Esprit Alpine: así están cautivando Renault, Luca de Meo y una diseñadora española a los clientes premium de media Europa

Renault sube en ventas, en beneficios, en márgenes operativos y en imagen de marca, y todo sin que su presidente, Luca de Meo haya lanzado aún ningún coche totalmente desarrollado bajo su mandato, algo que sucederá con el Renault 5 eléctrico una apuesta personal francamente arriesgada, ya que muchos señalan que, si fuera también híbrido, el ‘boom’ en ventas sería espectacular.

Pero, ¿Cómo se ha producido el aumento en la imagen de marca de Renault? ¿Por puro marketing? Mejor todavía: por amor propio... llegado desde Italia. Y es que han sido el propio Luca de Meo el que tenía el convencimiento de que la marca tenía mucho más ‘espíritu francés’ y ahí entra en luego el llamado ‘Esprit Alpine’.

Hasta la llegada del ejecutivo italiano, los modelos ‘tope de gama’ con aspecto deportivo –no hablamos aquí de altas prestaciones– eran los Renault RS Line, un acabado que, como los ST Line de Ford, S Line de Audi o GT Line de Kia, adornaban estéticamente los coches... y poco más, pero el Esprit Alpine va más lejos, mucho más lejos.

UN DISEÑO CON ACENTO ESPAÑOL

El cambio se produjo en el Renault Austral. El modelo ya estaba diseñado cuando llegó el ejecutivo italiano en 2020. Luca de Meo provenía de Seat, donde en solo cuatro años logró devolverla a beneficios, alcanzar ventas récord y lanzar Cupra ¡casi nada! Su primer movimiento en la parte comercial de Renault fue lanzar el acabado ‘Esprit Alpine’ –Espíritu Alpine– en los nuevos modelos ya previstos, pero el equipo de diseño trabajó más a fondo que con los RS Line, y aquí entran en escena la diseñadora española Paula Fabregat, el experto en interiores –también español– Miguel Ángel Iranzo y el francés Gilles Vidal, llegado desde Peugeot.

MUCHO MÁS QUE LLANTAS Y LOGOTIPOS

En los ‘Esprit Alpine’ se ha ido mucho más lejos que con los logotipos y llantas de los RS Line: En el Austral se estrenaron colores mate específicos para esta versión, un interior con tapizados en ante y costuras en azul con el logotipo Alpine, volante con el cosido en los tres colores de la bandera francesa, muy presente en forma de etiquetas en asientos o salpicadero, nueva bienvenida en los equipos multimedia, llantas más grandes y siempre en tonos oscuros, como la nueva tonalidad de los faros. Por fin el cliente notaba que, en verdad, estaba comprando algo especial, y el acabado Esprit Alpine ha sido un éxito. En cuanto a las prestaciones, Renault decidió unir estos acabados a los modelos híbridos más sofisticados, y no a los de mayor velocidad, logrando así un efecto doblemente positivo: los coches de mayor valor son a la vez los de menor consumo y emisiones, clave para reducir el promedio de CO2 de los coches de la marca.

La fórmula del lanzamiento del Austral se ha repetido en todas las renovaciones de gama y nuevos modelos: primero en el Renault Clio, luego en el Renault Captur y en su nuevo hermano mayor, el Symbioz, por supuesto en el SUV Coupé Rafale y hasta en el SUV de siete plazas Espace. Incluso los modelos eléctricos, como el nuevo Scenic, cuentan con un acabado Esprit Alpine en su gama.

Toda la estrategia de crecimiento de valor ha estado acompañada de importantes acciones deportivas, al cambiar el nombre del equipo de Fórmula 1 de Renault a Alpine –contando en las temporadas 2021 y 2022 con el español Fernando Alonso– e iniciar la participación en la categoría reina de las 24 Horas de Le Mans.

¿ADIÓS AL ESPRIT ALPINE?

El efecto ha sido evidente: Renault vende más coches, con un precio más alto y con un mayor valor de reventa porque son más deseados, un círculo que no tendrá continuidad en toda la gama: el nuevo Renault 5 eléctrico ya no tendrá versión Alpine, sino que Alpine tendrá un modelo propio con esa base, el Alpine A290. A este A290 le seguirán modelos propios de Alpine, donde obviamente no se contempla un tipo de acabado ‘Esprit’. Será el momento entonces de reevaluar la estrategia: si ya existen modelos de gran tirada con la marca Alpine mantener los Renault ‘Esprit Alpine’ puede jugar en contra de la imagen de la nueva marca sport-premium, pero cuando llegue ese momento –si es que se produce– el aumento de valor de Renault ya se habrá conseguido, y todo sin un solo cambio técnico, solo con marketing, diseño y amor propio: Alpine es una marca de Renault desde hace décadas, pero es ahora más popular que nunca y es bajo la batuta de Luca de Meo cuando está despertando todo su potencial.