Boullier a Honda: "Debemos ganar en uno o dos años, no en cuatro"

"No estamos haciendo un trabajo suficientemente bueno, es así de simple. Hoy no hay excusas. No estamos listos como equipo". Así de tajante se muestra Boullier cuando el diario The Telegraph le pregunta sobre la crisis tan profunda que atraviesan esta temporada. La millonaria inversión en el proyecto se traduce en un fracaso continuo con dos de los mejores pilotos, todo ello por una estricta regulación técnica que, más allá de obligarles a utilizar varios recambios de sus motores, destapa de forma evidente la falta de comunicación y entendimiento que existe hoy en día entre McLaren y Honda.

Había objetivos ambiciosos que se han truncado por la falta de fiabilidad

Mientras que Ron Dennis intenta que los ingenieros japoneses comprendan sus indicaciones en un "confuso léxico" inglés, según relatan en The Telegraph, Boullier es el encargado de ofrecer la versión más realista posible sobre un proyecto falto de esperanza y lleno de interrogantes: "Algunos pensaban que McLaren-Honda vendría y dominaría el deporte como en los 80. Otros eran más realistas, pero eran pocos. Entiendo que la gente dijera que era una ventaja para Honda entrar un año más tarde, pero la realidad es que están pagando el precio de haber entrado dos años más tarde que el resto".

La mística de Ayrton Senna y los años gloriosos de McLaren-Honda han dado paso a una sensación de inferioridad e incertidumbre frente a la posibilidad de que nunca sean capaces de batir a Mercedes con los motores V6 Turbo. Los millones de euros invertidos en los contratos de Alonso y Button, la evolución del motor, la creación de un chasis revolucionario y la llegada de Peter Prodromou han servido de muy poco para la estructura de Woking: "Había objetivos ambiciosos que se han truncado por la falta de fiabilidad", reconoce Boullier. Si alguien ha hablado de objetivos es Yasuhisa Arai, quien apostaba por conseguir el primer podio de la temporada en Silverstone y hacer frente al dominio de Hamilton y Rosberg en las últimas carreras de la temporada.

Ponemos bajo presión a Honda para acelerar el proceso cueste lo que cueste

Estos testimonios extremadamente optimistas que siguen emitiendo desde Honda chocan frontalmente con el objetivo tan pobre que barajan en McLaren precisamente para el GP de Gran Bretaña: luchar con Sauber por no caer eliminados de la Q1. El hecho de que una de las escuderías más prestigiosas de la historia pueda ser la más lenta de la parrilla en su carrera de casa supone una lacra inaceptable para Boullier, quien exige a Honda una mejora drástica en el rendimiento de su motor: "Para Honda es un proyecto de cinco años, y si ganan en tres o cuatro será un proyecto exitoso. En McLaren no podemos permitirnos esperar tres o cuatro años. Necesitamos ganar en un año o dos".

¿Está Boullier metiendo una presión extra a Honda? Así lo confirma el propio director deportivo de McLaren: "Les ponemos bajo presión para acelerar el proceso, cueste lo que cueste". El tiempo pasa y los resultados no mejoran, razón de peso para que desde Woking quieran ver una mayor rapidez en el trabajo que desempeñan los ingenieros de Honda, caracterizados históricamente por su lentitud a la hora de tomar decisiones. A pesar de esta crisis interna, Boullier no se arrepiente de haber abandonado su proyecto con Mercedes para empezar a trabajar con Honda. "Era la decisión correcta. No puedes ganar campeonatos sin un motor propio. Es imposible", indicaba al respecto.

DESCUBRIR EL POTENCIAL PARA NO AGOTAR A ALONSO

De hecho, Boullier reconoce abiertamente que la fragilidad del motor japonés esconde tras de sí unas prestaciones ciertamente sorprendentes: "Sabemos que si exprimiéramos este motor al 100%, no son décimas lo que ganaríamos, sino segundos. Segundos", comenta el francés, ajeno a los importantes retrasos que ha causado la mala integración del motor combustión y el sistema ERS con el chasis del MP4-30. Los planes que barajan dentro de la escudería británica pasan por centrar la implantación de sus siete tokens restantes en estos dos elementos de su unidad de potencia, si bien es cierto que tampoco descartan reservarlos para desarrollarlos en 2016 si lo permitiera finalmente el reglamento.

Alonso es paciente y feliz, pero no va a estar así siempre, seguro que no

Por otro lado, se antoja cuanto menos sorprendente que los graves problemas de rendimiento y fiabilidad no agoten la paciencia de Fernando Alonso, quien no deja de subrayar su confianza en que el proyecto de McLaren-Honda ofrecerá los resultados esperados a partir del próximo año 2016.

No obstante, Boullier sugiere que la sequía de diez años sin títulos terminará por elevar las exigencias de Alonso en los próximos meses: "Alonso es lo suficientemente paciente, está calmado y feliz, lo cual es importante. Pero no va a estar así para siempre, seguro que no. No podemos permitirnos ser siempre tan poco competitivos". La paciencia del samurái aguanta estoica pese a la crisis de McLaren. Quién sabe por cuánto tiempo más...