La FIA no ve con buenos ojos un BoP para los motores de F1

En 2022 la Fórmula 1 afronta una nueva era, en la que cambiará la reglamentación con la esperanza de igualar el rendimiento de los diez equipos. Eso sí, los motores seguirán siendo los mismos y por ello, podría haber más diferencias de un fabricante a otro. Desde entonces hasta 2025 se congelará su desarrollo.

Por ello, para garantizar la igualdad no se descartó que la FIA metiese mano en las unidades de potencia para que todas tuviesen un rendimiento muy similar en 2021, y anular cualquier tipo de grandes ventas. No obstante, Simon piensa que el nivel de los cuatro va a ser muy similar y por ello, no ven necesario ajustar una especie de Balance of Performance, que en otras categorías intenta igualar el rendimiento de forma artificial, como cortar la cantidad de combustible del coche o aumentar su peso.

"Esperamos que todos los motores estén en un rango muy estrecho de rendimiento para 2022. No hay que olvidar que todavía tenemos dos oportunidades para que los motores se alineen de forma natural, este año y el próximo. A día de hoy, no creemos que tengamos que intervenir externamente para ajustar el rendimiento", ha comentado Simon en palabras recogidas por la agencia de noticias GMM.

Además, en 2022 está previsto que entre en vigor la congelación de motores, que impedirá a los equipos suministradores desarrollarlos durante toda la temporada. La unidad de potencia será la misma en la primera carrera y en la última y eso también facilita el trabajo a la FIA a la hora de garantizar la igualdad, pues anulan la amenaza de cualquier tipo de mejora.

En la reunión del día de ayer de la Comisión de F1, los equipos parecen haber llegado a un acuerdo en lo que a la congelación respecta. Red Bull parece que conseguirá su objetivo y podrán trabajar con la propiedad intelectual de Honda una vez que ellos abandonen la Fórmula 1 al término de este año.