Alex Palou no se deja intimidar: remonta del 15º al segundo y sale más líder de Toronto

Palou no se dejó intimidar. La víspera ya había dicho que debía remontar. Y dio un nuevo golpe de puño que muy cerca estuvo de ser su cuarta victoria consecutiva, quinta de la temporada.

Palou hizo una carrera perfecta. Su equipo le dio la estrategia perfecta. El riesgo de la temprana segunda parada para cambiar de ruedas, valió la pena. Sufrió al final, sí, pero más por un ala delantera oscilante -tuvo un contacto en sus intentos de adelantamiento- que por las ruedas, mientras tenía en su mano un as: le quedaban muchos más segundos de ‘push to pass’ que a sus adversarios directos, el doble en algún caso.

Palou superó varios momentos delicados. El tapón que representó Grosjean en el primer tercio de carrera. O el que le hizo Rossi, que se resistía a dejarse doblar, aunque en Estados Unidos esto es normal. El adelantamiento sobre Alexander fue en un lugar que parecía imposible.

Quienes salvaron los muebles fueron Scott Dixon y Josef Newgarden, cuarto y quinto… sobre todo porque Will Power y Marcus Ericsson debieron parar sin combustible en la última vuelta para acabar 14º y 11º respectivamente. Para Power, que defiende título, todo parece ya perdido este año.

Lungaard ha tenido un fin de semana perfecto. Hizo una Pole majestuosa y ha controlado muy bien la carrera, dando a Bobby Rahal esa victoria que él y sus socios ya estaban necesitando; el último triunfo del equipo fue el de Takuma Sato en la Indy 500 e 2020. Para el danés, esta ha sido su primera victoria. En su camino hacia la victoria superó a Palou en la vuelta 62 y aunque no se colocó líder todavía, los tres que les precedían McLaughlin, Dixon y Veekay tenían todavía que parar.

La prueba estuvo marcada por algunos detalles clave. El toque inicial que eliminó a Pedersen, Hunter Reay, Bloqvist y Harvey, del que se salvaron Rossi y Ferrucci, pero con parada en boxes y vuelta perdida de por medio, cuatro en el caso de éste último. Y después el contacto de Grosjean a media carrera, seguido inmediatamente por el de Helio Castro Neves; estos fueron clave porque permitieron hacer una parada temprana a algunos, como Palou, que tuvo incidencia clave en la clasificación final.