Alpine, ¿esta vez sí?

Hay que decir que hay ‘luces y sombras’ en el viernes de Alpine. Por un lado, Alonso ha sido capaz de terminar los Libres 1 en la tercera posición… ¡con neumático medio! Pero, por otro lado, Sebastian Vettel ha superado al asturiano en la segunda sesión, y además Esteban Ocon ha estado lejos de Fernando.

Si nos fijamos en el tiempo que Fernando Alonso ha marcado en la primera sesión de libres, no sólo es prometedor por haberse quedado a tres décimas de Max Verstappen con un neumático más duro, sino que además hay que destacar que el ovetense no iba con un mapa de motor agresivo –la batería estaba casi a la mitad al final de la vuelta–.

Además, en esa primera sesión ha tenido buen ritmo en tanda larga –Fernando rodaba cómodamente en tiempos de 1’18’’ bajos–, el que quizás ha sido el punto más débil del Alpine en el inicio de temporada.

La segunda sesión ha sido quizás más ‘realista’. Con Sergio Pérez y los Mercedes alejados de la cabeza, la cuarta posición estaba en juego… y esta vez ha ido a parar a manos de Sebastian Vettel. Es cierto que Alonso ha terminado quinto, muy cerca del alemán, pero el hecho de no liderar el grupo medio ya es un paso atrás respecto a lo visto en los Libres 2 de Bakú, y ya sabemos cómo terminó ese Gran Premio.

En cuanto a las tandas largas de Alonso y Ocon en los Libres 2, son difíciles de comparar, ya que han montado un juego nuevo de neumáticos duros y sus rivales directos estaban con compuestos diferentes.

No es ningún secreto que Alpine suele ir más ‘descargado’ que sus rivales en las jornadas de viernes, aunque también es cierto que el trazado canadiense tiene unas características que son del agrado del A522, así que quizás todavía no han mostrado sus cartas.

De todas maneras, para la jornada de mañana se espera la llegada de la lluvia, la cual puede cambiar completamente la situación. La última clasificación sobre mojado fue en Imola, y Alonso amarró el quinto lugar. Alpine, siempre y cuando no haya sido un ‘farol’ este viernes, podría tener una gran oportunidad para colarse entre los ‘grandes’, sobre todo tras la sanción a Charles Leclerc.