Dicen que la moda es cíclica y que todo vuelve. El estampado Príncipe de Gales, las gafas estilo años 70, los pantalones de campana y, por supuesto, los coches con diseño retro. Si a principios del siglo XXI aparecían vehículos como el Chrysler PT Cruiser o el Volkswagen New Beetle, que intentaban dar un toque moderno a los diseños clásicos, esta década de los 20 que empezamos hace ya casi dos años nos trae nuevas propuestas asociadas a la tecnología en boga actualmente: la eléctrica.

Si estás pensando en comprar un coche eléctrico pero tu presupuesto no te da para uno nuevo y te has decidido por uno de segunda mano, aquí te presentamos una completa guía rápida con los puntos clave a revisar antes de hacer tu próxima adquisición.

El Salón de Múnich que se celebra estos días deja claras dos cosas: la primera que había ganas de sacar propuestas nuevas, después de un año parado; y la segunda, la clara apuesta por la movilidad eléctrica. Con ese segundo punto como base, nos preguntamos cuáles son las alternativas asequibles que llegarán próximamente al mercado. Vamos a verlo.

Con la llegada de 2021 las marcas se han lanzado en tropel a presentar nuevos modelos eléctricos, como demuestra nuestra lista de los coches eléctricos a la venta en España, que no deja de crecer día a día. Sin embargo, acceder a un automóvil 100% eléctrico a un precio razonable resulta complicado a día de hoy, a pesar de las ayudas del Plan Moves III. Es cierto que existen opciones como el Seat Mii Electric o el recién estrenado Dacia Spring que acercan este tipo de automóviles al gran público, pero no es suficiente.

Cada vez es más habitual encontrarnos en grandes ciudades europeas con áreas de circulación restringidas a diferentes tipos de vehículos. Las Zona de Bajas Emisiones –ZBE–, que así es como se las conoce, buscan reducir al máximo el acceso y circulación de aquellos coches, motos o vehículos industriales que más contaminan en zonas urbanas de gran tamaño. En los casos en los que no se les prohíbe el paso, los que más polucionan sí pueden entrar, pero tienen que pagar una tasa o tarifa por hacerlo. 

Según un estudio del Observatorio de Siniestros Asitur Focus basado en una encuesta realizada a usuarios de coche eléctrico, uno de los mayores inconvenientes que tienen es no encontrar un taller adecuado. La industria del automóvil vive una disrupción total de la forma en la que nos movemos con la incorporación de los vehículos eléctricos. Tan importante como conocer cómo es un coche eléctrico y qué ventajas e inconvenientes tiene adquirir uno, está el saber cómo realizar labores de mantenimiento y reparación. Contar con talleres especializados será dentro de poco una necesidad y una nueva oportunidad de negocio. Es por ello que hoy os exponemos algunos puntos clave para la adaptación del sector de la posventa, así como saber qué conocimientos necesitarán tener los nuevos operarios.

En los últimos días, a raíz de las declaraciones de la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen sobre que "la economía del combustible fósil ha llegado a sus límites", nos preguntamos cómo de preparados estamos para asumir el reto de la movilidad eléctrica y si es factible para las fechas en las que se proponen.

"La economía del combustible fósil ha llegado a sus límites. Queremos dejar un mundo sano, un buen mercado laboral y crecimiento a la próxima generación". Esta frase de la presidenta de la Comisión Europea Úrsula von der Leyen da el pistoletazo definitivo al desmantelamiento del automóvil de combustión interna en un plazo de 14 años, ya que para 2035 los vehículos que se vendan en Europa tendrán que reducir al 100% sus emisiones de CO2. Esto significa que para entonces lo único que podremos comprar serán coches alimentados por electricidad. La manera en la que se obtenga esa energía quedará circunscrita a una red de suministro particular y estatal o bien mediante el uso de hidrógeno, una tecnología que, por el momento, tiene dividido al sector de la automoción.

Con el anuncio de que Europa pone fecha de caducidad al motor de combustión, la incertidumbre de los usuarios no para de crecer ante el desconocimiento de cómo afectará a su forma de moverse. Es por ello que ahora muchos usuarios se plantean adquirir un vehículo híbrido o eléctrico (frente a uno diésel o de gasolina); sin embargo, les asalta la duda de saber si es la opción adecuada para ellos. Con la compra tradicional en desuso ¿Existe alguna solución que permita disfrutar de la movilidad eléctrica pero sin la preocupación de qué pasará en el futuro? La respuesta es sí, renting o compra flexible.

Si hoy salimos a la calle y prestamos atención, veremos que nuestro día a día necesita cada vez más baterías. La búsqueda de portabilidad y escalado de los productos cotidianos ha hecho que, prácticamente, todo tenga un acumulador de energía. Ya sea para un teléfono móvil, un portátil, una cortadora de barba o la linterna que tenemos en casa, la demanda que existe de dispositivos autosuficientes de energía crece sin cesar y cada vez se requiere de ellos mayor capacidad, durabilidad y estabilidad. A esta situación se une ahora la demanda, cada vez mayor, de vehículos eléctricos. Aunque marcas como Tesla han conseguido auténticas proezas en lo que a gestión de sus baterías se refiere, lo cierto es que tanto su capacidad como rendimiento tienen aún mucho recorrido y evolución para hacer de la movilidad eléctrica la primera fórmula para el usuario.

Con la llegada del buen tiempo, pocas cosas hay más gratificantes para un amante de los automóviles que disfrutar de una buena carretera de costa, a cielo abierto, un domingo por la mañana. Sabedores de que los deportivos biplaza son más divertidos para perdernos en una carretera de curvas hoy os queremos proponer el plan contrario, que es disfrutar de un descapotable en familia y por poco dinero.