Todos los Rolls-Royce serán eléctricos en 2030

Torsten Müller-Ötvös ha comentado que renovará su gama actual en los próximos años con la vista puesta en la electrificación de todos sus modelos. Actualmente ésta se compone del Cullinan, el Ghost y el Phantom. Sin embargo, el primer eléctrico en llegar será el Rolls-Royce Spectre, un coupé que está confirmado para el próximo año 2023 y que sustituirá al Rolls-Royce Wraith.

La electrificación de toda la gama supone que la segunda generación del Rolls-Royce Ghost será el último modelo. En palabras de Torsten "es importante que cada modelo sea sustituido por una alternativa eléctrica a medida que la empresa avanza hacia una línea puramente eléctrica para 2030. Destacó además que la prohibición de vender coches nuevos con motor de combustión interna es un incentivo especial".

DESCIENDE LA EDAD MEDIA DE LOS COMPRADORES

En esta misma entrevista, Müller-Ötvös dio unos cuantos apuntes acerca de la situación actual de la compañía y de su público objetivo. Así, afirmó que 2021 fue su mejor ejercicio en cuanto a ventas en sus 117 años de historia.

Por otro lado destacó que a esas cifras ayuda que la edad media del comprador de un Rolls-Royce ha descendido hasta situarse en los 43 años. Comenta además que "bastantes de nuestros clientes ya poseen un coche eléctrico, ya sea un Tesla, un BMW o algún otro modelo, por lo que tienen experiencia en este tipo de vehículos. Es por ello que también se ha dado el paso de la electrificación, porque nuestra clientela bastante joven en todo el mundo nos pide activamente un Rolls-Royce electrificado".

Para Müller-Ötvös la electrificación de toda la gama es una tarea enorme para una empresa relativamente pequeña pero la inversión necesaria no se traducirá automáticamente en coches más caros. Según él mismo explica "nunca fijamos los precios en función de los costes, sino del segmento y de la sustancia. Se fijará en función de su posicionamiento y no de su tren motriz". 

Según se desprende de estas palabras, el futuro Phantom eléctrico no tendría que costar más que el actual V12 de gasolina, de origen BMW, cuyo precio de partida es de 374.400 libras –448.746 euros–. Sin embargo, como apunta, "una cosa está clara: nunca sacaremos al mercado un coche que no sea tan rentable como los de combustión. Ese es mi credo. Me gustaría impulsar los márgenes de beneficio por coche, porque estoy en el negocio para eso, esa es mi tarea en el Grupo BMW, no hacer volumen".

TECNOLOGÍA DE BMW

Una de las ventajas de la electrificación de Rolls-Royce es que tiene a su disposición la tecnología de BMW. Tal y como comenta el directivo "seríamos tontos si no lo hiciéramos". Sin embargo aclara que "no nos gusta rebautizar como Rolls-Royce las carrocerías existentes de los coches fabricados en serie" en clara alusión a modelos como el Mercedes-Maybach GLS 600 4MATIC 2020 ó el Mercedes-Maybach Clase S 2021.

Rolls-Royce considera que aún es pronto para lanzarse de lleno a la electrificación. La marca es consciente de que su mayoría de conductores buscan diversión. En 2021 sólo el 20% de sus vehículos los conduce un chófer, frente al 80% en 2010. Además, según indica, los ámbitos de circulación también han cambiado.

Por úlitmo, el CEO de Rolls-Royce considera que no será necesario lanzar en el futuro modelos deportivos como tal: "Yo no utilizaría la palabra deportivo. Hemos encontrado un punto óptimo en la puesta a punto de los Rolls-Royce Ghost Black Badge. Lo dejaré así por el momento, porque lo único que nunca comprometeré es el confort de nuestros vehículos. Cuanto más deportivo sea el coche, más compromisos habrá que hacer en el ámbito del confort. El confort es lo que hace que la gente compre Rolls-Royce".