Hyundai i20 2018: en el medio está la virtud

Hyundai lanzó al mercado su i20 hace ya diez años, en 2009, como un modelo utilitario entre el i10 y el i30, con precio razonable pero un estándar de calidad por encima del Hyundai Getz, a la venta hasta entonces. En 2015 se presentó su segunda generación, que mejoró en todo a su predecesor, e introdujo la variante i20 Active con un aspecto offroad y 2 centímetros más de altura libre al suelo. El Hyundai i20 2018 es una actualización estética, mecánica y tecnológica de éste y, como sus predecesores, está disponible con carrocería de tres puertas –a la que la marca denomina Coupé– y cinco puertas, que hemos probado.

El Hyundai i20 mide 4,03 metros de largo, 1,73 de ancho y 1,47 de alto, por lo que es entre 1 y 3 centímetros más corto que la mayoría de sus competidores: como el Ford Fiesta, el Seat Ibiza, el Mazda2 o los nuevos Peugeot 208 y Opel Corsa, recientemente presentados. No obstante, su distancia entre ejes, de 2,57 metros, ligeramente superior a la de todos ellos y sólo superada en 1 centímetro por la del nuevo Renault Clio y el Kia Rio, con el que comparte plataforma.

HYUNDAI i20: EXTERIOR

Fruto de esta actualización, el i20 cuenta ahora con un diseño más moderno, en el que estrenan un nuevo paragolpes delantero y la calandra 'en cascada', que cambia de forma en línea con los nuevos modelos de Hyundai. Estrena también un nuevo paragolpes trasero, reubica la placa de la matrícula en el portón, e incorpora un nuevo diseño a los pilotos traseros. 

Hyundai remata el conjunto con unas nuevas llantas de 15, 16 y 17 pulgadas y tres nuevos colores para la carrocería, que puede ser bitono y contar con techo solar de manera opcional, lo que ofrece hasta 17 combinaciones diferentes para personalizar el vehículo. Su llama la atención allá por donde pasa, e incluso da la impresión de ser un vehículo de segmento superior por dimensiones y aspecto.

HYUNDAI i20: INTERIOR

En el habitáculo los cambios son sutiles y se centran en la consola central, donde se ha integrado la pantalla táctil del sistema multimedia, compatible con Android Auto y Apple CarPlay, antes ubicada sobre el salpicadero. El diseño del salpicadero es sencillo y, aunque abundan los plásticos duros en las zonas bajas y los guarnecidos de las puertas, transmite sensación de robustez y durabilidad.

El puesto de conducción resulta confortable y es sencillo encontrar una postura ergonómica para conductores de 1,80 metros de estatura, pero no son muy envolventes. La anchura en las plazas delanteras es superior al de un Fiesta, un Ibiza o un Skoda Fabia, y el espacio para las piernas de los pasajeros en las traseras es más generoso que en sus competidores, tal vez por su mayor distancia entre ejes. Además, dos adultos de estatura media y una sillita infantil caben mejor en la banqueta trasera que en la mayoría de los utilitarios y algunos compactos, aunque no ofrece toma de corriente ni salidas del climatizador para los pasajeros.

El maletero, por su parte, cubica 326 litros de capacidad, un dato superior al de los Ford Fiesta y Mazda2, pero inferior al de los Seat Ibiza, Volkswagen Polo o Skoda Fabia. Ofrece un doble fondo para objetos pequeños entre el suelo removible y la moqueta que cubre la rueda de repuesto, y se puede ampliar hasta 1.011 litros si se abaten los respaldos de las plazas posteriores en una proporción de 40/60.

HYUNDAI i20: EQUIPAMIENTO Y ACABADOS

El equipamiento del Hyundai i20 mejora de forma sustancial a la oferta del modelo anterior, y deja patente el mensaje de que, al igual que su hermano mayor el Hyundai i30, el i20 ha sido fabricado en Europa para Europa. De hecho, su producción tiene lugar entre Assan –Turquía– y Nosovice –República Checa–, además de haberse puesto a punto en el centro que la marca tiene en las inmediaciones del circuito de Nürburgring.

Su gama está formada por cuatro niveles de acabado con los nombres Essence, Essence LE, Tecno LE y Style, para la versión de cinco puertas, y únicamente el acabado Sport para la versión Coupé de tres puertas. En la versión de acceso las llantas son de acero y 15 pulgadas, e incluye de serie aire acondicionado, asistente en pendiente, retrovisores de ajuste eléctrico, apoyabrazos central y sistema de arranque y parada automático. Este equipamiento se completa en el acabado Essence LT con la pantalla táctil de 7 pulgadas compatible con Android Auto y Apple CarPlay, cámara de marcha atras, encendido de luces automáticas, volante y palanca de cambio forrados en piel. 

El acabado Tecno LE, el intermedio, añade a lo anterior las llantas de aleación de 16 pulgadas, los retrovisores pintados en negro y da acceso a la carrocería bitono con techo en negro. Además, incluye de serie los faros antiniebla delanteros con función cornering, retrovisor electrocromático, sensores de luces y lluvia, climatizador, equipo de sonido con seis altavoces, programador de velocidad, la alerta por abandono involuntario de carril.

Como tope de gama, el acabado Style aporta de serie el sensor de aparcamiento delantero, luz de cruce automática, detección de fatiga , mantenimiento de carril y frenada de emergencia, techo solar, arranque sin llave y un cuadro de instrumentos específico. Por su parte, el acabado Sport sólo está disponible con la carrocería coupé de tres puertas, y cuenta con detección de fatiga y programador de velocidad, pero no ofrece climatizador, ni techo solar; eso sí, las llantas son de aleación y 17 pulgadas. 

HYUNDAI i20: MOTORES

La gama mecánica del nuevo Hyundai i20 prescinde de mecánicas Diesel de la anterior generación y se ofrece únicamente con motores gasolina de 75, 100 y 120 caballos. El primero es un bloque atmosférico de cuatro cilindros y 1.2 litros que sirve de acceso a la gama y homologa un consumo de 5,7 litros a los 100 kilómetros.

Por encima de este, dos versiones del tricilíndrico turbo 1.0 T-GDI, con 100 y 120 caballos, que incorporan filtro de partículas y homologan un consumo medio de 5 y 5,2 litros a los 100, respectivamente. La transmisión puede ser manual mediante una caja de cambio de cinco marchas en las versiones de 75 y 100 caballos, y seis marchas con el motor de 120 caballos. Adicionalmente, la versión de 100 caballos puede equipar una nueva transmisión automática de doble embrague y siete relaciones, la misma que ya equipaba el i30.

HYUNDAI i20: IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN

Durante unos días hemos tenido la oportunidad de probar con detenimiento el Hyundai i20 con motor 1.0 T-GDI de 120 caballos y acabado Style. Sentados al volante, igual que sucede en el exterior, parece un coche más grande de lo que en realidad es, pero esto no limita sus movimientos. Es amplio para pertenecer al segmento un utilitario, y la visibilidad es buena en todas las direcciones.

En ciudad, el Hyundai i20 se mueve con soltura y permite ratonear con fluidez entre el tráfico y aparcar con facilidad, tanto si hacemos uso de la cámara de marcha atrás de serie como si nos centramos en los retrovisores exteriores. En vías rápidas, es cómodo y muy estable.

Al afrontar un tramo de curvas enlazadas a un ritmo elevado, la suspensión se muestra menos firme que la del Seat Ibiza –de serie– o la del Ford Fiesta ST-Line –que es específica de ese acabado–, pero ofrece más confianza que un Skoda Fabia. En apoyos fuertes, el coche se inclina ligeramente hacia el lateral y acusa un ligero subviraje, lo que probablemente tenga mucho que ver con los neumáticos Michelin Energy Saver de 195 milímetros y perfil 55 sobre una llanta de 16 pulgadas que montaba nuestra unidad. Estamos convencidos que con unos neumáticos con mayor capacidad de tracción esta sensación se mitigaría en gran medida.

En cualquier caso, el paso por curva es rápido y el comportamiento del chasis, ágil. Sus 1.145 kilos de peso se sienten más ligeros de lo que cabría esperar por el aspecto del i20, e invita a divertirse manejandolos de un lado a otro, aunque no es un coche que pretenda vender grandes sensaciones de deportividad. La dirección es rápida y de buen tacto, al igual que la caja de cambios manual de seis velocidades. No hemos probado el cambio automático, pero recordamos que nos gustó mucho su actuación asociado al motor de 140 caballos del Kia Ceed GT-Line.

Con el motor de 120 caballos, el único que hemos probado, el i20 se mueve con soltura, empuja con fuerza desde 2.000 revoluciones por minuto y se estira hasta las 6.000 vueltas, lo que no obliga a trabajar con el cambio más de la cuenta. En comparación con el 1.0 Ecoboost de 125 caballos que probamos en los Ford Fiesta y Focus, también tricilíndrico, el del Hyundai nos parece que empuja antes y acusa menos vibraciones a bajas vueltas. 

En cuanto a consumo, en carretera de curvas y a un ritmo ágil, el ordenador de a bordo arrojó una media de 8 litros a los 100 kilómetros, pero es muy factible rondar los 6 litros a los 100 si se conduce a un ritmo sosegado o en vías rápidas a velocidad legal. No podemos comparar el consumo de manera científica con el que obtuvimos durante nuestra prueba del Fiesta de 125 caballos, pues con aquel circulamos bastante más rápido, pero sí nos da la impresión de que los Ecoboost de Ford pueden ser más eficientes si se es cuidadoso con el acelerador. Respecto al sonido, el escape del i20 es más sonoro –que no molesto– que el 1.0 TSI del Volkswagen Polo, pero menos 'embrigador' que en el Fiesta.  

HYUNDAI I20: PRECIO 

La gama de precios del Hyundai i20 parte de 15.865 euros para la versión 1.2 MPi de 75 caballos con el acabado de acceso, Essence, y la carrocería de cinco puertas. Para acceder al motor 1.0 T-GDI de 100 caballos es necesario optar, como mínimo, por el acabado Essence LE, con un precio de 17.315 euros, o 18.815 euros con el acabado Tecno LE. Si se desea disponer del cambio automático DCT es necesario abonar un extra de 2.200 euros, y 400 euros más por la pintura bicolor para la carrocería.

El Hyundai i20 1.0 T-GDI de 120 caballos que hemos probado sólo se puede asociar al acabado Style y la caja de cambios manual, con un precio de 22.385 euros; mientras que la carrocería de tres puertas sólo se puede asociar a esta mecánica y el acabado Sport, con un precio de 19.285 euros. Para todos ellos, la marca ofrece un descuento de 5.050 euros por la entrega de cualquier vehículo usado como parte del pago y que opten por la financiación de la propia marca.

HYUNDAI I20: CONCLUSIÓN

Con todo, el Hyundai i20 es un coche atractivo, espacioso y con un comportamiento satisfactorio, que no promete grandes sensaciones, pero tampoco defrauda en ningún aspecto. Su equipamiento puede ser generoso en los niveles de acabado más altos, mientras que su precio es inferior al de un Ford Fiesta, un Seat Ibiza y un Volkswagen Polo, pero superior al de un Mazda2, un Skoda Fabia o un Kia Rio equivalentes. En definitiva, un gran coche en el medio del segmento utilitario.