Los F1 de 2022 desde los viales: estables a la espera del rendimiento

Decían algunos cálculos que esta nueva reglamentación haría que los coches fueran entre 0,5 y 2,0 segundos más lentos que sus predecesores, y que la cifra final podría variar en función del tipo de circuito. De momento, los test de Barcelona están a 3,6 segundos de la Pole del último GP de España.

Los pilotos coinciden al señalar que los nuevos monoplazas se comportan bien en los tramos más rápidos, pero que es en las curvas más lentas donde acusan los 40 kilos extra con los que cargan este año. Y que esto les está obligando a adaptar su estilo de conducción, sobre todo la forma de frenar.

Pero es obvio que nadie ha enseñado todavía sus cartas y una observación a pie de pista tampoco arroja necesariamente conclusiones claras a estas alturas de la película, porque los equipos todavía practican un rodaje conservador y aún no se ven las costuras de los monoplazas.

Ricciardo, en los viales - © LAT Images

Incluso coches teóricamente inferiores como el Haas se perfilan estables en frenada y trazada, sin apenas correcciones y con las mismas líneas que vemos luego en rivales de mayor calado. Y lo mismo se puede aplicar a otras formaciones de la parrilla.

Mercedes y Red Bull, también en la misma línea. Sí es cierto que hoy Lewis Hamilton se ha permitido un par de correcciones sobre los pianos de la curva cinco, evidenciando que en Brackley también empiezan a pisar el pie del acelerador cuando quieren.

Y mientras esto ocurría, en el paddock llegaba Jim Ratcliffe, el fundador y propietario de una Ineos que es también copropietaria del equipo Mercedes de Fórmula 1. Ratcliffe se ha dejado ver por los viales en compañía de Toto Wolff y George Russell.

Russell también ha hecho acto seguido de maestro de ceremonias para una visita por el box y los camiones del equipo, y se ha detenido unos minutos para explicarle a Ratcliffe y otros invitados las características de los nuevos neumáticos de 18 pulgadas.

De vuelta al resto de equipos, Carlos Sainz rodaba esta mañana con un Ferrari F1-75 que también parecía ir sobre raíles y no mostraba nervio a su paso por los pianos. El madrileño también ha completado algunas pocas vueltas a velocidad baja.

Y otro punto interesante es la curva nueve, que siempre sirve de baremo para ver si hay algún coche que despunte por su aerodinámica por su capacidad para tomarla a fondo. Al menos esta mañana, todos los coches que hemos visto ahuecaban el acelerador en un momento dado.

Por todo lo anterior, la única conclusión clara de este arranque de pretemporada es que los coches todavía distan de rodar al máximo de sus capacidades. Los tiempos actuales sugieren que hay al menos un segundo y medio más de ritmo disponible, sino más. Y al menos de momento ningún equipo ha sacado las uñas.