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Ferrari será la encargada de probar los neumáticos de mojado de Pirelli en un test que se celebrará la semana que viene en Fiorano, según ha podido saber el portal estadounidense Motorsport.com. Dicha prueba se llevará a cabo con el monoplaza de 2015 de la Scuderia, con pequeñas modificaciones. 

Paul Hembery cree que en Silverstone se probarán al 100% los monoplazas de 2017. Las características del trazado de Northamptonshire son las ideales para explotar al máximo los recursos de la nueva normativa, y por eso Hembery afirma que los pilotos disfrutarán mucho. 

Paul Hembery, máximo responsable de Pirelli en la Fórmula 1, no está seguro de que en 2017 mejore la competición tras los cambios normativos. Los nuevos monoplazas tendrán mucha más carga aerodinámica y eso puede dificultar seguir de cerca a otro piloto, por lo que los adelantamientos puede que sean más difíciles.

Malas noticias para los amantes de los pit-stops, donde la adrenalina suele estar a flor de piel mientras se intenta conseguir la parada perfecta. El jefe de Pirelli, Paul Hembery, ha declarado que espera muchas carreras con una sola parada en la temporada 2017, como consecuencia de la modificación de los neumáticos.

Según Paul Hembery, jefe de Pirelli Motorsport, el verdadero rendimiento de los neumáticos no se verá en la Fórmula 1 hasta la llegada del Gran Premio de China. Recordemos que el reglamento cambia, y además de unos coches estéticamente diferentes, nos encontraremos también unas gomas más anchas.

Paul Hembery es optimista con la próxima temporada de Fórmula 1. El deporte se enfrenta a un gran cambio en el reglamento, que aumentará la aerodinámica de los monoplazas para hacerlos mucho más rápidos en curva, y también habrá cambios en los neumáticos, que serán un 25% más anchos que los de ahora. 

Pirelli aterriza en Malasia con la expectativa de contemplar "múltiples paradas" en la carrera del domingo bajo el efecto de las altas temperaturas sobre el circuito de Sepang. El reasfaltado completo de la pista debería ayudar a reducir de forma significativa los niveles de degradación respecto a las anteriores ediciones, si bien las curvas rápidas del trazado y su tradicional efecto abrasivo en tandas largas han obligado a Pirelli a incorporar una estrategia conservadora con los neumáticos duro, medio y blando, elección ausente en la parrilla desde el pasado Gran Premio de Gran Bretaña.

La próxima temporada comienza a adivinarse en el horizonte con una gran cantidad de cambios que podrían llegar a la pista con el efecto de revolucionar todo el escenario actual y llevar la competición a una nueva dimensión. Entre los ingredientes más importantes se pueden localizar el aumento de carga aerodinámica producida por los coches y el mayor agarre mecánico generado por unos neumáticos más anchos. Pero todo ello necesita preparación y estudio, por lo que se están llevando a cabo diferentes pruebas en las que se están usando coches híbridos de 2015, dotados de más carga vertical de manera artificial, con el objetivo de poder simular los niveles de aerodinámica que recibirán en 2017.

Pirelli está probando sus neumáticos de 2017 con el uso de coches de 2015 de Ferrari, Mercedes y Red Bull, adaptados a los niveles aerodinámicos de la próxima temporada. Sin embargo, Paul Hembery está preocupado por la poca preparación que se les está dando a los neumáticos de lluvia.

Pirelli prosigue con su programa de test de los nuevos neumáticos anchos que tendrá la Fórmula 1 a partir de 2017. En esta ocasión, en dos circuitos distintos, Mercedes y Ferrari son los protagonistas de las pruebas.

Con apenas nueve carreras para el final de la temporada, algo menos de la mitad de la temporada, el desafío de 2017 ya se comienza a observar en el horizonte más cercano de la competición. Los nuevos coches, de hecho, están ya en fase de diseño, y en las próximas semanas llegarán a los simuladores para realizar las primeras sesiones de adaptación a lo que será uno de los cambios más radicales que tendrá la F1.

En Pirelli creen los equipos no deberían quejarse de que Mercedes, Ferrari y Red Bull sean los encargados de dar los primeros datos a los italianos sobre los nuevos neumáticos de 2017. Aunque todas las escuderías podían participar, era necesario adaptar un monoplaza de 2015 a las especificaciones aerodinámicas de 2017, un gasto que no todos pueden afrontar mientras trabajan en las evoluciones de este curso y en el monoplaza del próximo año.

Paul Hembery ha descartado categóricamente que Pirelli extrajera conclusiones representativas tras sus primeros test con los neumáticos del 2017. Ferrari y Red Bull cedieron sus monoplazas a la marca milanesa para celebrar dos jornadas de pruebas en Fiorano y Mugello tras el Gran Premio de Alemania a principios del mes de agosto, y aunque la sensación general apuntara al optimismo con las prestaciones de los nuevos PZero, Hembery reitera que la fase experimental en la que aún se encuadra su trabajo para el próximo año impidió encontrar referencias de rendimiento claras respecto a los diseños del 2016.

El reto que afronta Pirelli en 2017 es mayúsculo. Han de preparar unos neumáticos que respondan a las exigencias de una categoría que va a sufrir un gran cambio normativo con el objetivo de satisfacer las altas expectativas de los aficionados. Para afrontar ese reto, Pirelli ha demandado disponer de suficientes días de test como para poder probar sus nuevos compuestos, pero hay algo más. El fabricante italiano considera que necesita realizar las pruebas en unas condiciones similares a las que se experimentarán durante la temporada, motivo por el cual han asegurado que los test de pretemporada deberían volverse a realizar en Baréin.