Russell se estrena: "Nadie entiende el poderío de frenada de un F1"

En su debut en la categoría reina, Russell explica que lo que más es lo rápido que llega todo en un coche de Fórmula 1. Es una realidad que ha vivido en el simulador, pero que le ha sorprendido en al vida real.

"En un Fórmula 1, la mayor diferencia es la dirección asistida. Lo he notado desde que he salido a pista. También la fuerza de frenado. Me esperaba la velocidad en recta y la carga aerodinámica en curva, pero no creo que nadie entienda el poderío que estas máquinas tienen al frenar", explica preguntado por SoyMotor.com después de bajarse del monoplaza.

"Con el GP3, llegamos a la primera curva a 260 o 270 kilómetros/hora y frenamos en la marca de los 100 metros. Con el Fórmula 1 llegas a 300 kilómetros/hora y frenamos 25 metros más tarde. Que eso te entre en la cabeza es un poco difícil, pero ha estado bien".

Russell se siente un poco "dolorido" de la espalda porque el asiento era un poco "estrecho" para él, pero por todo lo demás está perfecto.

Está satisfecho con su rendimiento.

"Estoy bastante contento. Iba con unos reglajes parecidos a los de Valtteri y estaba a medio segundo de él, que es lo que me esperaría después de que él haya hecho un Gran Premio. Superó a Hamilton en clasificación. Mi primera vez en un coche, 119 vueltas y no estoy demasiado lejos de Valtteri. Estoy bastante contento con eso", ha añadido en su rueda de prensa.

"Me siento más y más cómodo con cada vuelta que doy. Acelero antes y freno más tarde. En ese sentido, la confianza esté ahí. Pero que te entre en la mente que llegas a las curvas 20 kilómetros/hora más rápido de lo normal y que frenas 20 metros más tarde, no tiene sentido", explica abrumado.

Ha protagonizado un pequeño trompo, pero sin mayores consecuencias.

"He tenido un susto y he dicho por radio 'algo no va bien aquí'. Luego he perdido el coche en la curva 2, he perdido la zaga. Tras revisar los datos, hemos visto que la dirección y la intensidad del viento habían cambiado. Imagino que ese golpe de viento me ha pillado por sorpresa, pero afortunadamente sin daños para mi coche. A los 10 minutos ya estábamos en pista".

Al margen del resultado, comenta que hoy ha cumplido un sueño.

"Increíble. Hacía mucho tiempo que esperaba este día. Es el sueño de todo piloto joven, llegar a pilotar un coche de Fórmula 1. Suelo hacer trabajo de simulador para Mercedes, pero ponerme en el coche de verdad y entender las diferencias... Sientes las fuerzas G y las cargas en curva, que es algo que ningún simulador puede generar".