Audi e-tron: el primer paso de la marca de los cuatro aros en la era eléctrica

Hay coches que marcan un antes y un después en la marca que los produce y, sin duda, el Audi e-tron es uno de ellos, porque supone la iniciación de la casa de los cuatro aros en la era eléctrica, al margen del testimonial R8 e-tron de 2012. Audi ha querido que este coche gire entorno a varios elementos como son la percepción totalmente premium del producto, la similitud con sus otros modelos de alta gama, su pronta llegada al mercado por delante de sus homólogos de las otras dos casas alemanas, y una autonomía que, sin ser líder, lo sitúe en la parte alta de la clasificación entre los eléctricos. Después de probar el coche, podemos decir que ha conseguido todos sus objetivos y, a lo largo de este texto, justificaremos por qué.

Su sucesor será el Audi Q8 e-tron, previsto para 2026.

En el seno de Audi, e-tron se entiende como una submarca que en los próximos años recibirá toda una familia de modelos de propulsión eléctrica, entre los que estarán el e-tron Sportback en 2019, y los modelos derivados del e-tron GT concept y Q4 e-tron concept, en 2020 y 2021 respectivamente, además de una versión eléctrica del Q2 de batalla larga sólo para el mercado chino. De este modo, la marca calcula que el 25% de sus ventas serán modelos electrificados, ya sea mediante mecánicas híbridas enchufables o 100% eléctricas.

El motivo por el que Audi ha optado por una electrificación rápida y contundente en su gama tiene raíces profundas como las del Dieselgate, pero una justificación mucho más relevante es la irrupción del fenómeno Tesla y la necesidad de reducción en la media de emisiones de CO2 por vehículo vendido impuesta por Europa.

Como no podía ser de otro modo, Audi ha elegido para su llegada al mundo eléctrico un coche carrocería SUV de aspecto muy similar al de cualquier otro modelo de la gama. Así lo demuestra la parrilla 'single frame' carenada en un 70% que, aunque no es estrictamente necesaria, sí cumple con una función de ventilación del motor eléctrico delantero, además de resultar vital para la identificación corporativa de la marca.

Su variante SUV coupé es el Audi e-tron Sportback 2020. Su primera versión prestacional es el Audi e-tron S.

AUDI E-TRON 2020: EXTERIOR

Al primer golpe de vista el e-tron parece una especie de Q5 alargado o A6 Allroad sobreelevado y, de hecho, utiliza la plataforma MLB Evo que ambos modelos. Sus dimensiones de 4,9 metros de largo, 1,93 de ancho y 1,62 de alto lo sitúan entre ellos, y algo por debajo –en tamaño– de los todopoderosos Q7 y Q8.

El Audi e-tron no recurre a la plataforma MBE, que si utilizarán los e-tron GT y Q4 e-tron, porque la marca ha privilegiado un lanzamiento temprano al uso de una estructura completamente optimizada para vehículos eléctricos, lo que hubiera retrasado su llegada al mercado. No obstante, eso no le impide contar con dos motores eléctricos situados uno sobre cada uno de los ejes, y un paquete de batería de litio bajo el suelo, cuyas celdas se fabrican en Asia pero se ensamblan en la planta de Bruselas junto al resto del coche. De este modo, el e-tron será un modelo de tracción integral quattro en todas sus variantes.

En cuanto a diseño, las fotos son elocuentes: la zona inferior cuenta con unas molduras oscuras que, además de elevar visualmente el aspecto del conjunto, alojan una salidas de aire para la refrigeración de las baterías, mientras que en la traser recupera ciertos conceptos del Q8 a la par que mantiene una falsas salidas de escape que, curiosamente, se iluminan por la noche. Un rasgo más para confirmar que Audi no busca una experiencia visual disruptiva, sino acercarse al cliente tradicional de sus SUV premium.

AUDI E-TRON 2020: INTERIOR

Por lo que respecta al habitáculo, el rasgo más llamativo son los llamados retrovisores virtuales, opcionales, que parecen simplemente los anclajes de un retrovisor convencional… ¡sin espejos! Por lo demás, sigue el juego de las diferencias con sus hermanos de gama. Casi todo los rasgos de diseño interior tienen como origen el Audi Q8, si bien la palanca de cambios queda definitivamente suplantada por un mando fijo, delicadamente tapizado, parecido a la palanca de potencia de un avión. Una pieza metálica situada a su izquierda se desplaza adelante y atrás para cambiar entre los distintos modos de la transmisión: R, N, P, D o S.

La calidad de los acabados  y materiales en el e-tron es simplemente presidencial, y está a la altura de un A8; sin embrago, el diseño del salpicadero y los remates de la consola central son más audaces que en la berlina y, en el plano estético, también transmiten una mayor sensación de vanguardia que en su rival directo, el inminente EQC que conocimos hace unos días.

En el puesto de conducción destaca inmediatamente la instrumentación digital Virtual Cockpit de de 12,3 pulgadas, así como las dos pantallas centrales de 10,1 y 8,6 pulgadas, respectivamente, situadas debajo de las salidas del aire acondicionado, como ya vimos en los A8 y Q8. La superior sirve para gestional el sistema multimedia de infoentretenimiento, mientras que la inferior permite la escritura con el dedo a modo de touchpad y muestra digitalmente los mandos del climatizador de tres zonas. Ambas cuentan con reacción áptica al tacto, lo que facilita su manipulación mientras se conduce.

Desde noviembre de 2020 y con vistas al modelo de 2021, el Audi e-tron recibe un nuevo volante con un diseño ligeramente distinto del original. La sección de los botones multifunción se mantiene básicamente inalterada, pero los dos radios inferiores son ahora verticales en vez de horizontales. El conductor sólo tiene que tocar ligeramente el aro del volante una vez por minuto para asegurarse de que el sistema de guiado lateral del crucero adaptativo se mantiene activo.

Por último, pero no por ello menos importante, todas las unidades equipadas con retrovisores virtuales equipa otras dos pantallas antirreflejo de 7 pulgadas, diseñadas en Barcelona por la compañía española Ficosa. Éstas se ubican en las puertas delanteras, cerca de la confluencia de ésta con el salpicadero, y sustituyen a los espejos retrovisores laterales con una imagen captada en tiempo real por las cámaras que se alojan en las ya mencionadas estructuras exteriores.

En cuanto a su utilización, nos resultó sencillo adaptarnos a ellas, si bien otros compañeros que asistieron a la presentación comentaron que les costó mucho más y miraban instintivamente a donde, tradicionalmente, se colocan los espejos exteriores o incluso tapaban la pantalla del lado izquierdo con el brazo al coger el volante por su parte superior. En todo nuestro trayecto, recibimos una imagen sin reflejos y de una altísima calidad, aunque no tuvimos ocasión de probar la visión térmica nocturna que anuncian.

Nuestra experiencia particular fue positiva y creemos que la mayoría de ventas incluirán este opcional –la mayoría de los pedidos lo incluyen–, pues indudablemente conllevan una ventaja aerodinámica. Sin embargo, no estamos seguros de que objetivamente lo anterior compense su precio de 1.810 euros o los disgustos en caso de robo o rotura.

Nuevo volante del Audi e-tron para 2021

En cuanto a habitabilidad, el e-tron ofrece un buen acceso y una postura de conducción propia de un SUV, con una amplia posibilidad de ajuste para conductores de cualquier estatura por el desplazamiento del asiento y la columna de dirección, al menos con el ajuste eléctrico opcional. Como era de esperar, se trata de un vehículo muy amplio y confortable en todas sus plazas, y su aislamiento acústico –incluso con los retrovisores ‘normales’– es muy elevado. Por su condición de eléctrico, la sonoridad del motor es prácticamente nula tanto en el interior como en el exterior, lo que suele acentuar el ruido de rodadura, pero no es el caso del e-tron.

Atrás, el espacio para las piernas, los hombros y la cabeza de los pasajeros es generoso, si bien la protuberancia del mueble central, donde se ubican las salidas del aire acondicionado traseras, sus mandos de control y las tomas de corriente de 12 voltios y USB para el pasaje, pueden resultar molestas al ocupante de la plaza central. Por contra, el asiento y respaldo de esta localidad así como la casi inexistencia del túnel de transmisión –a pesar de su tracción quattro– juegan a su favor, y permiten afrontar trayectos confortables para sus cinco pasajeros.

Si todo lo anterior era previsible en un coche de estas dimensiones y precio, menos habitual en la marca –con la salvedad del R8– resulta el cofre delantero de 60 litros, que complementa el generoso maletero posterior de 600 litros de capacidad, ampliables hasta 1.725 litros con los respaldos abatidos.

AUDI E-TRON 2020: EQUIPAMIENTO

El Audi e-tron es un vehículo con un amplio equipamiento tecnológico de serie, entre el que destaca la suspensión neumática adaptativa, los faros full led, el cuadro de instrumentos digital, las dos pantallas táctiles del sistema de infoentretenimiento, el aviso de cambio involuntario de carril, la frenada de emergencia automática y el portón de maletero eléctrico, que puede contar con función manos libre de manera opcional. Adicionalmente, el acabado Advance añade pinzas de freno pintadas en color naranja, llantas de aleación de 20 pulgadas, cámara de marcha atrás, paquete de iluminación de ambiente con proyección del logotipo en suelo al abrir las puertas, inserciones en aluminio cepillado, un Virtual Cockpit más completo, la conectividad smartphone interface y un paquete de molduras exteriores específicas.

Con el acabado Sport se incluye además unas llantas específicas, molduras exteriores en el color de la carrocería, paquete S Line para el interior, asientos con ajuste eléctrico, salpicadero tapizado en cuero, asientos de Alcantara y los ya mencionados retrovisores virtuales. El tope de gama Black Line se completa con llantas de 21 pulgadas Audi Sport, lunas tintadas y un paquete estético con la parrilla, las barras de techo y otras molduras en negro.

Audi comercializa una versión especial de lanzamiento, limitada a 2.600 eunidades, denominada Edition One que cuenta con carrocería color azul Antiqua con molduras en aluminio, llantas específicas de 21 pulgadas, asientos deportivos, tapicería específica, techo panorámico, faros matrix led, paquete de asistencia a la conducción, cámaras de entorno y un equipo de sonido Bang&Olufsen con 16 altavoces.

Además, el Audi e-tron es el primer modelo de la marca que permitirá mejorar su equipamiento de manera digital incluso después de la compra. Así, es posible 'activa' la opción de iluminación Matrix Led, las ayudas a la conducción o algunas funciones del sistema de entretenimiento mediante el pertinente pago de estos extras, y darse de baja del servicio del mismo modo. Con el paquete City assist, el e-tron puede mejorar sus sistemas de seguridad con un asistente de cruces y tráfico posterior, y los sistemas pre sense, que inician medidas específicas de protección si se detecta un riesgo de colisión inminente. Cabe señalar que este sistema, de serie en el Audi A8, es opcional en el e-tron.

Como colofón, con la aplicación myAudi, es posible gestionar diversas funciones del coche desde el teléfono móvil. De este modo, es posible planificar y controlar los procesos de carga de las baterías, así como activar la climatización, los asientos o el volante calefactado, o el desempañado de la luneta para encontrar la temperatura óptima al llegar al vehículo.

AUDI E-TRON 2020: MECÁNICA

El Audi e-tron equipa dos motores eléctricos, uno en cada eje, que le proporcionan tracción a las cuatro ruedas. Está disponible en dos versiones: 50 quattro y 55 quattro.

La 50 quattro entrega 313 caballos de potencia con un par motor de 540 Newton metro. Es la versión de acceso de la marca. Su batería tiene 71 kilovatios hora y permite una autonomía de 336 kilómetors en ciclo WLTP

La 55 quattro se eleva hasta los 408 caballos con un par máximo de 664 Newton metro. Presume de una batería de 95 kilovatios hora que le proporciona 437 kilómetros de autonomía tras la actualización de software lanzada a finales de 2019, que en octubre de 2021 está disponible también para los modelos fabricados entre septiembre de 2018 y noviembre de 2019.

A pesar de su condición de tracción total, el motor del eje trasero tiene más potencia que el delantero –184 caballos delante y 224 atrás–, algo que no es casual. En condiciones normales, el eje posterior ofrece el 75% del empuje, que se complementa con el eje delantero según la demanda de potencia. Audi dice que este nuevo sistema de tracción quattro actúa de manera automática e inmediata para lograr un reparto de par óptimo en cada circunstancia.

Para alimentar ambos motores, el e-tron equipa un paquete de baterías de litio bajo el suelo, que pesa 700 kilos, con capacidad para almacenar hasta 95 kilovatios hora de energía, lo que le ofrece una autonomía homologada de 436 kilómetros en ciclo WLTP –inicialmente era de 417, pero diversos avances de la firma de los cuatro aros han aumentado la cifra–. Aunque Audi compra las celdas de la misma en Asia, es la marca quien ha desarrollado su estructura de protección y refrigeración, y se encarga de ensamblarlas en la misma fábrica de Bruselas en que de produce el resto del vehículo.

AUDI E-TRON 2020: CARGA

El Audi e-tron viene equipado de serie con un cargador portátil de hasta 11 kilovatios de corriente continua, con un dispositivo interno que transforma la corriente alterna en continua cuando el coche se enchufa a una toma de esta índole.

En noviembre de 2020, Audi anuncia que ya incluye como opcional un cargador de 22 kilovatios de corriente alterna que duplica la potencia del que se ofrece de serie. Está disponible para el e-tron 55 y llegará al e-tron 50 a mediados de 2021.

Con el cargador de 11 kilovatios es posible recargar el 85% de su batería en un tiempo aproximado de 7 horas, pero para ello es necesario una toma trifásica de la que muchos propietarios no disponen en su domicilio. Para estos casos, el coche cuenta con dos cables de carga, uno con enchufe Schuko –el doméstico– y otro tipo industrial monofásico de hasta 7,2 kilovatios, para el cual se requiere de una conexión de este tipo.

Independientemente del tipo de cable utilizado, Audi ha creado el e-tron Charging Service que ofrece un fácil acceso al 80% de las estaciones de carga de Europa mediante una única tarjeta o la aplicación myAudi, pero no es compatible con la red de Superchargers de Tesla. No onstante, Audi participa junto a otros fabricantes en la construcción de la red de puntos de carga Ioniti que prevé contar con más de 400 estaciones de carga repartidas por todo el continente en 2020.

En noviembre de 2020, Audi anuncia un nuevo sistema de carga doméstico adaptado a 22 kilovatios. Permite recargar completamente la batería del e-tron 55 en poco menos de cinco horas. Es un sistema conectado que interactúa con el resto de la red doméstica, de tal modo que el cargador evita sobrecargar el sistema o puede configurarse para actuar cuando la tarifa eléctrica es más baja. Si la vivienda está equipada con placas solares, el cargador puede recurrir también de forma preferente a esta electricidad.

AUDI E-TRON 2020: SENSACIONES DE CONDUCCIÓN

La ruta establecida para la presentación nacional del e-tron discurrió principalmente por carreteras secundarias de trazado sinuoso con importantes cambios de elevación y un precioso paisaje, por cierto, en las cercanías de Bilbao. Esta ruta se demostró idónea para comprobar las cualidades dinámicas y de eficiencia del e-tron en un entorno exigente.

Al volante, nos sorprendió su buen comportamiento, mucho mejor del que esperábamos de un coche que supera los 2.600 kilos en orden de marcha. Eso no significa que no se perciba claramente el peso y las inercias que éste genera. Lo curioso es que el movimiento de la carrocería es muy moderado, incluso con la suspensión configurada en el modo más amable. Osea, cuando se llega al límite de la capacidad de adherencia de los neumáticos, el coche simplemente desliza, y cuando esto sucede, ya dentro de una curva, se percibe en los cuatro neumáticos prácticamente al mismo tiempo. En este sentido, y en una conducción muy deportiva, puede ser más crítica la capacidad de frenada que el paso por curva.

Dicho esto, conviene notar que la suspensión en ningún momento es muy blanda. Antes al contrario. Lo cual se traduce en que los pasos elevados y badenes se perciben con mayor claridad en el habitáculo que en otros modelos. Resulta inevitable la comparativa con el Audi Q8 que probamos en trazados similares. El Q8 pesa unos 300 kilos menos, con lo que consigue ser algo más rápido, pero el e-tron gestiona la tracción al menos igual de bien que su hermano de gama y, además, ofrece mayor contundencia en aceleración por la inmediatez de su entrega de par.

Salvo el Tesla Model S P100 D, éste es el eléctrico más rápido que nunca hemos conducido, si bien conviene utilizar la caballería exclusivamente en situaciones de necesidad, ya que los 'zapatazos' se pagan muy caros en forma de consumo. En este apartado, nos hubiera gustado probar el e-tron en recorridos más largos por vías rápidas para evaluar su autonomía real en este terreno. En nuestro recorrido, logramos un gasto medio de 23,1 kwh a los 100 kilómetros, un dato bastante cercano a los 23 kilovatios que homologa.

Una característica curiosa del e-tron es que cuenta con un gestor automático de la recuperación de energía. Éste es capaz de discernir el trazado de la carretera que recorremos para decidir si tiene que recuperar más o menos energía –con la retención consecuente–, o simplemente dejar el coche vaya a vela cuando estamos en una recta o en bajada. Si desconectas el gestor automático de la recuperación, se activan las levas detrás del volante para que manualmente gestiones la recuperación al más puro estilo del Mitsubishi Outlander PHEV.

El selector de modos de conducción, de serie, cobra una especial importancia en un coche de estas características. En el modo Efficiency, además de cambiar el tarado de la suspensión neumática y la sensibilidad de la dirección, cambia la respuesta del motor al pisar el acelerador, algo que no es nuevo pero que resulta fundamental para regular de forma precisa la cantidad de par que necesitamos sin desperdiciar energía.

AUDI E-TRON 50 QUATTRO: LA VERSIÓN DE ACCESO

El Audi e-tron 50 quattro supone la llegada de la versión de acceso del SUV eléctrico alemán. Ofrece una potencia de 230 kilovatios, cuyo equivalente son 313 caballos, y un par máximo de 540 Newton metro, cifras que permiten una aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en 6,8 segundos y una velocidad punta de 190 kilómetros/hora.

La batería del nuevo Audi e-tron 50 quattro tiene una capacidad de 71 kilovatios hora, y está formada por 324 celdas combinadas en 27 módulos. Gracias a ella, el fabricante teutón asegura una autonomía superior a los 300 kilómetros según el protocolo de homologación WLTP. La recarga se puede realizar en estaciones de carga rápida de hasta 120 kilovatios de potencia, modo en el que es capaz de estar listo de nuevo en apenas media hora. Si optamos por una recarga en corriente alterna de 11 kilovatios necesitaremos siete horas, aunque Audi ha confirmado que, poco después del lanzamiento comercial de esta versión, se va a ofrecer un segundo cargador para utilizar la red disponible de estaciones de carga con potencias de hasta 22 kilovatios.

En lo que se refiere a la recarga en el domicilio, este Audi e-tron 50 quattro está equipado de serie con el sistema de recarga compact, disponible en 7,4 u 11 kilovatios de potencia conectado a una toma de corriente industrial de 230 voltios o 400 voltios respectivamente. Además, en un enchufe doméstico con una tensión de 230 voltios es posible recargar la batería con una potencia de 2,3 kilovatios. Desde finales de 2019 también estará disponible el sistema de carga connect, que permite la utilización de funciones de recarga inteligentes, como por ejemplo el beneficiarse de tarifas variables para recargar el e-tron en las horas en las que el precio de la electricidad es menor.

Tal y como sucede en la versión más potente del Audi e-tron, que es la que hemos probado, este e-tron 50 quattro también permite recuperar energía a través de sus motores durante la deceleración. Los ingenieros de la marca germana afirman que en el 90% de las frenadas se recupera energía. Además, el nuevo sistema de frenos con accionamiento electrohidráulico se activa únicamente cuando la desaceleración es superior a 0,3 g, lo que minimiza la distancia a recorrer mientras detenemos el vehículo.

También se ofrece de ser en esta versión el asistente de eficiencia, que muestra información predictiva a través del Audi virtual cockpit para ayudar al conductor a ahorrar la máxima energía posible. Para ello se sirve de diversos sensores y cámaras que, en combinación con el asistente de crucero adaptativo, pueden incluso acelerar y frenar el vehículo de forma predictiva.

AUDI E-TRON 2019: PRECIOS

El Audi e-tron está disponible desde 73.040 euros en la variante 50 quattro y 84.930 euros en la 55 quattro, que se eleva hasta 88.740 euros con el acabado Advance, 95.450 con Sport y 96.950 euros para el Black Line. La versión de lanzamiento Edition One tiene un precio de 115.030 euros, y está limitada a 2.600 unidades. Por su parte, el Audi e-tron 50 quattro admitirá pedidos desde el cuarto trimestre de 2019, si bien no se ha publicado aún su precio en España.

AUDI E-TRON 2019: CONCLUSIÓN

El Audi e-tron no será el coche que electrifique a España, pero estamos convencidos de que existe un perfil de comprador muy claro para este coche que, junto a la experiencia eléctrica, aporta casi todas la bondades del típico SUV premium alemán. En este sentido, pierde al comprador pionero, que habrá elegido probablemente un Tesla, pero recupera a una parte de los clientes que buscan un coche más normal, pero propulsado por motores eléctricos. El e-tron será un actor principal en esta función reservada para un cliente adinerado que busca una nueva distinción, hasta que llegue la siguiente generación de coches eléctricos.

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