Alonso: "No estoy frustrado, sabemos qué estamos haciendo"

Pese a las buenas sensaciones que había transmitido el potencial del monoplaza durante las sesiones de entrenamientos libres, Alonso ha confesado que pasar hoy a la Q3 era un objetivo “demasiado optimista” ante las profundas carencias que arrastran en materia de rendimiento y fiabilidad. Sea como sea, el bicampeón ha vuelto a subrayar su optimismo con el desarrollo del proyecto junto a Honda y se mostraba confiado sobre los planes que barajan de cara a las próximas carreras.

"Creo que era demasiado optimista ir hoy a la Q3. Definitivamente, ha sido nuestro mejor fin de semana en términos de lo competitivos que éramos. Ya no es frustrante, ya que sabemos que estamos haciendo, sabemos qué tenemos que hacer este año y posiblemente vendrán peores carreras en circuitos que no se adapten a nuestro coche. Trataremos de dar el máximo, aprender de problemas y tratar de no repetirlos. Intentaremos mejorar y ojalá seamos competitivos lo antes posible, pero ya no es frustrante”, indicaba el piloto de McLaren.

Por otro lado, Alonso reconocía que su intención de empujar el coche hasta el box reflejaba su ímpetu por seguir acumulando kilómetros con el MP4-30 y tratar de solucionar los problemas de índole eléctrico que le han impedido pasar de la 15º posición. Sin embargo, las estrictas directrices del reglamento deportivo le hubieran impedido volver a la acción en los instantes finales de la Q2, ya que el monoplaza debe volver al garaje sin la ayuda de cualquier factor externo.

“Quiero estar ahí fuera y correr. Eso demuestra cuánto amo este deporte. Da igual que estés último, decimoquinto o en la pole, quieres pilotar coche y pasártelo bien pilotando. Cuando he llegado al box me han dicho que no era posible según el reglamento, ya que el coche debe llegar por su cuenta con motor encendido. A veces en los Libres 3 llega el coche en la grúa y luego puedes volver a la pista. Pensaba que era posible. En algunas carreras hemos visto que había coches en la grava, los comisarios los ponen en la pista y luego siguen”, indicaba.

Las preguntas de la rueda de prensa no han estado enfocadas únicamente a sus sensaciones con el monoplaza en el trazado de Hungaroring, sino también a otros asuntos más técnicos como la posibilidad de que se retiren todos los sensores de los neumáticos con el objetivo de otorgar una mayor importancia a la destreza y el talento de los pilotos. Esta propuesta de Juan Pablo Montoya es vista por Alonso como una medida irrelevante frente a las grandes limitaciones que existen hoy en día en la categoría reina del automovilismo.

“Antes era más divertido, pero no porque tengamos más sensores o más información. Antes teníamos alguna libertad en cuanto a hacer pruebas y mejorar el coche. Si tu coche no era competitivo en la primera parte del año, luego traías mejoras y acababas el año siendo competitivo. Ahora con más o menos sensores, Mercedes ganaría las carreras y Manor seguiría siendo último. No es ya la información, sino que tenemos las manos atadas durante toda la temporada. Cuando llegas a Jerez o Barcelona y pones coche en pista, es una moneda al aire. Si es competitivo, tienes una buena temporada. Si no, tienes una mala temporada”, comenta.

Alonso cree que la libre elección de neumáticos tampoco funcionará ante la ausencia de libertad técnica en la F1: “Si tuviéramos un número limitado de juegos para todo el año, 20 blandos, 20 medios, 20 duros, 20 superblandos , y pudieras elegir cuál llevar a cada carrera, quizá funcionaría en un algún circuito donde no fueras tan rápido como tus competidores y quisieras arriesgar. Pero no es algo nuevo; antes con dos proveedores de neumáticos McLaren tenía unos compuestos, Renault otros con una especificación más blanda en las ruedas traseras, diferente elección de cámber… Ahora todos tienen el mismo cámber, el mismo peso, los mismos neumáticos… Así es ahora”.

Uno de los momentos más distendidos de la rueda de prensa se ha producido cuando un periodista ha preguntado a Alonso cuál hubiera sido su posición en la Q2 de no haber sufrido el problema eléctrico en su MP4-30. "Decimotercero", respondía el ovetense. Button ponía una nota de humor al asunto: "Yo creo que duodécimo". "Bueno, pues undécimo", comentaba otra vez Alonso al son de una fuerte carcajada entre todos los enviados especiales a Hungaroring. Al mal tiempo, buena cara...