Leclerc debió ser más agresivo con Verstappen

La Fórmula 1 que queremos es esa en la que aún tienen cabida duelos tan apasionantes como el que protagonizaron Charles Leclerc y Max Verstappen en las últimas vueltas.

Ésto es lo que necesita el deporte, batallas y protagonistas como los de ayer. Leclerc y Verstappen firmaron la primera línea más joven de la historia de la Fórmula 1, y aunque la salida defraudó un poco porque Verstappen se quedó clavado, el holandés consiguió llegar a la altura de Leclerc en las últimas vueltas para regalarnos los minutos más apasionantes de lo que llevamos de año.

He de decir que la carrera me encantó más allá de ese duelo, hubo muchos pilotos que hicieron una gran carrera, como por ejemplo Sebastian Vettel o Carlos Sainz, aunque los adelantamientos del español no llegaron a salir en televisión.

Leclerc realizó un fin de semana sensacional, pero me defraudó un poco en las últimas vueltas. Me gustó mucho la defensa que hizo del primer ataque de Verstappen, se igualó con él, traccionó bien y consiguió defenderse en la curva cuatro; pero en el segundo envite, evitó el contacto. Un duelo como éste puede marcar el resto de tu carrera: la primera vez que Leclerc se ha batido con Verstappen en una lucha por la victoria, la ha perdido.

No me malinterpretéis, pero ahí creo que hay que apretar los dientes y el volante y no eludir el golpe, no irte por la escapatoria, echarle valor, meter los codos y a ver quién se hace menos daño. Evidentemente, me refiero al coche. Creo que Leclerc va a recordar ésto toda la vida, y estoy seguro de que hoy le está dando vueltas.

Es cierto que quedaban dos vueltas y Verstappen podría haber tenido más oportunidades, pero en ese momento tienes que defenderte a muerte, porque es una maniobra que deja cicatrices. Verstappen se erigió protagonista, eclipsó a Leclerc y le pasó por encima.

Sé que es fácil decirlo desde aquí sentado, lo complicado es hacerlo dentro de un Ferrari con la presión que hay dentro del equipo y sabiendo que, si Leclerc llega a salir mal parado, las críticas habrían sido feroces. No obstante, creo que también lo van a ser hoy porque no supo defender la posición, pese a que Verstappen venía con mejores neumáticos.

En cualquier caso, fue muy bonito. Verstappen es un animal de las carreras, un tipo que va a crear espectáculo esté donde esté. Menos mal que los comisarios tuvieron el bueno tino de no sancionar esa maniobra, habría sido muy dañino para la F1 que una carrera se hubiera decidido en un despacho después del espectáculo que vimos en pista.

Creo que los comisarios, entre los que se encontraba la española Silvia Bellot, fueron bastantes sensatos al valorar que en ese incidente hubo culpas compartidas: Verstappen porque frenó muy tarde y achicó el espacio; Leclerc porque nunca levantó pese a tener la posición perdida. Decisión acertada.

Viendo lo de ayer, y si todos nos hacemos la pregunta de si queremos una F1 más divertida... señores de Liberty Media, esto es muy sencillo: primero, que haya coches más o menos igualados. Segundo, que sienten ustedes en monoplazas competitivos a Verstappen, Hamilton, Vettel, Leclerc, Fernando Alonso... y veremos duelos como los de ayer. Que sean los pilotos quienes ganen los campeonatos, no los ingenieros.

¿Os lo imagináis? ¿Una F1 con todos estos pilotos y coches más o menos parecidos? Imaginaos ver este duelo entre Verstappen y Leclerc con Verstappen y Vettel, Vettel y Hamilton, Alonso y Leclerc...

De hecho, hay un rumor que se extiende en el paddock, aunque más que rumor parece un deseo, y es que haya un cambio de papeles: Verstappen a Mercedes con Hamilton, Vettel a Red Bull y Fernando Alonso a Ferrari. Es un bonito sueño, aunque tiene más parte de sueño que de realidad.

De sueño y de realidad también tiene que ver lo que están haciendo Carlos Sainz y McLaren. El equipo de Woking sigue dando pasos hacia adelante, y Carlos realizó un carrerón ayer, con una remontada de la decimonovena a la octava plaza después de sufrir el sábado sabiendo que iba a salir el último por las penalizaciones.

En fin, termina el GP de Austria. Por tercera vez en la temporada Ferrari fue el equipo más fuerte. Por tercera vez en la temporada Ferrari hizo la pole. Por tercera vez en la temporada Ferrari no ganó la carrera, y para tampoco lo hizo Mercedes, sino Red Bull. Mercedes ocho, Red Bull uno, Ferrari cero. Me dan un poco de pena porque se merecieron algo más, pero así son las carreras.