GP Singapur F1 2018

Hamilton se hace grande con la Pole de Singapur, Vettel 3º

15/09/2018 16:00

Lewis Hamilton desencadenado. El líder del Mundial ha dado la campanada en Singapur con una Pole Position que no entraba en los planes de Mercedes. Mazazo a Sebastian Vettel, que partía como favorito pero no ha pasado de la tercera posición. Mañana saldrá por detrás de Max Verstappen, que ha situado su Red Bull en segunda posición.

En la zona media, genial actuación de Sergio Pérez. El mexicano partirá séptimo después de superar por cuatro décimas de diferencia al Haas de Romain Grosjean. Fernando Alonso y Carlos Sainz lo harán desde la undécima y duodécima posición de la parrilla, con libertad para elegir neumáticos para la primera parte de la carrera.

 

 

La noche cayó sobre Singapur a tiempo para la sesión de clasificación, que cobraba más importancia que en otros Grandes Premios dada la dificultad para adelantar en el circuito del Marina Bay. La lluvia se mantuvo alejada del trazado pese a las previsiones meteorológicas, y así los neumáticos de seco fueron protagonistas desde el primer minuto hasta el último.

Sebastian Vettel llegaba con la etiqueta de favorito tras su actuación en los Libres 3, en los que fue medio segundo más rápido que su rival Lewis Hamilton. Toda la presión estaba en el alemán de Ferrari, que el viernes tocó el muro y era consciente de que no podía permitirse más errores si de verdad quería cerrar la brecha en la pelea por el Mundial.

También era un sábado ilusionante para los pilotos españoles, que sabían que tenían una oportunidad de oro para estar en la lucha por la Q3. Fernando Alonso había sido décimo en los entrenamientos matinales, mientras que Carlos Sainz, con las últimas actualizaciones aerodinámicas de Renault, decimotercero. Ambos se vieron entorpecidos por coches más lentos en sus respectivas vueltas rápidas, por lo que esperaban arañar un poco más de rendimiento cuando llegase el momento de la verdad.

Uno de los puntos de interés en las horas previas a la clasificación era la estrategia a seguir con los neumáticos, sobre todo después de que se confirmarse que había 1,6 segundos de diferencia entre el ultrablando y el hiperblando. El compuesto rosa se perfilaba como el gran protagonista de la sesión, aunque pasar a la Q3 con él suponía arriesgarse a lidiar con su degradación en los primeros compases de la carrera.

Cuando comenzó la Q1, los Ferrari salieron a pista inmediatamente. No así los Mercedes y los Red Bull que, conscientes de que la temperatura bajaría progresivamente, prefirieron esperar a que mejorasen las condiciones del asfalto.

Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen cumplieron sin sobresaltos, y así certificaron el pase a la siguiente fase. El alemán comenzó conservador en 1'39"126, pero apretó en su siguiente vuelta e hizo un 1'38"218. El finlandés se quedó en 1'38"534.

Luego llegó el turno de los Mercedes, que, a diferencia de los Ferrari, escogieron el compuesto ultrablando para ahorrarse una unidad del juego más radical. Lewis Hamilton hizo un 1'39"717 y Valtteri Bottas un 1'39"291.

Los Red Bull sí optaron por los hiperblandos, con los que se catapultaron a la zona segura de la clasificación. Daniel Ricciardo se puso líder con un 1'38"153, mientras que Max Verstappen escaló a la cuarta posición con un 1'38"751.

A falta de tres minutos, Bottas y Hamilton eran octavo y décimo, pero sus ultrablandos les dejaban expuestos a los ataques de la zona media. Lewis estaba seis décimas por encima del corte.

Lo que siguió a continuación fue una sucesión de vueltas rápidas que amenazó con eliminar al líder del Mundial. Nico Hülkenberg, Charles Leclerc, Fernando Alonso y Marcus Ericsson le superaron, y así el multicampeón cayó a la decimocuarta plaza. Se salvó, pero por dos décimas y con un susto.

Varios pilotos cometieron errores en los últimos compases: Stoffel Vandoorne y Sergey Sirotkin acariciaron el muro en la curva 21, y Lance Stroll tomó una escapatoria en el último parcial.

En la lista de eliminados, la gran sorpresa fue el Haas de Kevin Magnussen. Le acompañaron Brendon Hartley, Stoffel Vandoorne, Sergey Sirotkin y Lance Stroll.

 

Alonso: "Hemos peleado por la Q3, un buen paso adelante"

 

En la Q2, variedad en la elección de neumáticos. Ferrari se apresuró a sacar sus monoplazas para hacer un primer intento con los ultrablandos, que les podían proporcionar una ventaja de cara al domingo. Mercedes y Red Bull optaron por los hiperblandos.

Kimi Räikkönen fue el primero en poner en marcha el cronómetro, pero bloqueó en la entrada de la curva 8 y abortó su primer intento. Sebastian Vettel cerró una vuelta limpia, pero se quedó en un modesto 1'38"854.

La estrategia de Ferrari resultó errónea, pues Vettel apenas era décimo. Eludía el corte por ocho centésimas. Cuando los ingenieros se percataron, llamaron a los dos monoplazas para asegurar la jugada con el compuesto rosa.

Quien brilló en esta fase de la clasificación fue Red Bull, que neutralizó la ventaja que Mercedes le había sacado hasta ese momento. Max Verstappen era líder provisional con un 1'37"214, por delante de Lewis Hamilton y su 1'37"344.

A cinco minutos del final, Vettel y Räikkönen regresaron a pista con hiperblandos para certificar el pase a la siguiente criba. El finlandés se puso primero con un 1'37"194 y el alemán se quedó quinto con un 1'37"876, entorpecido por coches lentos en el último parcial.

Cayeron los minutos y también cinco pilotos, entre ellos Fernando Alonso y Carlos Sainz, que terminaron undécimo y duodécimo.  Se quedaron fuera de una Q3 que parecía más posible que en otros circuitos. El asturiano estaba contento, porque sabía que tenía libertad de neumáticos para la carrera. El madrileño estaba más molesto, porque no sintió confianza en su coche. Charles Leclerc, Marcus Ericsson y Pierre Gasly completaron la lista de eliminados.

 

Sainz: "Mi coche involucionaba cuando la pista evolucionaba"

 

En la Q3 hubo dos Ferrari, dos Mercedes y dos Red Bull, los seis candidatos a la Pole. Los cuatro acompañantes de la zona media eran los dos Force India, el Haas de Romain Grosjean y el Renault de Nico Hülkenberg.

En el primer envite saltó la sorpresa, en forma de un Lewis Hamilton desencadenado que reventó el cronómetro con un magistral 1'36"015. Max Verstappen se puso segundo con un 1'36"334. Sebastian Vettel tuvo una vuelta con un bloqueo y varias correcciones, y se quedó tercero con un 1'36"628, a seis décimas de su rival por el Mundial. Valtteri Bottas era cuarto -1'36"786- y Kimi Räikkönen quinto -1'37"403-, con Daniel Ricciardo sexto -1'37"608.

A falta de tres minutos, volvieron para el último intento. La presión por superar el estratosférico tiempo de Hamilton era tan grande que ni Verstappen ni Vettel mejoraron sus parciales, lo que les condenó a la segunda y tercera posición de la parrilla. Hamilton tampoco progresó, pero no lo necesitó. Bottas, Räikkönen y Ricciardo sí lo hicieron, pero no avanzaron en la clasificación.

Pole Position magistral de Lewis Hamilton, que atestó un golpe psicológico a Sebastian Vettel en un circuito donde Ferrari partía como gran favorita. La primera posición le dejaba en una situación inmejorable de cara a la carrera, en la que su rival se vería obligado a remontar por enésima vez.

En la zona media, Sergio Pérez se hizo fuerte en la cuarta posición con un 1'37"985 como mejor tiempo personal. Tres décimas por delante del Haas de Romain Grosjean y de su compañero Esteban Ocon. Nico Hülkenberg completó el Top 10 con su Renault, lejos de las previsiones iniciales de la casa de Enstone.

El GP de Singapur, domingo a las 14:10 CEST.

 

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