TÉCNICA: el funcionamiento de los frenos en el GP de Emilia Romaña F1 2020

No ha habido carreras de F1 en este circuito desde 2006, cuando Michael Schumacher ganó con Ferrari. Con 22 vueltas y una recta final muy corta (358 m), el circuito es muy técnico y requiere una frenada con motor muy fuerte de todo tipo. No es una coincidencia que Enzo Ferrari llamara "pequeño Nürburgring" al circuito que lleva su nombre y el de su hijo Dino.

No siempre necesitas los frenos más potentes

El uso de los sistemas de frenada Brembo de Fórmula 1 más potentes no siempre producen resultados positivos, porque en determinadas condiciones ambientales el sistema puede estar sobredimensionado para el monoplaza: una fuerza de frenada desenfrenada dificultaría alcanzar la temperatura mínima de funcionamiento.

A temperaturas de funcionamiento excesivamente bajas, el carbono utilizado para fabricar discos y pastillas F1 no garantiza la generación correcta de fricción y corre el riesgo de volverse vidriada, comprometiendo el rendimiento de frenado. Además, la acción mecánica de las pastillas sobre los discos fríos puede provocar un mayor desgaste.

  Uso de frenos durante el GP de Fórmula 1 Emilia-Romagna

Según las simulaciones, los pilotos de F1 deberían usar los frenos durante poco más de 9 segundos y medio por vuelta, equivalente al 13 por ciento de la duración total de la carrera. En Monza, en cambio, se utilizan durante 10,75 segundos por vuelta, 17,66 segundos en Mugello, pero ambos tienen más de 5,2 km de longitud mientras que el circuito de Ímola tiene 4,909 metros.

A pesar de tener 21 curvas, solo se necesitan frenos en 8 de ellas, y no se aprietan éstos más de 1,9 segundos en ninguna de ellas. Las distancias de frenada tampoco superan los 100 metros. Pero las cargas sobre el pedal del freno son altas. De principio a fin, un piloto aplicará una carga total de casi 58 toneladas y media, más de 20 toneladas más que en el GP de Toscana.

Las principales frenadas, de la mano de @BremboBrakes , son éstas:#F1 #ImolaGPpic.twitter.com/d1EiaCeOLp

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) October 31, 2020

El tramo de frenada más exigente de Ímola

De las 8 frenadas del GP de Emilia-Romagna, 4 están clasificadas como muy exigentes con los frenos, 2 son de dificultad media y las otras 2 son ligeras.

El más exigente para el sistema de frenada es en Rivazza, curva 18: los monoplazas llegan a 309 kilómetros/hora y luego reducen la velocidad a 145 kilómetros/hora en solo 96 metros. Para ello, los pilotos frenan durante 1,62 segundos, aplicando una carga de 137 kg en el pedal del freno y experimentando una desaceleración de 5,6 g.