Hamilton, atónito por las alcantarillas de Bakú: "¿Cómo es posible?"

Lewis Hamilton ha quedado impresionado, como todos los espectadores, con el problema en el alcantarillado de Bakú que ha hecho que se suspenda la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Azerbaiyán.

Una tapa de una alcantarilla se levantó cuando pasaba Charles Leclerc por encima y cuando llegó a esa zona del circuito George Russell, su FW42 quedó totalmente destrozado.

Hamilton ve inaceptable que no se haya revisado el circuito antes de los entrenamientos por lo peligroso que puede ser que una de las tapas se desprenda en mitad de unos libres o incluso en clasificación o carrera, aunque también ha admitido que el hecho de que la sesión acabara antes de lo previsto le ha venido bien para poder satisfacer su nueva adicción, la serie Juego de Tronos. 

"¿Cómo es posible que no hayan comprobado y sellado las alcantarillas? Bueno, eso me da más tiempo para ponerme al día con Juego de Tronos. De hecho, había pensado en levantar la alcantarilla para poder ver un capítulo. No tengo reuniones ahora mismo, así que veré Juego de Tronos", ha compartido Hamilton en Twitter.

En los últimos días Hamilton ha descubierto la popular serie de televisión y reconoce que se arrepiente de no haberla empezado a ver antes y no ahora con el boom del estreno de la última temporada. 

"Chicos, creo que estoy enfermo, mi adicción a Juego de Tronos es tal que tengo muchísimas ganas de que termine el día para ir a casa y ver un capítulo antes de irme a la cama. La serie está cambiando mi vida, es genial. A todos los actores, muchas gracias por lo que habéis hecho, lo aprecio mucho", ha contado por Instagram.

El problema de hoy con el alcantarillado no es nuevo en la Fórmula 1. El Gran Circo ya ha tenido malas experiencias con este tema, por ejemplo en Sepang en 2017, cuando el coche de Romain Grosjean quedó destrozado por el mismo motivo y Haas recibió una compensación por ello.