Lanzó el 500 y salvó Fiat, lanzó Cupra y salvó Seat, y va a revolucionar Renault con el R5 pero, ¿quién es Luca de Meo y por qué Volkswagen lo dejó marchar?

En el Salón de París las marcas del grupo comandado por Luca de Meo han lanzado hasta cinco coches eléctricos: el nuevo R5, el Renault 4 de 2025, el Twingo para 2026 y dos Alpine, además de un Dacia Duster XL con motor híbrido 'made in Spain' pero, ¿Quién es Luca de Meo? ¿Y por qué Volkswagen dejó marchar al genio que lanzó el Cupra Formentor y llevó a Seat a los beneficios? Inexplicable.

EL CREADOR DEL FIAT 500… Y DE ABARTH

Apasionado por el automóvil desde pequeño, Luca de Meo estudió marketing y se enroló en Renault en los años noventa. De ahí saltó a Toyota para capitanear el lanzamiento del Yaris, convertido en coche del año en Europa… y en gran éxito de ventas. El grupo italiano Fiat lo fichó y, en pocas semanas, ve un prototipo de un Fiat 500 retro –'trepiuuno' se llamaba– y contacta al diseñador de Ferrari, Frank Stephenson, creador del Mini de BMW, para que diseñe la versión de serie con la plataforma del Panda. El 500 llega al mercado y el éxito es descomunal, devolviendo a Fiat los beneficios. Entre sus estrategias de marketing: poner banderas italianas en los coches, lanzar ropa, calzado y hasta bombones con el márchamo Fiat y recuperar así el orgullo de conducir un coche 'made in Italy'… aunque el 500 se fabricaba en Polonia. Dentro de Fiat lanza Abarth con el 500 y el Grande Punto, revive Alfa Romeo con el pequeño Mito y el compacto Giulietta y se convierte, con menos de 40 años, en CEO de Alfa y director de marketing de Fiat cuando suena una llamada…

DIRECTO A AUDI SPORT

En 2009 De Meo deja Fiat a los 41 años, y el mismo día bajan las acciones de la marca. Poco después se incorpora a una empresa de éxito como Audi, pero que sólo sabe hacer y vender berlinas de lujo. Dinamiza Audi Sport, impulsa los Audi A7 y R8 y propone separarla de la matriz… demasiado loco para los alemanes. De Meo llega a Volkswagen para lanzar el segundo Beetle y el Up!, y tras su éxito, lo envían 'a bailar con la más fea' convirtiéndose, eso sí, en director general de Seat, sin nadie por encima, y con toda una marca, por fin, a su disposición.

LA ÉPOCA DORADA DE CUPRA

Llega en 2016 con números rojos, y en la primera semana cambia el nombre del Ateca, que iba a ser lanzado como Teqta, después impulsa el León sobre el Ibiza y puja por el liderazgo de ventas en España. En 2018 transforma Cupra en una marca propia y lanza el Formentor, rompiendo todos los récords de la marca española que multiplica facturación y beneficios. En 2020, una Renault a la deriva tras el encarcelamiento de Carlos Ghosn decide llamarlo, y es entonces cuando en Volkswagen lo dejan escapar. ¿En qué mente competitiva cabe dejar que el Messi de la industria europea del automóvil se marche? Es algo que tendrán que replantearse en Alemania, ya que los rumores dicen que Luca pidió poder dirigir Audi, que había estancado sus ventas, además de Cupra, para seguir en Volkswagen, ¿mucho poder para un no alemán?

LA REVOLUCIÓN FRANCESA

En 2020 llega a París, y se incorpora a Renault el 21 de julio. El 22 de julio vio la maqueta del R5 neo-retro y dijo: 'esto es lo que tenemos que hacer'. En menos de tres meses está en la presentación 'Renaulution' y en tres años está en producción en Europa y con lista de espera de pedidos. En todo el proceso de levantar Fiat, Alfa, Seat o Cupra a base de buenos productos Luca de Meo no pierde la sonrisa ni la jovialidad que lo acompaña. Es un hombre de éxito, y lo sabe, pero para que Mbappé meta goles tiene que tener un buen equipo, y su 'núcleo duro' se forjó en España, donde era habitual verlo jugar al pádel en el Club de Tenis de Barcelona: José María Recasens dirige ahora las factorías de Renault en el mundo, Christian Stein lo acompaña en la comunicación, Antonino Labate es ahora el hombre fuerte de Alpine, y Flavio Briatore es su principal fichaje para la Fórmula 1. 

Al impulsor de Abarth, Cupra y, ahora, Alpine, y responsable del éxito de modelos como el Toyota Yaris, Fiat 500, Alfa Mito, Audi A7 o los Cupra Formentor y Tavascan le esperan ahora días de gloria en Renault, pero también días muy duros, donde afronta retos nunca vistos: emisiones, aranceles, la competencia china, la deslocalización… y el destino de un gigante mundial del automóvil.