La operación de apendicitis priva a Sainz de liderar el Mundial por primera vez

Nunca se podrá saber con exactitud qué habría pasado en Arabia Saudí si Sainz no hubiese tenido que abandonar la competición para irse directo al hospital. Sin embargo, hay hartas posibilidades de que, como mínimo, hubiese terminado en cuarta posición, justo por detrás de Charles Leclerc. Red Bull dominó en Yeda, pero con Ferrari siguiéndole de cerca. De hecho, se pudo comprobar en el buen rendimiento de Oliver Bearman en su debut, donde consiguió una séptima posición que le hizo destacar sobre el resto. 

En caso de haber podido disputar esa carrera, y siendo conscientes de que el cuarto puesto, como mínimo, era posible, el español podría estar ahora mismo liderando el Mundial. Los números no fallan: la plaza inmediata al podio otorga 12 puntos, y la distancia actual con Verstappen es de 11. Y esa podría haber sido la primera vez que Sainz se ponía al frente de la clasificación de pilotos. 

Una posibilidad que se avala después de su gran inicio de año, que ha dejado a la prensa italiana rendida a sus pies. De hecho, el podio en Arabia Saudí era más que probable si todo iba bien. En las dos carreras en las que ha podido competir directamente con su compañero de equipo, le ha superado. Así que se puede decir que el arranque de temporada de Sainz, a pesar de todas las dificultades a las que ha tenido que hacer frente, está siendo excelente. Es más: nunca ha terminado fuera del podio en lo que va de curso –un tercer puesto y una victoria–. 

Cabe destacar, además, que el español es el único que ha podido desbancar al neerlandés en las últimas 23 citas del Mundial. 21 victorias para el actual campeón, dos para él –Singapur 2023 y Australia 2024–.

Esos números están llamando la atención de los equipos. Saben que el todavía piloto de Ferrari continúa sin equipo para 2025 después del fichaje de Lewis Hamilton por la Scuderia. Así que, en estos momentos, es uno de los más codiciados de la parrilla: Mercedes ya ha expresado su interés y Red Bull lo ha insinuado. Haber sorteado las adversidades, tanto la de quedarse sin equipo como la apendicitis, le ha situado en el centro de todos los focos. Y eso que su baja en Yeda le ha impedido –casi con total seguridad– superar a Verstappen como líder del Mundial.