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Tras varios meses de rumores, finalmente Toro Rosso ha confirmado su alineación para la temporada 2017. Carlos Sainz, que renovó por un año más pese a que su nombre sonó para el equipo Renault hasta hace unas semanas, estará acompañado de nuevo por Daniil Kvyat el próximo año. El piloto ruso, perdió toda la confianza tras tener que ceder su asiento en Red Bull a Max Verstappen y los resultados le colocaban con pie y medio fuera de la órbita de Red Bull. Sin embargo, pese a los buenos resultados de Pierre Gasly y a que se habían abierto algunas opciones más ante él, Toro Rosso ha confiado en su talento para ayudarles en la importante temporada 2017.

El final de año para Toro Rosso será muy duro si nos atenemos al rendimiento mostrado en Japón. Aunque el coche no es muy competitivo, todos parecen estar de acuerdo en que el lastre del coche es la unidad de potencia. Su escasa velocidad punta condenó hoy a Sainz a verse atrapado tras los McLaren y finalizar decimoséptimo. Kvyat, que asegura que cada vez se encuentra mejor, pudo acabar decimotercero, un resultado que aún dista mucho de las expectativas del equipo.

Franz Tost, director general del equipo Toro Rosso, ha admitido ante los medios de comunicación que su piloto ruso Daniil Kvyat ha vuelto a recuperar la confianza en sí mismo después del último Gran Premio en Singapur.

Franz Tost cree que es poco probable que Red Bull renuncie a Carlos Sainz, a quien la especulación sitúa en la órbita de Renault en 2017 a cambio de motores más baratos para la marca de bebidas energéticas.

El jefe de Toro Rosso, Franz Tost, admite que no fue fácil para el equipo perder a Max Verstappen una vez comenzada la temporada. Después del Gran Premio de Rusia, el holandés subió a Red Bull para sustituir a Daniil Kvyat, quien bajó a Toro Rosso para ocupar el asiento de Max. El primer Gran Premio de Verstappen con Red Bull fue el Gran Premio de España, donde también ganó su primer carrera Fórmula 1 con sólo 18 años, convirtiéndose así en el piloto más joven en ganar una prueba de la categoría reina.

El equipo Toro Rosso se presentaba en una situación relativamente complicada al comienzo de la temporada, ya que se vieron obligados a trabajar con un motor Ferrari de 2015 ante la falta de opciones. Con todo el trabajo desarrollado durante el invierno, arrancaron delante pero, poco a poco, la evolución del resto de equipos les ha hecho perder su ventaja inicial.

La figura de James Key, director técnico de Toro Rosso, está atrayendo cada vez más interés dentro del mundo de la Fórmula 1. El ingeniero británico es uno de los talentos más prometedores de la categoría. Tanto es así que el jefe del equipo, Franz Tost, cree que será el próximo Adrian Newey. Es por eso que el equipo de Faenza teme que un equipo grande intente ficharle, aunque confían en que respete su contrato y siga creciendo con ellos.

El equipo Toro Rosso no ha tenido una primera parte de la temporada especialmente brillante, pues sus resultados no han sido lo que habrían esperado. Tras haber dado un paso muy importante en su monoplaza, vieron cómo el hecho de tener un motor de la pasada temporada les ha restado bastantes opciones en la lucha con otros rivales, hasta el punto de quedarse fuera en algunas Q1 en esta temporada.

Adrian Newey es uno de los mayores genios del automovilismo. Por sus manos ha pasado el diseño de algunos de los mejores coches de los últimos años, y hablar de él es hablar de uno de los talentos más diferenciadores. Sin embargo Franz Tost, jefe de Toro Rosso, cree que en el equipo de Faenza hay un ingeniero que puede ser el heredero de Newey: James Key, actual director técnico de la escudería.

Franz Tost no ha tenido que lidiar con problemas internos desde el cambio de piloto en el Gran Premio de España, aunque el austriaco no los descarta para la segunda mitad de temporada: la dupla actual de Toro Rosso es muy rápida. 

El cambio de pilotos entre Red Bull y Toro Rosso con Max Verstappen y Daniil Kvyat de proganistas tras el GP de Rusia fue una de las noticias más importantes que se han dado, no sólo en este año sino en las últimas temporadas de la Fórmula 1. Así, el piloto ruso vio cómo pasaba de poder luchar por las victorias con su RB12 a estar relegado a la zona media, y sobre todo, ver cómo sus opciones de futuro con Red Bull se alejaban cada vez más tras entrar en una dinámica negativa.

Definitivamente no ha sido el fin de semana para Toro Rosso. Pocas cosas han salido bien en el Gran Premio previo a las vacaciones de la Fórmula 1 y se van de Hockenheim con las manos vacías. Un ritmo precario, errores durante las paradas en boxes y una clasificación pobre han sido el bagaje de los de Faenza en la cita alemana. Ahora tendrán que centrarse para una dura segunda mitad de temporada, empezando por el GP de Bélgica a finales de agosto.

Carrera agridulce para Toro Rosso en Hungría después de que Carlos Sainz haya conseguido sumar puntos pero no haya logrado superar al McLaren-Honda de Fernando Alonso. El día ha ido bastante peor para Daniil Kvyat, quien ha firmado su particular calvario con la decimosexta posición final.