Kia EV6

El Kia EV6 2022 se ofrece con diferentes niveles de potencia, configuraciones de propulsión o tracción total y dos baterías.

De la mano de la batería pequeña, que es de 58 kilovatios hora de capacidad, tiene 170 caballos de potencia gracias a un motor situado sobre el eje trasero. Ofrece una autonomía máxima de 394 kilómetros.

También como modelo de propusión se puede adquirir el EV6 de la mano de la batería más grande, cuya capacidad es de 77,4 kilovatios hora. En tal caso la potencia es de 228 caballos y la autonomía máxima de 528 kilómetros. Ésta se reduce hasta 504 en el caso de elegir el acabado GT-Line, que por cierto no está disponible con la opción básica de 170 caballos.

La primera versión de tracción total es la que entrega 325 caballos necesariamente asociada a la batería de mayor tamaño. En este caso la autonomía es de 484 kilómetros. Sólo es posible adquirir esta configuración con el acabado GT-Line.

El Kia EV6 GT con la batería grande y configuración de tracción total ofrece la friolera de 585 caballos de potencia con una autonomía de 424 kilómetros. El motor delantero tiene 218 caballos y el trasero 367. Esta versión deportiva es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 3,5 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 260 kilómetros/hora. Cuenta con un diferencial capaz de repartir los 740 Newton metro de par a conveniencia.

El Kia EV6 2022 tiene un sistema eléctrico de 800 voltios como el del Porsche Taycan. Admite recargas a un máximo de 240 kilovatios en el caso de la batería grande y a 180 en el de la pequeña. Kia afirma que la batería puede recuperar del 10% al 80% de su capacidad en 18 minutos o que puede ganar 100 kilómetros de autonomía en menos de cinco minutos.

En el caso de recargar la batería por corriente alterna se puede hacer a un máximo de 10,5 kilovatios. De utilizarse esta potencia, la batería pequeña emplea casi 6 horas en recuperar el total de su autonomía y la grande algo más de 7.

El cargador que incluye el EV6 es bidireccional. Es decir, se puede utilizar la energía almacenada en la batería del coche para alimentar dispositivos externos. La potencia máxima en este caso es de 3,6 kilovatios. La toma para usar esta función del cargador se encuentra en la parte central baja de los asientos traseros.

El EV6 permite elegir entre tres niveles de frenada regenerativa, uno automático y el conocido como i-Pedal, que viene a ser la conducción con un solo pedal especialmente recomendable en ciudad.

La capacidad de remolque del EV6 es de 750 kilos para la versión con la batería pequeña y de 1.600 para cualquiera de las que equipen la grande.

La versión más ligera del EV6 pesa 1.875 kilos.

KIA EV6 2022: IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN

Hace ya bastante tiempo que Kia se quitó el sambenito de ser una marca 'low-cost'. De hecho, ahora, de la mano de su primer coche eléctrico nacido de una plataforma específica bien podrían pasar a considerarse un fabricante 'premium', etiqueta de la que el propio fabricante huye. Hacer las cosas bien –muy bien, de hecho– no tiene que ser sinónimo de alejarse de su cliente tipo. Y es que el Kia EV6 es, literalmente, uno de los mejores eléctricos que se han lanzado hasta ahora.

La versión que hemos probado es la que equipa la batería de 77,4 kilovatios hora y un motor sobre el eje trasero con 228 caballos de potencia. De no haber contado con el acabado GT-Line hubiese sido la que mayor autonomía ofrece. En cualquier caso, esos 24 kilómetros teóricos respecto a la del acabado básico –528 contra 504– que marca la homologación apenas se notarán en el día a día. Con un gasto de 20-21 kilovatios hora a los 100 kilómetros en condiciones reales –al menos, durante los aproximadamente 90 kilómetros que condujimos por todo tipo de vías– la distancia a recorrer entre cargas se mueve entre 350 y 400 kilómetros. Suficiente en todo caso para aguantar la semana laboral con una sola carga si se tiene en cuenta que el desplazamiento medio diario del conductor español es de 58 kilómetros, según diversos estudios.

Sin haber conducido el resto de versiones del Kia EV6 nos atrevemos a decir que la que ha pasado por nuestras manos es la más racional. Además de por la autonomía que ofrece, también porque su potencia es más que suficiente como para afrontar cualquier situación del día a día. De hecho, aunque se circule en el modo de conducción Eco –hay uno Normal y otro Sport, además del Snow para situaciones de baja adherencia–, el rendimiento es más que aceptable.

Es precisamente con el modo más deportivo activado cuando uno se da cuenta de lo bien hecho que está el Kia EV6. Sin ser un coche pensado para afrontar tramos, ofrece un elevado placer de conducción en carreteras secundarias viradas. La respuesta del motor es contundente de primeras y más lineal después, pero rápida en todo caso. No obstante, lo que más llama la atención es la agilidad con la que se mueven las casi dos toneladas que pesa el coche. Siempre da la sensación de ir pegado a la carretera y afronta los apoyos con una gran firmeza que en ningún caso llega a ser incómada. De hecho, sobre todo en ciudad la suspensión trasera se nota más suave que la del Hyundai Ioniq 5, que llega a ser molesta por su dureza. Es en los recorridos urbanos donde sale a relucir una de las carencias del EV6 respecto a sus rivales alemanes. Necesita más metros para completar los giros. No es que su radio sea malo, ni mucho menos, sino que el de los adversarios es mejor, y es algo que se nota cuando se trata de maniobrar con un vehículo que roza los 4,7 metros.

Por último, hay que alabar el tacto del freno que ha conseguido Kia con el EV6. Como sucede con todos los coches eléctricos, éste no es natural al entrar en juego el sistema de regeneración de energía, pero se ha logrado una respuesta que facilita la adaptación al conductor, que no tardará más que unos kilómetros en lograr las deceleraciones deseadas sin dar pie a molestas faltas de precisión que poco o nada tienen que ver con su pericia.