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La carrera del GP de Hungría nos ofreció una lucha muy interesante en la estrategia, con muchos puntos clave que se mostraron en la pista y que ofrecieron grandes diferencias entre los coches. McLaren buscó con mucha ansia la victoria, Mercedes se favoreció de tener dos sets de duros, Verstappen tuvo miedo cuando no debía y Visa Cash siguió evidenciando que la posición era muy importante.

Uno de los momentos clave de la carrera de Norris y de Piastri estuvo relacionado con la segunda parada en boxes. Un momento clave en el que McLaren estuvo cerca de cambiar de manera inesperada el resultado de la carrera. Veamos las razones que llevaron al adelantamiento de Norris y lo que de verdad buscaba McLaren en este movimiento  

La carrera de Hungría se presentaba como muy importante para Aston Martin, en el sentido de colocar un nuevo paquete de mejoras con el que debían dar un importante paso al frente. Los resultados han dejado al coche en la séptima y octava posición, que sería novena y décima de no haberse producido los problemas de Pérez y de Russell, lo que supone recuperar el quinto lugar en la parrilla. ¿Realmente han funcionado las mejoras? Veámoslo a continuación

La jornada de pruebas del Gran Premio de Hungría nos ha dejado una jornada muy poco reveladora en la que nadie ha tenido clara la verdadera posición de sus coches. Una bandera roja, además, ha restado tiempo de rodaje en la segunda sesión, así que todo dependerá de la manera en que se pueda desarrollar la importante jornada de clasificación del Gran Premio de Hungría. Todo por ver todavía, nada está claro en este primer día de rodaje.

La Fórmula 1 llega a Hungaroring tras un pequeño respiro de unos días sin competición para completar la decimotercera carrera de la temporada, en el circuito húngaro de Hungaroring. Un circuito de media y baja velocidad, con muy pocas curvas rápidas, que nos van a hacer un circuito de estilo urbano y de muy baja velocidad. Algo totalmente opuesto a lo que vivimos hace dos semanas en Silverstone y lo que veremos la próxima semana en Spa.

Hungaroring ha sufrido un cambio de enfoque muy grande desde la temporada 2022. Antes era un evento claramente de una vuelta, donde todo era la clasificación y la carrera tenía muy poco efecto, pero los últimos años, con los nuevos coches y la entrada de neumáticos más blandos han hecho que la clasificación ya no sea todo. Una prueba muy exigente a nivel de estrategia, con una gran trascendencia del ritmo, y con mucho margen para la gestión y actuación en carrera hacen que sea una de las carreras más estratégicas de la temporada. Veamos en este artículo las principales claves que hay detrás de ello  

Una de las grandes claves que tuvo el fin de semana de Silverstone fue la pelea por la victoria, entre Verstappen, Hamilton y Norris. Tres coches en muy corta distancia por la victoria. Y en ello hubo algunos momentos clave, como la segunda parada de Norris. Veamos cómo se desarrollo esta pelea y si realmente Norris pudo haber llegado a la victoria

Mercedes fue el gran protagonista del fin de semana al sorprender a propios y extraños con una gran actuación, tanto a una vuelta como en carrera, que se saldó con la pole de Russell y la victoria de Hamilton. Un gran fin de semana que les dio un resultado muy inesperado, pero merecido por el trabajo que venían haciendo este año. Veamos cuáles fueron las claves que han permitido su victoria

Aston Martin tenía en Silverstone un fin de semana clave, no por la magnitud de los cambios o porque fuera un punto de inflexión, sino por tratarse de la carrera de casa. Sus instalaciones están a menos de 300 metros del circuito, así que la atención que tenían era muy elevada. Un fin de semana muy relevante que tuvo tres fases prestacionales muy importantes, como fue el rendimiento a una vuelta, el rendimiento en carrera y el rodaje en mojado. Veamos a fondo estos tres escenarios y el rendimiento que tuvo Aston Martin en cada uno de ellos

La carrera del GP de Gran Bretaña nos dejó una bonita imagen de rendimiento en seco y en mojado. Red Bull sólo pudo remontar en la parte final de la carrera, McLaren tuvo el coche más completo pero no fue capaz de capitalizar el resultado y Mercedes hizo la carrera más seria y estable, con el premio de acabar siendo los ganadores.

La carrera de Gran Bretaña habitualmente está caracterizada por no tener un gran contenido estratégico. La dureza de los neumáticos, que aquí se emplean lo más duros de toda la gama, junto al estado del asfalto, y la reducida cantidad de vueltas hace que no sea una carrera de muchas paradas. De hecho, en algunas temporadas no se ha llegado a colocar el duro, y a poder completar toda la carrera entre blando y medio. Este iba a ser el escenario de este año, pero hubo un elemento diferenciador que modificó todo el desarrollo de la carrera: la lluvia. Y todo lo que de ella se pudiera derivar.

Una de las grandes claves que ha tenido la ronda final ha sido los problemas que han tenido Alonso y Sainz para cerrar la última vuelta de la sesión. Un momento clave que no han podido aprovechar por diferentes razones. Veamos en este artículo lo sucedido y lo que podría haber pasado de completar bien la preparación.

La sesión de clasificación del GP de Gran Bretaña nos ha dejado una situación muy sorprendente al ver que ni Norris ni Piastri han ocupado la primera posición sino Russell, junto a su compañero, en una primera línea de Mercedes. Una gran actuación para la formación alemana que les ha dado la oportunidad de superar a Norris y Verstappen. Pero la carrera será mucho más que una vuelta y este año la pole puede tener menos relevancia que en otras ocasiones.  

La jornada de pruebas del GP de Gran Bretaña nos ha dejado una primera imagen de lo que nos podemos encontrar este fin de semana. Y esa no es otra que una nueva lucha entre Verstappen y Norris por la victoria, con coches totalmente opuestos pero que convergen en la vuelta y en el ritmo. Mercedes cede en las zonas lentas y Ferrari en las rápidas, pero están tras ellos. Los problemas de Aston Martin han quedado más tapados en esta ocasión, y pueden volver a ser la quinta fuerza perdida.

La carrera de Gran Bretaña podría ser considerada como una de las más exigentes de la temporada por la gran cantidad de curvas rápidas que presenta su trazado y la elevada energía que esto somete a los neumáticos. Sin embargo la realidad no es tan así, y nos encontramos en una carrera a una parada en la que es posible no usar el neumático duro, que aquí es el C1, para hacer toda la carrera entre el neumático medio y el blando. Cosas que contrastan con lo que se podía esperar pero que definen claramente la realidad de este circuito.