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El pasado Gran Premio de Gran Bretaña fue una nueva prueba de que Williams no está acostumbrado a luchar por victorias y, todavía, está lejos de batallar cuerpo a cuerpo con Ferrari. La presión fue excesiva y desaprovecharon una oportunidad de oro para recortar distancias con los de Maranello. La escudería de Grove pudo reducir la ventaja tres puntos, pero la distancia entre los dos equipos sería mucho menor si la estrategia hubiera sido la adecuada y los pilotos no se hubieran venido abajo en cuanto apareció la lluvia. 

A pesar de que, tras liderar la primera parte de la carrera disputada en Silverstone este fin de semana, Williams terminara con ambos monoplazas fuera del podio y con un Valtteri Bottas a punto de perder la quinta plaza a manos de Daniil Kvyat, Rob Smedley ha señalado que su equipo aún debe sentirse orgulloso por lo que hicieron en el GP de Gran Bretaña.

El domingo los Williams perdieron una oportunidad de oro para doblegar a Mercedes. Valtteri Bottas y Felipe Massa fueron rebasados con un simple undercut por parte de Lewis Hamilton y no han tardado en lanzarse dardos entre ambos pilotos. 

La desacertada estrategia que Williams protagonizó en Silverstone sigue dando que hablar. Toto Wolff ha sido el último en aportar su opinión, señalando que a los de Grove, "quizás les pillaron a contrapié". Tanto Massa como Bottas consiguieron ponerse por delante de los dos Mercedes en los primeros compases de la carrera, pero un 'undercut' de Lewis Hamilton permitió al británico robarle la cartera a ambos Williams y recuperar el liderato.

Este fin de semana saltó el rumor de un posible retorno de Aston Martin a la F1 de la mano de Red Bull, una alianza comercial que, como resultado, permitiría a la escudería energética montar motores Mercedes a partir de 2016. La marca germana es dueña de un 5% de la británica, por lo que su vuelta se limitaría a una presencia comercial, mientras que los propulsores seguirían siendo producidos y suministrados por Mercedes.

Hace unas semanas empezó la 'Silly Season' y con el paso de los días cada vez parece que será más explosiva. Los candidatos por tomar el asiento de Kimi Räikkönen en Ferrari cada día son más. Si recientemente se vinculó al jovencísimo Max Verstappen con la Scuderia, ahora a su compañero de equipo, Carlos Sainz, también se le ha vinculado con el equipo italiano.  

El Gran Premio de Gran Bretaña escondió, insisto, escondió la grave crisis que sufre la Fórmula 1 por unos instantes. La carrera que se disputó en el mítico circuito de Silverstone tuvo todos los ingredientes necesarios para disfrutar de un gran espectáculo. Coches de seguridad, incluido el estreno del Safety Car Virtual, luchas por el liderato, condiciones meteorológicas cambiantes. La receta de la carrera perfecta la descubrimos el pasado domingo.

La resaca del Gran Premio de Gran Bretaña tiene un nombre propio: Williams. La formación de Grove volvió a dejar escapar la oportunidad de ganar una carrera y, no solo eso, sino que también perdieron el podio con Sebastian Vettel. La estrategia conservadora y la lluvia les perjudicó, pero Valtteri Bottas va más allá y considera que si hubiera adelantado a Felipe Massa en la primera parte de la carrera, hubiera tenido más opciones. 

El equipo Williams tuvo la clave de la carrera, pero la lluvia y unas paradas más lentas en los boxes llevaron a las sorpresas de la carrera a terminar cerrando el top-5. Ambos coches empezaron a sufrir en cuanto la lluvia empezó a caer y Sebastian vettel les arrebató el podio, pero hay cosas buenas que destacar.

Felipe Massa se ha mostrado satisfecho con su  cuarta posición en el Gran Premio de Gran Bretaña pese a los dos errores estratégicos que han cometido desde el muro de Williams durante el transcurso de la carrera, entre los cuales destaca la decisión de impedir a Valtteri Bottas adelantarle en las primeras vueltas gracias al buen ritmo que había logrado cuajar con el neumático medio cuando ocupaba la segunda posición.

Los primeros momentos de la carrera apuntaban a que Williams podría ser la gran sorpresa del fin de semana después de una espectacular salida de sus dos pilotos. No obstante, la formación de Grove ha vuelto a fallar en la estrategia y regaló, sin quitar méritos a Lewis Hamilton ni a los Mercedes, la victoria a sus rivales.

Williams es el centro de todas las críticas tras los dos fallos estratégicos que han cometido desde el muro en el Gran Premio de Gran Bretaña; primero en condiciones de seco al no ser capaces de adelantar su parada y mantener el liderato por delante de Lewis Hamilton, y luego en condiciones de mojado cuando Sebastian Vettel ha logrado superarles con el intermedio precisamente por haberse mantenido demasiado tiempo sobre la pista con el compuesto duro.

Lewis Hamilton, Nico Rosberg y Felipe Massa han sido los tres hombres más rápidos en la sesión clasificatoria del Gran Premio de Gran Bretaña. Pese a que el orden de Mercedes parezca ya monótono, lo cierto es que ambos pilotos han mantenido una lucha frenética por la pole durante todo el fin de semana, mientras que Massa ha logrado superar a ambos coches de Ferrari para aumentar así sus opciones de subirse mañana a uno de los cajones del podio.

El equipo Williams se ha destacado como el segundo mejor coche este fin de semana. Con los Toro Rosso perdiéndose en el grupo y los Ferrari no acabando de destacar, los de Grove se aprovechan y copan la segunda fila de parrilla. El objetivo es claro: luchar por el podio y por la mayor cantidad de puntos posibles.