Cuando Ayrton Senna estuvo a punto de fichar por Williams

1991 y Ayrton ya era tricampeón del mundo. Se le planteaba la duda de si seguir con McLaren-Honda, con los que consiguió sus tres títulos, o emprender un nuevo camino. A pesar de que en el año 1991 Senna ya no veía el mismo potencial en el motor japonés, su lealtad hacia la marca y su compromiso con el entonces presidente de Honda, Nobuhiko Kawamoto, le hizo continuar otros dos años más con McLaren.

"Ayrton quería ir a Williams pero era fiel a Honda. Su instinto le dijo que fuera a Williams antes, pero él era una persona fiel, en especial al señor Kawamoto, que era el presidente de Honda. Era alguien muy cercano a él porque Honda acababa de unirse a Ayrton y a McLaren en 1988 y habían ganado tres campeonatos juntos", cuenta su representante entonces, Julian Jakobi, en el podcast oficial de la Fórmula 1.

"Recuerdo que me decía incluso a finales de 1991, cuando ganó el tercer campeonato, que sentía que Honda ya no era lo que fue y estaba preocupado por el futuro", añade.

Su representante entonces, Julian Jakobi, que ahora es mánager de Sergio Pérez, recuerda que le preparó los dos contratos y que un Ayrton indeciso cambió su destino de la noche a la mañana.

"En 1991 recuerdo ir a Spa con dos contratos para Ayrton: uno para McLaren y otro para Williams. Ayrton sabía que debería haber ido a Williams y teníamos ambos contratos listos para la firma", recuerda Jakobi.

"El domingo por la mañana pensé que iba a firmar con Williams, pero la noche anterior había hablado con Kawamoto en Japón y llegó el lunes por la mañana y dijo 'me voy a quedar otro año' y se quedó en McLaren en 1992, pero podía haber corrido ese año con Williams y probablemente Nigel no hubiese estado allí y es el año que ganó el Campeonato, pero Ayrton dio un paso atrás y Mansell se quedó", relata Jakobi para terminar.

Como adivinó Ayrton, el dominio de Honda se acabó ese mismo 1992 y dio paso al reinado de los propulsores de Renault. Senna dijo entonces 'no' a un coche con el que Nigel Mansell ganó su único título de campeón del mundo ese año.