Horner entona el 'mea culpa': "Ha sido un error de cálculo por nuestra parte"

La Q3 del Gran Premio de Singapur fue un absoluto caos. Con la pista en constante mejora, cada vuelta era crucial, y ser el último en pasar por meta era primordial. Es lo que intentó Max Verstappen, que, pese a fallar el primer sector, iba en tiempos de Pole en el segundo. 

Sin embargo, justo cuando encaraba las últimas vueltas, fue llamado a boxes por su equipo, y le obligaban a abortar la vuelta ante las repetidas quejas del neerlandés, que se tuvo que conformar con la octava posición en la parrilla de mañana, mientras sus dos rivales por el título, Charles Leclerc y Checo Pérez, coparán la primera línea de salida.

Christian Horner, jefe de equipo de Red Bull, ha entonado el mea culpa, y ha explicado que Max no ha completado la vuelta al tener combustible justo: "Ha sido un error de cálculo por nuestra parte", ha explicado Horner en declaraciones a Viaplay.

"Creíamos que habíamos puesto combustible para cinco vueltas, y como la pista se secaba tan rápido, teníamos una vuelta extra, en la que Max estaba perfectamente posicionado", ha comentado Horner al término de la clasificación en Singapur.

"Pero obviamente es importante dar la muestra de gasolina necesaria, así que ha sido la llamada más difícil del mundo, justo cuando iba dos segundos y medio por debajo de su tiempo. Se lo hemos complicado nosotros al clasificar octavo", ha explicado el británico.

Max, que iba a por su primera Pole en Singapur, tuvo que abortar, mientras la radio era testigo de su enfado: “Es increíble. No lo entiendo. ¿A qué viene esto?”, ha dicho el vigente campeón del mundo a su equipo.