Criptonita Sainz

Si ayer dijimos que Carlos Sainz hizo de ‘Superman’ en la clasificación de Australia, hoy podríamos decir que en realidad se ha convertido en el ‘antídoto’ para vencer a Red Bull. O la criptonita, para continuar con el ‘vocabulario peliculero’.

Hay que recordar que Red Bull había ganado 24 de los 25 últimos Grandes Premios. Desde el Gran Premio de Abu Dabi 2022, la única victoria ‘no Red Bull’ era de Carlos Sainz en Singapur 2023. Y hoy ha vuelto a ser el piloto capaz de cortar las alas a los ‘energéticos’.

La carrera de Sainz ha sido inmejorable. Salía desde la segunda posición tras la gran actuación de ayer y se ha permitido el lujo de ‘atosigar’ a Max Verstappen desde el inicio. Después ha llegado ese extraño problema en el RB20 y todo ha cambiado.

Ha sido la sorpresa del día. Verstappen ha dicho por radio que el coche iba un poco "suelto" y, poco después, ¡el RB20 ha empezado a echar mucho humo y fuego en la zona de la rueda trasera derecha! ¡Max ha tenido que abandonar la carrera después de sólo cuatro vueltas!

Carlos ya había adelantado a Max en la segunda vuelta. Pero, obviamente, las opciones de victoria aumentaban con el neerlandés fuera de carrera. Eso sí, había que rematar la faena… y Carlos ha hecho un ‘carrerón’.

Su ritmo ha sido inalcanzable para el resto e incluso se ha permitido el ‘lujo’ de hacer sus pit-stops en el momento que ha querido, gracias a la ventaja conseguida previamente. A lo Verstappen. A la postre, el español ha batido holgadamente a Leclerc y a Norris para llevarse la tercera victoria en la F1.

No podemos olvidar que Carlos fue operado de apendicitis el viernes 8 de marzo. Su participación en el Gran Premio de Australia llegó a estar en duda, pero no sólo se subió a su SF-24 el viernes, sino que ayer dio un recital en la clasificación y hoy ha vuelto a subir a lo más alto del podio.

La resiliencia de Carlos es infinita. Es obvio que no estaba al 100% de sus capacidades, pues el viernes admitió que aún tenía algunas molestias, pero ha pilotado con maestría a más de 300 kilómetros/hora en Albert Park con unos cinturones haciendo mucha presión sobre la zona abdominal después de sólo 16 días. Increíble.

El golpe en la mesa ha tenido que sonar muy fuerte. Carlos comenzó el año con una fantástica actuación en Baréin y, tras no poder competir en Arabia Saudí, ha vuelto a batir a Charles Leclerc en su camino hacia la victoria.

Es realmente doloroso ver que Carlos, si no fuese por lo de Arabia Saudí, podría ser el líder del Mundial ahora mismo. Está a 11 puntos de Max Verstappen y el Ferrari fue el segundo mejor coche en Yeda, de modo que una tercera o cuarta posición era posible. De hecho, Leclerc fue tercero.  

Pero la actuación de Sainz ha sido memorable… y hacerlo tras la operación de apendicitis le otorga un toque de épica al asunto. Se ha puesto el ‘modo héroe’ en su último año con Ferrari.