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El nuevo director deportivo de la Formula 1, Ross Brawn, ha indicado que le gustaría realizar carreras no competitivas en un futuro, con el objetivo de tener la capacidad para ofrecer nuevas opciones a los espectadores y crear espectáculos que hasta el momento no están permitidos por la actual normativa. Con el ejemplo de las pruebas realizadas en el pasado, cree que sería la mejor manera de desarrollar la categoría y de conseguir agradar a los aficionados.

La temporada 2017 abre una gran oportunidad para los equipos pequeños de progresar y aspirar a mejores resultados. Siguiendo esta línea, Jolyon Palmer cree que algún equipo podría emular la hazaña que hizo Ross Brawn en 2009 con BrawnGP.

Desde su llegada en 2011, no han sido pocos los que han criticado el sistema de reducción de drag, más conocido como DRS. Dicho elemento se introdujo en los monoplazas para mejorar los adelantamientos, pero no ha hecho más que empeorar la calidad de estos.

El jefe del equipo Mercedes, Toto Wolff, tiene memoria histórica y sabe que en cambios normativos tan significativos como los de 2017 la F1 ha presenciado cambios radicales en el orden de la parrilla, como en su experiencia de 2014 o sobre todo el título de Brawn en 2009, por lo que no confía en que serán mejores que ningún otro equipo, a priori.

Hace escasas semanas se confirmó la compra de la Fórmula 1 por el conglomerado norteamericano, Liberty Media, justo en un momento en que la categoría reina vive sus horas más bajas. Los nuevos propietarios, que no han tenido ninguna experiencia previa en automovilismo, han aterrizado al Gran Circo con un triunvirato formado por Chase Carey, como director ejecutivo, Sean Bratches, que será el responsable de las operaciones comerciales y Ross Brawn, el director general deportivo. 

Flavio Briatore es un hombre conocido en el paddock. Llegó como gerente de una tienda y a mediados de los 90 ya contaba con dos títulos a sus espaldas y se anotó el tanto de criar y enseñar - en Fórmula 1 - a un tal Michael Schumacher. Ya a mitad de la siguiente década, su segundo campeón apareció: Fernando Alonso. Tras abandonar el Gran Circo a raíz del 'crashgate' de Singapur 2008, han sido constantes los rumores que señalaban el retorno del italiano. 

Zak Brown y Ross Brawn han hablado sobre la estandarización de piezas, o lo que es lo mismo, piezas cliente para equipos pequeños. Este sistema lo ha utilizado Haas en 2016 y funcionó. Más o menos. Los americanos no fueron un equipo de zona alta, pero sí lucharon en la media. Los altos costes de poner un F1 en pista a día de hoy son uno de los aspectos más debatidos y esta estandarización de piezas puede ser una medida para reducir la inversión de los equipos. 

Durante la pasada reunión del Grupo Técnico de la FIA, celebrada en Ginebra, a Ferrari lo representó Mattia Binotto. Sin embargo, el de Lausana quiere aprovechar la experiencia del sudafricano Rory Byrne, que ya representó a la Scuderia en anteriores citas junto al director técnico y el jefe de diseño, tal y como apunta la edición italiana del portal americano Motorsport.com.

Tal día como hoy, uno de febrero, del año 2010, Mercedes puso en pista su primer monoplaza después de regresar a la Fórmula 1 tras no competir desde el año 1955. Con la llegada de la era híbrida, el equipo alemán cosechó los mejores números de su historia.

Liberty Media ha entrado en la Fórmula 1 con paso firme y con unas ideas muy convincentes para todo el paddock. El jefe del equipo Haas, Güenther Steiner, considera que el triunvirato formado para suceder a Bernie Ecclestone es clave para conseguir que la Fórmula 1 no decaiga y pueda mejorar notablemente, sobre todo tecnológicamente y en la captación de nuevos aficionados.

Cyril Abiteboul ha instado a Liberty Media a modificar el formato de los Grandes Premios y convertir la acción en pista en un espectáculo deportivo enfocado exclusivamente a la diversión de los aficionados. Según el director general de Renault, la filosofía regeneradora con la que Chase Carey pretende transformar la Fórmula 1 debe incluir una "reflexión" sobre la planificación actual de las sesiones de entrenamientos, especialmente las pruebas libres del viernes.

Ross Brawn sugiere eliminar las banderas azules de cara a un futuro en la Fórmula 1, con el objetivo de crear nuevos desafíos en la pista entre quienes van al frente y los más rezagados. 

Tras unos últimos años que han destacado por algunas decisiones que han sido cuestionadas, el rumbo de la Fórmula 1 variará con Liberty Media al timón, lo que hace preguntarse las bases sobre las que la empresa americana edificará la categoría. Sin embargo, en varias declaraciones, los nuevos dirigentes han asegurado que apostarán por aumentar el espectáculo y las audiencias para conectar con unos aficionados que las últimas temporadas han estado un poco desencantados. Para Alain Prost, uno de los pilotos más laureados de la historia, la conclusión está clara. Hay que bajar los precios de las entradas.