La paciencia de Red Bull con Renault se agota y el futuro parece cada vez más claro. El divorcio entre escudería y motorista parece evidente y pronto llegará el momento de decidir qué motorista es el ideal para seguir en la Fórmula 1 e intentar volver a cosechar los éxitos del pasado.
La Fórmula 1 no es un sendero de luz y color. Cuando Carlos Sainz conoció su destino con el Toro de la bebida energética, sabía que le acompañaría a su lado un chico que ni siquiera llegaba a la mayoría de edad. El 'nuevo Senna', decían algunos. La lucha encarnizada entre él y Verstappen iba a ser el 'dale perico al torno' de una temporada. Pero en Hungría, a Carlos, más que una mosca, se le pusó una avispa detrás de la oreja.
Mientras llega el mes de septiembre, fecha que han estipulado para tomar la decisión de su futuro, que pasará por seguir suministrando motores, comprar el equipo Lotus o marcharse de la Fórmula 1, en Renault disfrutarán de unas merecidas ocasiones con la mejor sonrisa tras el más que satisfactorio resultado que consiguieron sus coches en Hungría. Tres de ellos, con Kvyat, Ricciardo y Verstappen al volante, acabaron entre los cuatro primeros.
No todo iban a ser buenas noticias para Daniel Ricciardo. Tras su tercer puesto en Hungría, hay que analizar también las consecuencias negativas que dejó el Gran Premio. Entre ellas destaca que el aussie se encuentra al borde de ser penalizado, por segunda vez ya, al poner un nuevo motor una vez que se reanude la actividad después de su receso de verano.
Nico Rosberg no ha tenido que levantarse de muy buen humor este lunes. Sabe que ha perdido una oportunidad de oro para arañarle puntos a su compañero en el Mundial, pero estaba claro que el de Hungría no iba a ser su Gran Premio. El alemán ha querido quitarle un poco de leña al fuego afirmando que Lewis Hamilton no es el único protagonista de sus preocupaciones, aunque si reconoce que en Hungaroring su objetivo era superarlo.
Anteriormente y hasta la pasada temporada, se llegó a creer que la organización de la F1 había fijado como límite 20 carreras por temporada, pero para el próximo año se estipulan 21, algo que tiene preocupados a varios jefes de equipo y también a los pilotos. Así que cuando se le preguntó sobre la idea que planea, en parte, Bernie Ecclestone, Romain Grosjean bromeó: "¡Creo que el límite sería el divorcio con mi mujer!".
No fue el Gran Premio deseado para los pilotos de Force India. Los dos discípulos de Vijay Mallya abandonaron en la carrera de Hungría por problemas en sus monoplazas. Se fueron a las vacaciones con las manos vacías antes de afrontar dentro de tres semanas el GP de Bélgica. "Fue un fin de semana muy difícil para nosotros, desde el viernes hasta el domingo", manifestó Sergio Pérez.
El Gran Premio de Hungría pudo haber acabado perfectamente con un doblete. No, no de Mercedes, sí de Ferrari, cuyos pilotos podían haber terminado la prueba en 1º y 2º lugar, situación que no ocurre desde el 2010. Sebastian Vettel logró el triunfo, pero Kimi Räikkönen no tuvo esa suerte y abandonó a pocas vueltas del final. El alemán se mostró muy disgustado con la retirada de su compañero y espera que esto no afecte a su futuro dentro de la Scuderia.
El Gran Premio de Hungría fue uno de los peores fines de semana de la temporada para el equipo Williams. Su paso adelante les hizo soñar con alcanzar la segunda plaza de Ferrari en el Mundial de Constructores pero ni Felipe Massa ni Valtteri Bottas consiguieron puntuar en la caótica carrera vivida en Hungaroring. Una prueba que se torció desde el comienzo, cuando el piloto brasileño tuvo problemas con su asiento en la salida.
Marcharse de Hungría sin ningún punto en su casillero fue algo inesperado para Force India, máxime si se tiene en cuenta que la recién estrenada versión ‘B’ de su monoplaza había funcionado muy bien en Silverstone. Sin embargo, los dos abandonos de sus pilotos fueron un duro golpe. Especialmente sorprendente fue el accidente de Nico Hülkenberg, causado por un desprendimiento de su alerón delantero que hizo inútiles los esfuerzos del piloto para continuar en carrera.
La victoria de Ferrari no podía llegar en un mejor momento, cuando los rumores parecían indicar que los días en Maranello para James Allison podían estar contados, así que el resultado de ayer le va a dar al británico un gran alivio. Todo el equipo necesitaba una alegría así después de unas carreras en las que parecía que los Williams se les subían a las barbas, pero por distintas circunstancias han podido subsanar la situación.
Sebastian Vettel vivió un día de ensueño en el circuito de Hungaroring. El piloto germano logró igualar las 41 victorias de Ayrton Senna y convertirse en el tercer piloto de la historia de la F1 con más victorias, solo por detrás de Michael Schumacher (91) y Alain Prost (51). Además, también se ha convertido en el segundo piloto con más kilómetros liderados(13.446) superando los (13.430) de Ayrton Senna.
Force India tuvo un fin de semana para olvidar. Sus dos monoplazas acabaron accidentados y todo apunta a que fue culpa de los pianos del circuito de Hungría. El equipo indio vio como su coche 'B', que sólo tenía un gran premio de rodaje, quedaba destrozado después de una salida de pista de Sergio Pérez durante los Libres 1, que no le permitió rodar en los Libres 2. Por precaución, su compañero de equipo Nico Hülkenberg tampoco participó en la sesión de la tarde.
Renault parece que se dirige a un futuro sin Redbull. Este fin de semana en Hungría, entre los rumores sobre si compraran Lotus o no, el jefe de Renault, Cyril Abiteboul, ha lanzado un dardo envenenado a sus socios austríacos: "Cuando leemos que Redbull pierde dinero con Renault, éste comentario es completamente inaceptable. Combinando todo el dinero que reciben, las cantidades que les paga Total y Infinity, así como los fondos de los premios, estamos hablando de medio billón de euros", dijo para RMC Sport.
Carlos Sainz reconoce que siguió sus instintos a la hora de decidir firmar con Williams para 2025. Si bien su padre está seguro de que Audi será un equipo fuerte en el futuro, el aún piloto de Ferrari cree que Grove es su mejor destino a corto y medio plazo.
La normativa de 2026 ha puesto el ojo en los equipos cliente. Desde esa temporada, todos los que acaben en el ‘Top 5’ de un Mundial, estarán obligados a fabricar todas las piezas de su coche en un plazo de tres años. Una medida que afectaría especialmente a Haas y RB, aunque estos últimos le han dado el visto bueno.
Frédéric Vasseur ha confesado que perdieron entre uno y dos meses de desarrollo en los alerones flexibles. El equipo pensaba que las iban a prohibir después de la investigación que se inició en Bélgica, donde se utilizaron unas cámaras para controlar la flexión.
Corría el año 1988 cuando salieron al mercado los primeros coches con un sistema de head-up display, una idea que hacía décadas que sobrevolaba la industria y se dejaba ver en varios prototipos, pero que todavía nadie había conseguido llevar a producción. El japonés Nissan Silvia S13 y el estadounidense Oldsmobile Cutlass Supreme, que llegó a ejercer de pace-car en las 500 Millas de Indianápolis, fueron los encargados de abrir camino. El resto es historia.