Alonso confirma que correrá Le Mans 2019

Fernando Alonso participará en toda la temporada 2018-2019 del Mundial de Resistencia, ya que su meta no es sólo hacerse con la triple corona, también ser campeón del WEC. Esta semana está en el Autódromo Internacional do Algarve, en Portugal, haciendo unos tests con el nuevo Toyota TS050 Hybrid.

"Tengo claro que estaré en Le Mans 2019 porque el objetivo no es sólo ganar allí sino ser campeón del mundo de resistencia y para eso debes de correr las ocho carreras. Confirmado que voy a hacer todas", ha asegurado en declaraciones recopiladas en un comunicado de Toyota.

En comparación con las 24 horas de Daytona, Le Mans requerirá un esfuerzo extra por parte del piloto de McLaren, ya que la parrilla del WEC cuenta con miembros con mucha más experiencia. Sobre uno de los principales retos que plantea la prueba, que es la gestión del tráfico, Alonso lo encuentra divertido y confiesa que es uno de los mayores atractivos para él de la prueba francesa.

"Habrá que ir viendo y adaptándose al tráfico en pista. No será igual que en Daytona ya que el nivel de pilotaje en el WEC es más alto, hay pilotos con más experiencia, más rodados en este tipo de pruebas. La gestión del tráfico en pista también dependerá de las diferencias de velocidad entre nuestro coche y los GT y los LMP2. Es algo a lo que tienes que adaptarte y anticiparlo. Gestionar el tráfico es la parte más divertida, donde el piloto tiene más que decir y donde, ojalá, pueda sacar más partido", ha añadido.

En los tests que desarrolla esta semana en Portugal Alonso trabaja la adaptación al equipo y se centra en su evolución y en la del conjunto, pues señala que el único rival que tiene Toyota en Le Mans es la propia carrera, 24 horas en las que todo puede pasar. 

"El desafío es Toyota contra Le Mans, no contra los rivales, ya que la propia carrera te pone al límite, al coche, al equipo, a los mecánicos, a los pilotos…Hay tantas variantes en una carrera de 24 horas como la de Le Mans que para Toyota, ahora mismo, más que estar pendiente de los rivales y los otros LMP1 y de lo que puedan hacer, el verdadero desafío es la propia Le Mans y esa es la grandeza de este proyecto", ha descrito.

A pesar de que algunos han dado a entender que combinar dos categorías puede llevar al asturiano a desconcentrarse, el bicampeón de Fórmula 1 lo ve de forma totalmente opuesta y considera el Mundial de Resistencia como una gran fuente de aprendizaje de conceptos que luego puede aplicar al Gran Circo.

"Cada vez que te subes a un coche, independientemente de dónde y cómo sea, aprendes cosas, siempre hay algo que te despiertas la curiosidad o te sorprende. Una categoría tan profesional y avanzada como el WEC en su categoría LMP1 va a hacer que, a buen seguro, a lo largo de la temporada pueda aprender muchas cosas y llevármelas conmigo para el futuro", ha admitido.

Tras las primeras pruebas, Alonso sigue maravillado con la fiabilidad y la tecnología de los prototipos que ahora maneja y reconoce que ésta le ha conquistado. No hay más que leer sus impresiones para saber que se lo pasa bien en el inicio de esta nueva aventura.

"La resistencia es otra disciplina y otra filosofía. Aquí se busca la consistencia, la resistencia. Haces una vuelta a un minuto y 30 segundos y 40 vueltas después sigues clavando ese tiempo porque todo el coche está diseñado para mantener esa consistencia, para carreras de larga duración. Es algo que llama la atención e intentas disfrutar", ha confesado.

"Sales de tu rutina normal y de las sensaciones que tienes normalmente, conduces un vehículo con prestaciones diferentes, muchas de ellas extremas. Igual que en el kart tienes sensaciones diferentes, porque vas muy bajo, no hay suspensión, cualquier irregularidad la notas en el cuerpo, es muy físico... aquí tienes la increíble sensación de la aceleración. El sistema híbrido, el control de tracción, la tracción a las cuatro ruedas...las aceleraciones son espectaculares y eso es muy divertido", ha reconocido.

Además de con coches distintos, el de Oviedo también se ha encontrado con un enfoque diferente de competición con respecto a la F1, también en las jornadas de pruebas y en los entrenamientos. 

"La manera de trabajar es diferente porque la competición y la forma de afrontar las carreras es diferente. Aquí se busca la resistencia y la fiabilidad total. No sin importar las prestaciones, pero son una segunda prioridad. Por tanto, los tests están enfocados a la resistencia, a probar diferentes componentes del coche y llevarlos al límite. Y al piloto también. El modo de cómo debes afrontar cada turno es diferente a la F1. Por tanto, el método de trabajo y la preparación es diferente", ha apuntado.

Alonso asegura que la adaptación al coche y la categoría será mucho más fácil para él con el gran soporte que Toyota le proporciona, y tiene claro que completar las carreras sin cometer errores será una de las claves para el campeonato.

"Intentas adaptarte a él y sacarle el máximo partido. Toyota tiene toda la experiencia de estos años, un grupo de pilotos con mucha experiencia también y varios años en el WEC, así que la adaptación que pueda tener es mucho más fácil con esta estructura detrás", ha señalado.

"La tecnología híbrida es prácticamente imbatible por el ahorro de combustible, por prestaciones…Se supone que vamos a ser el coche de referencia y si lo somos vamos a disfrutarlo, a disputar las carreras sin errores por nuestra parte para sacar ventaja a esa circunstancia", ha adelantado para finalizar.