Nos subimos al nuevo Honda Prelude: El coupé híbrido japonés podría ser un gran éxito o un rotundo fracaso, y lo vemos 'fifty/fifty'

El Festival de la Velocidad de Goodwood es un buen termómetro para ver lo que funciona y lo que no, y allí nos encontramos con el nuevo Honda Prelude. Es un coupé, y eso lo ha aplaudido todo el mundo porque no ha usurpado el nombre del deportivo para convertirse en SUV, como han hecho Mitsubishi con el Eclipse o Ford con los Puma o Capri, entre otras marcas. En este caso estamos ante un dos puertas con trasera muy inclinada, como en los primeros Prelude, pero estéticamente esta nueva edición es muy 'sosa', y eso no es bueno para un deportivo. Si el frontal se parece a algunos modelos híbridos de Toyota como el Prius, el lateral o la trasera podrían ser de cualquier marca, sin un gran personalidad ni el efecto 'wow' tan importante en estos coches y que sí, tiene, por ejemplo, el nuevo Nissan Z.

A nivel técnico, Honda apuesta por la mecánica híbrida del Civic y del CR-V, con 200 caballos de potencia. La historia de Honda con este tipo de mecánica es peculiar: mientras sus modelos superventas, como el Civic y el CR-V, se han adaptado perfectamente a los motores híbridos, los modelos nacidos con este tipo de motor no han tenido éxito. El Honda Insight fue un rotundo fracaso y el deportivo Honda CR-Z fue incomprendido porque llegó al mercado, quizás, demasiado pronto. También el eléctrico Honda e ha sido un fracaso, así que los experimentos no salen últimamente muy bien en la casa japonesa.

No es el único síntoma que nos hace preocuparnos: Nissan ni siquiera vende el Z en Europa por su baja demanda, y Toyota, que ha tenido que fabricar el Supra en conjunto con BMW y el GR86 con Subaru.

¿SERÁ EL PRELUDE UN ÉXITO?

Es difícil predecirlo. El nombre tiene arraigo y los modelos híbridos se venden muy bien, pero en el otro lado de la balanza, los coupés ya no tienen tirón y los 'petrolheads' no son precisamente amantes de los coches híbridos. Una papeleta difícil, porque aunque a todos nos gustaría ver un Prelude en el mercado, no está claro que sean muchos los dispuestos a ir al concesionario a comprarlo. 

Nuestra opinión es que el coche estéticamente debería tener mucho más gancho para convencer al público e incluso probar en otros segmentos, como el Cupra Formentor, la gama Toyota GR o, en modo eléctrico, el Hyundai Ioniq 5 N.