¿Es Räikkönen suficientemente bueno para Ferrari?

Muchos estarán sorprendidos por esta decisión, aunque los rumores ya apuntaban en esta dirección, dado que el campeón del mundo de 2007 cumplirá 39 años durante la temporada de 2018. Más allá de opiniones, lo extraño es que Ferrari lo anuncie antes del GP de Bélgica y no dentro de una semana y media, con razón del GP de Italia. Quizá se reservan el protagonismo de Monza para confirmar la renovación de Sebastian Vettel.

La cuestión es que finalmente Räikkönen se lleva uno de los asientos más preciados de cara al futuro cercano, y no sería precisamente por escasez de opciones para Ferrari. No hace falta mirar fuera del equipo, aunque también sonaron pilotos como Fernando Alonso, Max Verstappen, Daniel Ricciardo, Lewis Hamilton, Carlos Sainz, Valtteri Bottas, Sergio Pérez, Esteban Ocon… E incluso Nico Rosberg.

No hace falta mirar fuera del equipo italiano porque ellos mismos ya poseían las tres mejores opciones –aparentemente– para su futuro: Kimi Räikkönen, Charles Leclerc y Antonio Giovinazzi. La cuestión ahora es saber por qué finalmente fue el piloto finés el que 'se llevó el gato al agua'.

¿POR QUÉ RÄIKKÖNEN?

Kimi Räikkönen ha asumido desde su regreso a Ferrari en 2014 el rol de segundo piloto. Salvo en 2016, el Iceman siempre ha estado por detrás de su respectivo compañero de equipo –primero Alonso y ahora Vettel– así que manteniendo a Kimi, Ferrari evita un potencial problema de egos o de jerarquía, algo que puede complicar una potencial lucha por el Mundial. Irónicamente, ese fue el detonante que dio a Räikkönen su único título de campeón de Fórmula 1.

Räikkönen ha demostrado que no tiene problemas en ceder la posición a Vettel si puede ser determinante para el Mundial, ya sea de forma más o menos intencionada. O más que ceder, no adelantar al germano, como vimos en Hungría. Es curioso que Räikkönen estuvo toda la carrera quejándose mucho por radio de que era más rápido que Vettel y que le dejasen pasar, cosa que obviamente Ferrari no hizo. Lo extraño es que parecía realmente enfadado, y al acabar la carrera, la expresión y las palabras de Kimi no parecían mostrar ningún tipo de enfado por haber 'perdido' la victoria.

Lo mismo pasó en Mónaco. Räikkönen hizo la Pole y lideraba la carrera mientras que Vettel no lograba adelantarle. Por azar –quiero pensar– Ferrari acertó con la estrategia de Vettel y ese 'overcut' le dio la victoria al dorsal número cinco por delante de Kimi. Pilotos como el mismo Vettel, Verstappen o Hamilton han demostrado en el pasado que si su compañero de equipo les adelantaba por estrategia, no tenían miedo de quejarse por radio o en el post-carrera delante de los medios. Kimi, en cambio, no dijo nada.

Ferrari cree que Vettel es su piloto franquicia y quién puede darles Poles, victorias y títulos. Kimi podría conseguirlo también, por qué no, aunque parece que los italianos no depositan sus esperanzas en ello, simplemente en que sea un gran escudero, no haga mucho ruido fuera de la pista y que aporte puntos al equipo. Si es así, ¿cómo Ferrari no iba a renovar a Räikkönen viendo cómo ha ido esta primera mitad de 2017?

^{© Sutton Images – Sebastian Vettel por delante de Kimi Räikkönen en la conclusión del GP de Hungría de 2017.}

¿POR QUÉ LECLERC?

Sin embargo, muchos aficionados se quejan de que Ferrari es demasiado conservador en su elección de pilotos con aquella filosofía de no fichar a jóvenes promesas, sino a pilotos consagrados en la Fórmula 1, y por ello muchos pedían la presencia de Charles Leclerc junto a Vettel en 2018 (si Vettel renueva, claro).

Charles Leclerc, para resumir rápidamente, ganó el Campeonato de GP3 en su año debut en 2016 y este año, también como rookie, ha batido todos los récords de la Fórmula 2 –GP2– con seis Poles de siete posibles –le quitaron la última en Hungría post sesión–, cinco victorias, 50 puntos de margen en el Mundial, y sobre todo, la sensación de ser insuperable, inalcanzable.

Leclerc tiene experiencia en varios test con Ferrari –fue el piloto más rápido en los test colectivos post-GP Hungría– y con Haas, equipo con el que disputó algunas sesiones de Libres oficiales durante 2016. Es un diamante en bruto, sin lo de bruto.

Leclerc tiene que cumplir los 20 años todavía y ya sabe lo que significa ganar, lo que significa pilotar un F1 en sesión oficial, un F1 de Ferrari en 2017 y desde pequeño ha mamado la filosofía de Ferrari, así que… ¿por qué esperar?

Probablemente Ferrari le hará esperar otro año para no cargarlo demasiado temprano con la presión de defender los colores del equipo más laureado de la historia de la F1. Así que todo parece indicar a que Leclerc estará en Sauber en 2018 para coger experiencia en F1 y en 2019 será el reemplazo de Räikkönen. Esta es ecuación que haría que la renovación de Räikkönen sea más entendible por parte de todos los aficionados.

^{© Sutton Images – Charles Leclerc celebra su última victoria en la Fórmula 2.}

¿POR QUÉ GIOVINAZZI?

La otra alternativa entre los jóvenes probadores de Ferrari era (o es) Antonio Giovinazzi. El italiano apareció sin que nadie se lo esperase en la lucha por el título de GP2 en 2016, que acabó perdiendo en favor del protegido de Red Bull, Pierre Gasly. Sin embargo, esa actuación como rookie le garantizó un contrato en calidad de tercer piloto de Ferrari para 2017 y probador de Sauber también.

Es por ello que la lesión de diciembre de 2016 de Pascal Wehrlein permitió a Giovinazzi disputar una semana de pretemporada junto a Sauber y de forma inesperada, tanto el GP de Australia –donde deslumbró muy positivamente– como el GP de China –donde desilusionó con dos accidentes entre sábado y domingo–.

Giovinazzi deportivamente es un poco irregular. Muy rápido, muy agresivo, pero aún comete errores que un piloto de Ferrari aparentemente no debería permitirse, y es por ello que parece que Leclerc está ya por delante suyo en la escala hacia Maranello.

Sin embargo, Giovinazzi tiene dos cosas que Leclerc nunca podrá igualar. Es mayor, cumple 24 años en diciembre, y tiene más experiencia –incluyendo dos GP enteros este año en Fórmula 1– y sobre todo, es italiano. 

Sí, ser italiano puede marcar la diferencia entre estar en Ferrari y no. Algo tan rudimentario como aleatorio, ¿verdad? A Ferrari le gustaría… Bueno, más que le gustaría, Ferrari querría… Realmente, Ferrari necesita tener un piloto italiano. Ferrari necesita hace muchos años tener a un campeón italiano en sus filas.

Ferrari no tiene a un piloto italiano como piloto oficial durante toda una temporada desde que contratasen a Ivan Capelli en 1992. Sí, hace 25 años. Y si nos ponemos muy técnicos, Capelli no corrió las últimas dos carreras, aunque lo reemplazó otro italiano, Nicola Larini.

La Scuderia parecía que había encontrado en Giovinazzi finalmente su candidato ideal, y muchos ya daban por hecho que sería el reemplazo de Räikkönen en 2018, aunque la sensación es que después del desastre de China, las opciones de Giovinazzi se han reducido notablemente y necesitará algo más que ser italiano para acceder al preciado volante.

^{© Sutton Images – Antonio Giovinazzi (izq.), vestido de Sauber, bromea en la rueda de prensa del GP de China con Räikkönen (der.).}

... Y LO MÁS IMPORTANTE, ¿POR QUÉ RÄIKKÖNEN NO?

Porque Räikkönen ha tenido muchas oportunidades para demostrar que es uno de los mejores pilotos de la parrilla o que al menos, puede estar al nivel de los mejores, y no lo ha hecho. Como decíamos antes, desde su regreso a Ferrari en 2014, siempre ha ido a remolque de sus compañeros de equipo.

Por muy duro que sea para los seguidores de Räikkönen, hay que reconocer que para la mayoría de seguidores de la Fórmula 1, que Räikkönen ganase en 2014 a Alonso o desde 2015 a Vettel, no deja de ser una sorpresa. Y no debería ser así.

No debería ser así porque Ferrari no se corona Campeón del mundo de equipos de F1 desde el año 2008. Si no lo consiguen en esta, se cumplirían nueve temporadas sin hacerse con el Mundial. Este año, hoy por hoy, están a 39 puntos de Mercedes y sin ninguna garantía de poder remontar. 

¿Por qué? Porque ambos pilotos de Mercedes han ganado carreras en 2014, 2015, 2016 y 2017. De las 11 carreras de este año, Hamilton ha ganado cuatro y Valtteri Bottas dos. Hasta Bottas, que tampoco parece que vaya a marcar una etapa en la F1 se muestra más fuerte que Räikkönen. Y eso es algo que Ferrari no puede permitirse.

Si quieren estar a la par de Mercedes o Red Bull, tienen que estarlo en todo sentido. Lo están en cuanto al coche en 2017, no cabe duda, pero los dos equipos citados aquí tienen a dos pilotos que ya no sorprende que ganen carreras. Esa sensación Ferrari no la tendrá con Kimi Räikkönen y por eso podría ser un error renovarle.

Desde el Mundial de Kimi en 2007, Ferrari no ha ganado más coronas individuales. Parece una situación 'grave' que un equipo de la talla de Ferrari lleve diez años sin tener al 'mejor' piloto de la parrilla. Y para intentar romper con la estadística, necesitan a dos pilotos capaces de pelear por el mundial. En 2017, Räikkönen está luchando contra los pilotos de Red Bull –y perdiendo con Ricciardo–, ni hablar de Vettel o de los hombres de Mercedes.

Pero no solo hablo de sensaciones, fijémonos en los números, los datos fríos que no engañan. Abajo de estas palabras, tienen una tabla original con todas las posiciones de clasificación y puntos logrados en carrera por parte de Kimi Räikkönen y Sebastian Vettel desde 2014 hasta la última carrera disputada en 2017 hasta la fecha.

Nótese que en 2014 no eran compañeros de equipo, aunque podemos ver como en cada GP hemos resaltado con un color verde de fondo el piloto entre ellos dos que haya quedado por delante del otro, marcado en rojo.

Al final de cada año, tenemos la posición media de clasificación para ambos pilotos y el total de puntos cosechados después de cada campaña. Por ejemplo, en 2014 podemos ver como la posición media de clasificación de Räikkönen fue de 8,41 mientras que Vettel 4,62. Y en cuanto a puntos, Vettel logró 167 mientras que Räikkönen 55, quedando por delante de Vettel en solo cuatro ocasiones en todo el año.

Los datos no engañan decía y vemos como siempre, Vettel acaba en el global de una temporada pintado de verde sobre Räikkönen. En todos los casos, menos en cuanto a las posiciones de los sábados de 2016, donde Kimi ganó 10-9 en total y aunque sea mínima, su posición promedio es mejor.

Si vamos a la última fila de la tabla, veremos la suma de todos los años, y de media, podríamos decir que Vettel siempre sale una posición por delante de Kimi en parrilla y que en tres temporadas y media, Seb ha sumado nada más y nada menos que 352 puntos más. Una auténtica barbaridad.

De una forma más visual, podemos ver abajo un gráfico con la evolución de puntos conseguidos por Räikkönen (línea azul) y Vettel (línea roja) desde 2014 hasta la fecha. Los datos son extraídos de la tabla, así que las conclusiones básicamente son las mismas, pero de esta forma se puede ver de forma más gráfica el dominio de Vettel sobre el piloto finlandés.

En 2016, sin embargo, vemos como los picos de Räikkönen superan hasta en tres ocasiones los de Vettel, y no es hasta las últimas carreras que Vettel acaba por delante. 2016 sí fue un buen año para Räikkönen, aunque parece que tanto en 2015 como en 2017, no ha estado o no está a la altura de Vettel en cuanto a puntos recogidos durante las carreras.