Audi RS 7 Sportback

El motor del nuevo Audi RS 7 Sportback es un V8 TFSI biturbo de 4.0 litros con 600 caballos de potencia y 800 Newton metro de par máximo. Se beneficia de la presencia de un sistema microhíbrido de 48 voltios que incluye un motor de arranque/alternador capaz de recuperar hasta 12 kilovatios de energía. Si se escoge la versión performance, la potencia sube hasta los 630 caballos y el par motor lo hace hasta los 850 Newton metro.

Gracias a la tecnología de desconexión de cilindros, el bloque puede funcionar automáticamente con cuatro cilindros desconectados.

Asociado a esta mecánica, se dispone de serie de un cambio automático de ocho velocidades con un nuevo ajuste para hacerlo todavía más rápido. Incluye función Launch Control y tracción a las cuatro ruedas.

En su variante más prestacional, el Audi RS 7 Sportback es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 3,4 segundos. La velocidad punta está limitada electrónicamente a 250 kilómetros/hora en el modelo base, pero alcanza los 280 kilómetros/hora con el paquete RS opcional y llega a 305 kilómetros/hora con el paquete dinámico RS plus.

Mediante el sistema Audi drive select se puede escoger entre seis perfiles disponibles: comfort, auto, dynamic, efficiency y los modos RS1 y RS2 personalizables, que pueden activarse directamente a través de un botón 'RS MODE' en el volante. El Audi drive select influye en la gestión del motor y de la caja de cambios, en la asistencia de la dirección, en la suspensión, en la dirección dinámica en las cuatro ruedas, en el sistema de escape y en el diferencial deportivo mecánico quattro. Este último, se ha revisado a conciencia y está situado en posición central.

El diferencial deportivo trasero puede distribuir el par entre las ruedas de cada lado en todas las situaciones de funcionamiento. Por ejemplo, al acelerar en una curva, el par se carga sobre la rueda exterior para contribuir a reducir el subviraje. En caso de detectar sobreviraje, el diferencial redirige la energía a la rueda interior para tratar de estabilizar el vehículo. El diferencial se controla a través de la unidad electrónica de control de chasis, cuyas características son ajustables desde Audi drive select.

Ofrece de serie un nuevo sistema de suspensión de cinco brazos en ambos ejes. Está fabricado en aluminio, y se combina con una amortiguación neumática RS. Ésta tiene tres modos de funcionamiento que parten de una posición de carrocería 20 milímetros más cercana al suelo que el A7 convencional. Se puede bajar hasta 10 milímetros más o elevar 20 con la función 'lift'. 

Cuenta con muelles de acero y amortiguadores ajustables de tres vías, y la marca asegura que reduce los movimientos de cabeceo y balanceo. Contrarresta los movimientos de la carrocería sin la intervención de componentes electrónicos. El conductor puede elegir entre un modo confort y un 'dynamic', más deportivo.

De serie incluye dirección progresiva con una multiplicación directa y deportiva, de modo que a medida que aumenta el giro del volante la relación disminuye y el conductor necesita girar menos el volante. Eso reduce el esfuerzo en tráfico urbano y facilita una conducción deportiva en carreteras sinuosas. Para un control superior, el coche puede equiparse con dirección dinámica a las cuatro ruedas. A bajas velocidades, las ruedas traseras giran al contrario que las delanteras hasta cinco grados para reducir el diámetro de giro en un metro, y así ser más ágil en el paso por curva. Por encima de los 100 kilómetros/hora, las del eje trasero siguen el movimiento de las delanteras con un giro de hasta dos grados que aporta estabilidad, dinamismo y seguridad.