La semana que vivimos 'peligrosamente': mejor por libre

En Red Bull le siguen dando vueltas a la diferencia en cuanto a prestaciones y rendimiento en pista entre Max Verstappen y Pierre Gasly y dado que en el Gran Premio de Austria, Gasly tras un buen arranque, le dobló su compañero de equipo, a la postre, vencedor de la carrera, el equipo no tuvo más remedio que acudir a medidas tales como desmontar completamente el RB15 del francés, para comprobar que nada está mal en el monoplaza. Días después Helmut Marko anunció que Gasly correría con la configuración de Verstappen en Silverstone, para concluir su exposición con un claro toque de atención hacía el joven piloto: "Pierre se ha equivocado desde el comienzo de la temporada, por ejemplo, con los dos fallos en Barcelona en el peor momento posible. Ha hecho algunas carreras sólidas aquí y allí, pero aún le falta solidez en general".

En los días previos a la carrera de Silverstone, Daniel Ricciardo expresaba sus sensaciones tras la victoria de Verstappen en Austria, ya que era fácil plantearse el hecho de si aún le da vueltas a su decisión de cambiar de escudería al término de la temporada 2018. "Honestamente, no me arrepiento", dijo de manera clara y rotunda el actual piloto de Renault, para reconocer a continuación que una parte de él "se alegró de que tuvieran una buena carrera". Sin embargo el australiano, a continuación, no dejaba pasar la ocasión para recordar que el año pasado Red Bull, a estas alturas, ya tenía tres victorias en su haber. "Realmente de quedarme allí, hubiera sido para intentar ganar un título. Ellos actualmente están lejos de poder hacerlo, así que no pienso que hubiese conseguido nada más al quedarme. Yo ahora sólo trato de construir algo en Renault y tengo mucho trabajo que hacer", confesaba para concluir el australiano.

McLaren parece que se ha fijado como objetivo en los próximos años, intentar que a partir de 2021 la Fórmula 1 se mueva con un máximo de unos 155 millones de euros por equipo, algo muy complejo de consensuar entre todas las escuderías, según comentaba el director del equipo con estas palabras: "Para un equipo como nosotros, ese límite presupuestario es la única forma con la que podemos volver a pelear con los tres grandes". A continuación, Andreas Seidl remarcaba que esa es la dirección correcta para poder luchar entre todos de una manera justa y equitativa. Mientras tanto y a la espera que ese milagro pudiera producirse, Seidl cerraba su exposición con lo siguiente: "Deberíamos ser mejores con lo que tenemos. No soy amigo de buscar de forma constante excusas dentro de la normativa o las diferencias de presupuesto. En este momento, mi objetivo es sacar el potencial del equipo en las circunstancias que tenemos".

Como no podía ser de otra manera, el vencedor de la carrera celebrada en el circuito de Silverstone declaraba emocionado nada más bajarse de su monoplaza: "Hoy es uno de los mejores días que puedo recordar y me he sentido fuerte desde el inicio". Seguidamente Lewis Hamilton desvelaba que había salido bien y que atacó a fondo casi desde el principio, para después parar durante el coche de seguridad, pues era el momento perfecto. Más adelante el británico, reconocía que esta victoria era muy particular y recordaba también la del 2008, además de agradecer a todo el equipo el trabajo desplegado. "Ganar en casa es el momento más especial que un deportista puede tener. Agitar la bandera es algo mágico. No sólo ganas para ti, sino también para el público, para tu familia. Será agradable en unos años volver a ver mi foto de hoy con la bandera", expresaba Hamilton ante todos los suyos para terminar.