Wolff: "Un equipo dominante no es bueno, pero ¿qué puedo hacer yo?"

Desde que se produjo el cambio de normativa el año pasado, Mercedes ha ganado 32 de las 38 carreras que se han disputado desde entonces, con Lewis Hamilton ganando el título en los dos años de competición. Wolff acepta que las flechas de plata podrían estar haciendo daño a la F1, pero también dice que seria un error culpar al fabricante alemán, ya que ha demostrado que no mira solamente por sus propios intereses.

Muchos históricos olvidan que esto cambia, que el producto necesita desarrollo

"¿Es bueno para la Fórmula 1 que haya un equipo dominante y que sea bastante predecible, como ha sido en 2014 y 2015? No es bueno, pero si nos fijamos en que históricamente siempre ha sido así, la pregunta es: ¿Qué puedo hacer yo?", explica Wolff en declaraciones recogidas por Autosport.

"Esperamos que la competencia crezca más fuerte con el tiempo, y debemos dejar de idealizar el pasado, lo bueno que era. Tiendo a ver que muchos de los históricos han olvidado que hemos cambiado, que el producto necesita desarrollo. No hemos bloqueado cosas como la apertura de las posibilidades de desarrollo de los motores, por ejemplo, para el próximo año. Si hubiéramos sido puros oportunistas intransigentes lo hubiéramos parado, pero no hicimos eso".

La semana pasada, Bernie Ecclestone lanzó un dardo a los fabricantes con más poder, Ferrari y sobre todo Mercedes, al poner en duda su compromiso con el deporte comparándolos con otros como Toyota o BMW que dejaron la F1 cuando mejor les convino. Esas palabras recogidas por la BBC se produjeron al no haber acuerdo para un motor independiente más barato para los equipos más modestos.

Hemos sido un socio leal a la F1 y una de las marcas que le da más credibilidad

Sin embargo, Wolff asegura que Mercedes está muy comprometida con la F1 ya que están involucrados desde 1995 cuando empezaron a motorizar a McLaren: "Hemos sido un socio leal a la Fórmula 1. Hemos estado en el deporte durante 23 temporadas continuas, y también somos una de las marcas que da credibilidad a la F1".

"Estamos al cargo por cualquier discusión que sea sensata sobre dónde debe ir la Fórmula 1. Dimos nuestra opinión de que no creíamos que un motor independiente con un rendimiento equilibrado fuera la dirección en la que debe dirigirse el deporte. Sea lo que fuera que molestó a Bernie o no, no lo sé, hay algo que sí le molestó. Pero a Bernie le encanta ser controvertido. A veces no critica en los medios de comunicación, y lo acepto", concluye Wolff.