acuerdo con Horner que nuestro motor no estuvo a la altura en 2014 y 2015, pero estamos extremadamente contentos de que Renault haya contribuido a que Red Bull sea lo que es hoy en día al ganar cuatro títulos seguidos". Además, el responsable de los galos se reafirmaba respecto a lo anterior al decir: "Desde un punto de vista financiero, sus patrocinadores, el plano tecnológico o con la búsqueda de talentos, Red Bull es lo que es actualmente gracias a Renault".

Mientras tanto, por Maranello andan dándole vueltas a las razones por las que el monoplaza de esta temporada no cumple con las expectativas esperadas antes de llegar a la primera cita del año en Australia y sucesivas. "Creo que no tiene nada que ver con las actualizaciones ni con el rendimiento general del coche", explicaba de inicio Mattia Binotto, para a continuación dirigir sus quejas hacia un elemento externo al mismo: "Ciertamente, gestionar los neumáticos no es fácil, más en Bakú que es un circuito muy difícil para las gomas por el bajo nivel de energía que se pone en ellas". Evidentemente, el italiano hablaba de lo complejo que es obtener una buena temperatura de trabajo en trazados como éste, por lo que como cierre insistía: "Las actualizaciones funcionan como se esperaba y éstas son sólo las primeras. Tenemos algunas más para las próximas carreras, así que no nos detendremos aquí y esperamos poder hacer un mejor trabajo en el futuro".

De cara al GP de España, primera cita europea de la Fórmula 1, Christian Horner comentaba las novedades del equipo que dirige con estas palabras: "Contamos con un paquete de mejoras bastante ligero y serán las normales en el alerón trasero y delantero". Visto lo anterior, el británico dejaba claro que "es una evolución más que una revolución", pues estas mejoras están centradas en distintos aspectos del equilibrio del coche. Como la moral sigue alta por Milton Keynes, a pesar que los resultados tampoco son tan brillantes como se presuponían, Horner cerraba su intervención con un órdago a la grande: "Hemos reducido la distancia desde comienzos de año. En Melbourne tuvimos una buena carrera y Max presionó a Hamilton durante la mayor parte del tiempo. Baréin expuso algunas cosas que hemos mejorado, mientras que China fue mejor y Azerbaiyán, también".

Por fortuna y como buena noticia para Williams, algo que no abunda para este equipo británico, se ha sabido que percibirán una indemnización por el incidente de la pista de Bakú. El promotor de la carrera, Arif Rahimov, dijo: "Obviamente, es nuestra culpa, lo admitimos. Además es algo que no debería haber pasado, así que les pedimos disculpas y les mandamos un ramo de flores. Queremos asegurarnos de que solucionen sus problemas lo antes posible". Luego, pensando en el próximo Gran Premio, George Russell como piloto de la escudería, admitía que tiene alguna esperanza de mejora al contar con pequeñas novedades sobre el monoplaza: "Tenemos algunas actualizaciones para la carrera, desde aspectos en la aerodinámica hasta de frenos. No es una actualización completa, pero nos dará una dirección clara sobre en qué tenemos que centrarnos, así que seguro que nos ayudará a comprender si tenemos alguna esperanza para el resto de la temporada o no".