Alonso tiene ritmo en Bakú

Bakú es un escenario que en 2018 vio una de las mejores actuaciones de Fernando Alonso. Con el coche destrozado en la primera vuelta, se las apañó para volver al pit-lane y después remontó hasta la séptima posición pese a la pérdida de rendimiento en su bólido.

Fernando, después de un inicio de temporada complicado en términos de adaptación, fijó su punto de mira en el Gran Premio de Francia para el ‘reinicio’ de su temporada, pero en el evento azerí ya ha demostrado que tiene buen ritmo en los libres.

En la primera sesión, pese a que no ha montado el neumático más blando de Pirelli, ha sido el único capaz de colarse en el ‘top 10’ con el compuesto medio, a sólo un segundo y medio de Max Verstappen a pesar de la diferencia de neumáticos.

En cuanto a la segunda sesión de libres, esta vez sí con los neumáticos blandos como protagonistas, ha vuelto a batir a Esteban Ocon para finalizar en la sexta posición, a medio segundo del líder y con todos los motores Mercedes por detrás.

El rendimiento a una vuelta, al menos en los entrenamientos libres, ha sido alentador… pero quizás es más destacable que no se han visto errores por su parte –lo que sí ocurrió en los libres de Mónaco– y que ha demostrado tener buen ritmo en tanda larga.

En una sesión que ha visto cómo los neumáticos de sus rivales se destrozaban, sobre todo los de unos Ferrari que sufrían mucho ‘graining’, Fernando ha llegado a los minutos finales marcando buenos tiempos con los neumáticos más blandos.

Según indicaban en una tabla de la realización de la F1 cuando faltaban sólo unos segundos para el final, Alonso estaba entre los mejores ritmos del momento –en 1’47’’ altos con blandos– y no parecía sufrir demasiado con sus gomas. Es cierto que Pérez y Verstappen estaban en 1’46’’, pero los Red Bull están en otro mundo este año.

Uno de los problemas de adaptación de Alonso reside en la dirección asistida de su monoplaza, pero en carrera ha demostrado tener mejor rendimiento que en clasificación –así se pudo ver en Portugal o Mónaco, por ejemplo–. La clasificación de mañana será una incógnita… pero Alonso tiene ritmo en Bakú.