¿QUIÉN ES VOLKSWAGEN?
Volkswagen es un constructor automovilístico alemán fundado en el año 1933 con sede en Wolfsburgo, en la Baja Sajonia –Alemania–. Su nombre nace de la combinación de dos palabras alemanas; Volks –pueblo– y Wagen –coche–. Esto se debe a que su fundación nace como parte de un proyecto en pleno auge del partido nazi, con Adolf Hitler a la cabeza; el cual quería un coche para el pueblo alemán, con un bajo coste de adquisición y sencillo de mantener.
Entre su larga lista de modelos hay una serie de ellos que forman parte de la cultura popular como son el Volkswagen Beetle, el Volkswagen Samba Bus –también conocido como Volkswagen T1– el Volkswagen Golf, que actualmente va por octava generación; e incluso el Volkswagen Scirocco. Otros como el Volkswagen Corrado o el Volkswagen Passat también forman parte de ella; así como los más actuales Volkswagen Touareg o Volkswagen Phaeton.
Además de llegar a ostentar el título de primer fabricante de coches del mundo, también se ha visto envuelto en uno de los mayores escándalos de la industria automotriz, el Dieselgate, relacionado con la alteración de los niveles de emisiones de sus coches.
El eslogan internacional comercial de la empresa Das Auto significa – el automóvil– aunque cada vez más se ha desvinculado de él.
HISTORIA DE LA MARCA VOLKSWAGEN
La historia del Volkswagen como fabricante arranca con la llegada al poder del partido nazi con Adolf Hitler a la cabeza en el año 1933. Por aquel entonces Hitler quiere un coche que dé movilidad al pueblo alemán y para ello lanza un concurso cuyo vencedor es Ferdinand Porsche; sí, el mismo que el de la marca Porsche.
Éste último fue el encargado de realizar los planos y diseños del automóvil, aunque fue el propio dictador quien pulió su estética y la hizo más atractiva; para lo cual modernizó los faros delanteros, traseros y añadió una varilla lateral que le daba un aire más deportivo. Lo que pocos saben es que, incluso el coche del pueblo, estuvo envuelto en polémica: Hans Ledwinka, un diseñador de coches austríaco, demandó a la compañía alemana por plagio, alegando las enormes similitudes de su coche con el Tatra V570 –tamaño contenido, motor pequeño refrigerado por aire y en disposición trasera, con capacidad para cuatro o cinco ocupantes–. Hubo que esperar hasta 1961 para que Volkswagen fuese condenada a pagar 30 millones de marcos alemanes –alrededor de 15 millones de euros de la época– a Tatra; aunque, para aquel entonces Ledwinka ya estaba prácticamente retirado.
El nombre escogido por Hitler para el automóvil fue Kdf-Wagen –fuerza a través de la alegría– y la ciudad, Kdf-Stadt. Sin embargo, ni en la fábrica ni en toda Alemania nadie empleó otro nombre que no fuese el de Volkswagen para referirse al Beetle. Incluso recibió diferentes apelativos como Escarabajo o Käfer. Con la aparición de este proyecto también se fundó una nueva ciudad, Stadt des KdF-Wagens bei Fallersleben, el 26 de mayo de 1938.
Con la Segunda Guerra Mundial la producción del coche quedó paralizada y los bastidores de la mayor parte de unidades previstas para su fabricación se destinaron a la producción de los vehículos militares Kübelwagen y Schwimmwagen, lo que impidió que el vehículo de serie llegara a las calles y por ende a sus clientes.
La victoria de los aliados permitió a los ingleses tomar el control de la fábrica –ya que ésta había quedado del lado de la Alemania Occidental– y recuperar el proyecto del kdf-wagen. Tras la reanudación de las líneas de montaje en 1945 el éxito del Volkswagen no tardó en llegar y poco a poco comenzó a expandirse por diferentes mercados. Tal fue su éxito a nivel internacional que terminó por recibir nombres tan variopintos como Escarabajo, Beetle, Coccinelle, Sapo, Vocho...
A finales de los años 60, cuando el éxito del Beetle empezó a decaer, Volkswagen decide tomar el control de Auto Union y NSU con la intención de aportar tecnología y capacidad de desarrollo para nuevos modelos y mecánicas. De esta forma nacen los Volkswagen K70 –creado completamente por NSU– y el Volkswagen Passat.
Curiosamente no sería hasta 1974 cuando, con la aparición del Volkswagen Golf, llegaría el verdadero sustituto del ya vetusto Escarabajo. Este automóvil compacto, de diseño revolucionario, utilizará un motor de cuatro cilindros en posición transversal, refrigerado por líquido, que conseguía maximizar su espacio interior y posicionaría a este nuevo modelo como la referencia de automóvil asequible y fiable y volver así a la senda del éxito comercial.
En materia de ingeniería, en los años 70, Volkswagen ya trabajaba en sistemas de reducción de gasto de combustible, como el start&stop; aunque son soluciones técnicas como los motor en configuración de W o las cajas de cambio de doble embrague, las que mayores reconocimientos han tenido.
¿QUÉ MARCAS CONFORMAN EL GRUPO VOLKSWAGEN?
En la actualidad, el Grupo Volkswagen –en alemán Volkswagen Aktiengesellschaft, que significa Volkswagen Sociedad Anónima y puede abreviarse como Volkswagen AG– es propietario de 13 fabricantes procedentes de siete países europeos: Volkswagen –que es la empresa matriz y data de 1937–; Audi –1965–; Bentley, Bugatti y Lamborghini –1998–; SEAT –1986–; Škoda –1994–; Scania –2008–; Italdesign Giugiaro –2010– y Porsche, Ducati y MAN en 2012. Otras como Volkswagen Vehículos Comerciales o Cupra, son marcas que han nacido dentro del propio seno de la firma.
La política de empresa del grupo está conformada por dos bases muy sólidas que han ayudado a convertirse en el mayor fabricante de automóviles del mundo, aunque actualmente no lo sea:
- La primera de ellas es mantener los costes contenidos: esto se consigue con un desarrollo compartido de plataformas, mecánicas, chasis y software que permitan escalar la producción a diferentes segmentos sin invertir en cada uno de manera específica, más allá de lo estrictamente necesario. Así, cada nueva solución técnica queda al alcance de todo el grupo.
- La segunda de ellas está relacionada directamente con la primera y es que, a pesar de utilizar componentes compartidos, cada marca tiene que crear y tener su propia identidad. Así encontramos como el Škoda Fabia, el Seat Ibiza, el Volkswagen Polo y el Audi A1 son el mismo coche con diferente traje.
¿QUÉ ES EL CASO DIESELGATE DE VOLKSWAGEN?
Volkswagen es conocido por algunos de los mayores logros en la técnica del automóvil, pero también por protagonizar uno de los mayores escándalos de la industria automotriz. El caso Dieselgate o Dieselgate a secas, fue un suceso de repercusión internacional destapado en 2015 por la Agencia Medioambiental Norteamericana –EPA–que salpicó a los fabricantes Volkswagen, Audi, Porsche, Seat y Škoda.
Este organismo demostró el uso de un dispositivo creado en 1999, en colaboración con Bosch, que alteraba el funcionamiento del propulsor para homologar emisiones menores a las reales, un hecho que terminó por afectar a 11 millones de motores en todo el mundo. Los motores más afectados fueron los de mecánica Diesel, de ahí su nombre.
El Dieselgate supuso un duro revés para Volkswagen que además le acarreó el pago de fortunas en concepto de pago de multas –1.000 millones de euros en Alemania ó 4.300 millones en EEUU–, indemnizaciones a clientes, procesos de recompra de vehículos, millones de vehículos llamados a revisión, la dimisión de Martin Winterkorn como máximo responsable del Grupo Volkswagen, la detención del director general de Audi, Ruper Stadler; e incluso la desaparición de las motorizaciones Diesel en Estados Unidos.
Este suceso tuvo otros efectos colaterales, como la desaparición fulminante del Volkswagen Polo WRC cuando el coche de la temporada de 2017 ya estaba listo para rodar.
VOLKSWAGEN SERÁ ELÉCTRICA ANTES DE 2035
Tras el escándalo del Dieselgate y la dimisión de varios altos cargos, Volkswagen ha trabajado a marchas forzadas para limpiar su imagen con la idea de convertirse en ecofriendly. Para ello, ha ideado un plan que tiene por objetivo final la completa electrificación.
La gama I.D. de Volkswagen es su proyecto de redención y una forma de reinventarse de cara a las próximas décadas. Sobre la plataforma MEB, exclusiva para modelos 100% eléctricos, la firma alemana ha creado una completa gama de modelos tanto para sí misma, como el Volkswagen I.D 3 ó el I.D.4, pero también otras del grupo, como el Cupra Born o el Škoda Enyaq.
Para conseguir sus objetivos, Volkswagen tiene previsto invertir un total de 44.000 millones de euros en los próximos años, para desarrollar nuevos productos y que muchos comparan con la revolución que fue pasar del Volkswagen Escarabajo al Volkswagen Golf. Con el anuncio de que en Europa estará prohibida la venta de coches nuevos con motor de combustión a partir de 2035, el grupo Volkswagen ya ha anunciado su intención de que Volkswagen y otras marcas como Audi sean 100% eléctricas, al menos en el viejo continente, a partir de 2026.
VOLKSWAGEN BEETLE: ICONO DE LA CULTURA POP
No es necesario saber de coches para que a cualquier persona por la calle le preguntes y sepa responderte qué es un Volkswagen Beetle; y es que este vehículo, que pretendía movilizar Alemania, se convirtió en el modelo más reconocible de la marca. Escarabajo, Beetle, Coccinelle, Sapo, Vocho; llamado de diferentes formas, ha sido capaz de crear una imagen mental en el colectivo de las personas hasta convertirse en un símbolo. Su popularidad es tan grande, que en México, la primera generación conocida como Tipo 1, estuvo en producción hasta 2003.
Tal fue el éxito, que su salto a la gran pantalla era sólo una cuestión de tiempo, ya que en 1963 saldría en los cines Herbie The Love Bug –traducido en España como allá va ese bólido–, con seis secuelas posteriores; la última protagonizada en 2005 por la estrella juvenil Lindsay Lohan y que tuvo a personajes tan ilustres como el piloto de Nascar Jeff Gordon en el elenco de extras. Incluso en el año 2012 salió una versión especial del Volkswagen New Beetle con la decoración específica de Herbie, que estuvo a la venta con mecánicas Diesel y gasolina.
Sin embargo su aparición no se limita a la gran pantalla, ya que los niños de los años 80 que crecieron con la serie Transformers; recordarán que uno de los personajes principales, Bumblebee, era un Volkswagen Beetle del grupo de los robots buenos, los Autobots. En 2018 Hollywood aprovechó para lanzar una cinta dedicada en concreto a este personaje y recuperó el clásico modelo alemán, frente al Chevrolet Camaro de las cintas de Michael Bay.
Fuera del cine, del cual se podrían poner miles de ejemplos, el Volkswagen Beetle ha sido seña de identidad de dos movimientos culturales más:
-Por un lado el de los hippies: Su bajo coste de adquisición y su fiabilidad hicieron de este coche una elección predilecta para todos aquellos jóvenes que querían su primer soplo de libertad y no estaban interesados en los grandes bólidos americanos.
-Playa y desierto: Al estar construido sobre una base de chasis de largueros y travesaños con la carrocería separada, muchos pequeños preparadores utilizarían el bastidor para crear buggies de playa que, en sí mismos, son iconos de la automoción. Por el otro, también fueron utilizados para competir en carreras fuera del asfalto gracias a su fiabilidad y bajo coste de piezas de recambio.
VOLKSWAGEN Y EL MUNDO DE LA COMPETICIÓN
Para muchos es complicado asociar una marca como Volkswagen al mundo de la competición, aunque lo cierto es que su palmarés es más que envidiable; porque prácticamente cuenta todas sus incursiones oficiales por victorias absolutas.
En el rally más duro del mundo, el París Dakar; convertido ahora en marca comercial y conocido como Dakar a secas. Su primera victoria llegó en el año 1980 –con un Volkswagen Iltis– aunque, sin duda, su modelo más exitoso fue el Volkswagen Race Touareg que, con diferentes evoluciones, ganó en 2009, 2010 y 2011. Sin embargo no hay que dejar de lado el Volkswagen Tarek, que sirvió de base para el proyecto ganador posterior y que en 2003 consiguió la victoria en dos ruedas motrices, además de estar propulsado por una mecánica Diesel, algo bastante novedoso para la época. Fue la marca de Wolfsburgo la que dio el primer entorchado a Carlos Sainz en su aventura dentro del mundo off-road.
Durante este periodo, el piloto madrileño empezó a trabajar en el desarrollo de otro vehículo que a la postre fue todo un éxito, el Volkswagen Polo R WRC con el que Sebastien Ogier fue campeón cuatro seguidos –de 2013 a 2016–. Con el coche de 2017 listo para la siguiente temporada, Volkswagen decidió cancelar el proyecto, al saltar el caso del Dieselgate.
Volkswagen incluso se convirtió en una referencia en el mundo de los monoplazas en los años 70, cuando; en 1971, Volkswagen of America puso en marcha la Fórmula Super Vee. Esta competición se hizo famosa por albergar a varias jóvenes promesas que terminarían siendo campeones de Fórmula 1. En los 11 años que estuvo en marcha, hasta 1982, la ilustre lista de inscritos cuenta con nombres como Niki Lauda, Jochen Mass, Nelson Piquet, Jochen Rindt y Keke Rosberg.
Otros modelos destacados de competición, especialmente de rallies, parten de la base del Volkswagen MK2 e incluso desde Volkswagen Motorsport se trabajó en un Golf MK3 grupo A que lucharía contra los Lancia Delta Integrale, Toyota Célica grupo A; etc. Sin embargo el proyecto no salió adelante y la tercera generación del Golf quedó relegada a la categoría kit car con Alister McRae, hermano de Colin, como su mayor referente.
En la actualidad, diferentes versiones del Polo han participado en el Campeonato Mundial de Rallycross en el Campeonato Global de Rallycross; e incluso han retomado la senda de los rallies con el Volkwagen Polo Rally 2.
El Volkswagen Project Trinity es el germen de una berlina eléctrica de tamaño medio que supondrá el debut de la nueva generación de unidades de baterías de la marca. En principio iba a llegar en 2026 pero lo más probable es que se retrase hasta finales de década.
La novena generación del Volkswagen Golf llegará a finales de década convertida en coche eléctrico y se fabricará en Wolfsburgo. Se sabe además que las versiones más deportivas GTI y R serán de la partida.
Yazeed Al-Rajhi por fin ha conseguido inscribir su nombre en la historia del Rally Dakar al llevarse la victoria en la edición de 2025, la cuadragesimoséptima de su historia. El piloto saudí, después de dos semanas con diferencias muy ajustadas, ha podido batir a Henk Lategan para alcanzar la gloria por primera vez, y además lo ha hecho en casa. Lategan ha corroborado el dominio de Toyota con la segunda plaza y Ford, con Mattias Ekström, ha cosechado un podio; cuarta plaza para Dacia con Nasser Al-Attiyah.
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