Citroën C3

En el año 2022 hubo un terremoto en el mercado francés. No sólo se vendieron menos coches que en toda su historia desde 1975, sino que Dacia se convirtió en la tercera marca más vendida, por detrás de Peugeot y Renault, y por delante de Citroën, que perdió el tercer puesto en un nefasto mes de diciembre. Las consecuencias fueron inmediatas, y a Carlos Tavares, CEO de Stellantis, no le tembló el pulso para hacer lo que ya tenía planeado: destituir a parte de la cúpula de la marca de los chevrones y convertir a Citroën en un claro competidor del mercado de coches de precio accesible. En el año 2023, Dacia aumentó su distancia frente a Citroën en Francia –156.000 frente a 125.000 unidades– así que, pese a tener una amplia gama, Citroën empieza a volver a sus orígenes: coches con excepcional relación calidad-precio, y el nuevo C3 es el primero de todos ellos.

Tras presentar su versión eléctrica, el Citroën ë-C3, disponible desde 22.590 euros, ahora llegan las variantes de combustión. Hay dos, una térmica pura y otra mild-hybrid. La primera se vende a partir de 14.990 euros, un precio que supera por apenas 1.800 el del Dacia Sandero de 90 caballos.