Chip Ganassi abre la polémica: "La F1 es cualquier cosa menos una carrera"

“Quiero estar donde estás los equipos más competitivos, los pilotos más competitivos. Donde hata todo esto, quiero estar allí. Lo siento, pero no veo eso en al Fórmula 1 por ahora. Para mí, las carreras de IndyCar son mucho más emocionantes”, ha dicho Ganassi, cuyo equipo es uno de los mejores de Indycar y tiene a Scott Dixon, Alex Palou y Marcus Ericsson como pilotos de punta y aspirantes al título.

Lo ha dicho tras la carrera de Texas, donde hubo 24 cambios de líder, donde el final se decidió al sprint entre cuatro o cinco coches, frente a un Gran Premio de Australia envuelto en la polémica.

El veterano propietario de equipo posiblemente tiene en cuenta dos hechos fundamentales: el presupuesto requerido por IndyCar es ridículo frente al de la Fómula 1 y que la toma de decisiones es mucho más rápida y más coherente.

“Esta Indycar es una gran serie de carreras, y ofrece algunas de las carreras más exitantes que existen. Son carreras reales, cosas que existen. Quiero decir que la Fórmula 1 es cualquier cosa menos una carrera. Es como si las carreras fueran sólo un plato de acompañamiento”, dijo hace poco a NBC y volvió a reiterarlo en Motosport Magazine. “Nunca digas nunca, pero no considero que las carreras de Fórmula 1 sean las mejores que he visto nunca”.

Todo ello viene a raíz de la mayor presencia de la Fórmula 1 en Estados Unidos con tres Grandes Premios y el alza del seguimiento por televisión, que han vuelto a actualizar la pugna entre Fórmula 1 e Indycar, aunque en realidad son dos mundos opuestos. Uno es una batalla tecnológica, cada vez más acotada, entre equipos diversos y con presupuestos que, pese al ‘techo presupuestario’, son monstruosos. Otra, apuesta por la igualdad, con coches monotipo, elección entre dos motores estándar y presupuestos contenidos. Uno es un concepto europeo de competición y el otro americano, donde el espectáculo tiene mucha importancia, pero también hay mucha mayor igualdad entre los contendientes como base del mismo.

Pero Ganassi admite que el auge de la Fórmula 1 en Estados Unidos beneficia a la IndyCar. “Cuando una categoría sube, arrastra a otras hacia arriba”, señalando que ellos también se beneficiaran del interés que han despertado los episodios de Netflix.