Renault Rafale

El Renault Rafale ofrece dos motores, uno híbrido y otro híbrido enchufable.

El primero aúna un bloque térmico de 1.2 litros con dos motores eléctricos. De estos últimos, uno de ellos proporciona tracción al eje delantero y el otro tan sólo actúa como generador-motor. La batería tiene una capacidad de 2 kilovatios hora.

El motor térmico es un 1.2 litros de tres cilindros con 131 caballos y 205 Newton metro de par máximo.

Se acopla a una caja de cambios multimodo, con dos marchas para el motor eléctrico principal, de 70 caballos, y cuatro marchas para el bloque tricilíndrico de gasolina.

La base térmica del híbrido enchufable es la misma, aunque con 150 caballos y 230 Newton metro. La parte eléctrica añade otro motor eléctrico que actúa sobre las ruedas traseras con 136 caballos. La potencia máxima que aporta el sistema eléctrico es de 160 caballos. En total, el Rafale PHEV entrega 300 caballos.

La batería que alimenta la parte eléctrica es de 22 kilovatios hora de capacidad, lo que permite superar los 100 kilómetros de autonomía sin emisiones. La recarga de la misma se puede realizar hasta una potencia de 7,4 kilovatios, condición en la que demanda 2 horas y 55 minutos para recuperar el 100% de la autonomía.

El Rafale PHEV tiene un modo E-Save que permite guardar el 25% de la autonomía eléctrica para cuando sea necesario. Su velocidad punta en modo eléctrico es de 135 kilómetros/hora.

El sistema de cuatro ruedas directrices llamado 4Control Advanced es de serie desde el acabado Esprit Alpine y opcional en el básico. Los neumáticos traseros giran al contrario o en el mismo sentido que los delanteros en función de la velocidad del momento. Esto permite un considerable aumento de la agilidad en espacios pequeños al reducir el radio de giro al mismo que tiene, por ejemplo, un Renault Clio además de aumentar la estabilidad cuando se circula más deprisa.