Mercedes empieza a asomar la cabeza

La enorme capacidad de desarrollo de Mercedes no es ninguna sorpresa. Sin ir más lejos, el año pasado empezaron con serios problemas en su monoplaza y terminaron la temporada con una victoria incluida –en el Gran Premio de Brasil–.

Pero quizás no esperábamos que en el tercer Gran Premio de esta temporada diesen un paso adelante tan grande. Recordemos que el mejor Mercedes estaba a seis décimas de la Pole en Baréin y a casi seis décimas en Arabia Saudí; en este caso, sólo dos décimas.

Es cierto que las características del trazado situado en Melbourne son diferentes a las de Baréin o Yeda, especialmente con las frías condiciones que se han encontrado hoy, pero una diferencia aproximada de cuatro décimas en clasificación es una sorpresa.

Ya avisamos ayer del buen rendimiento mostrado por Mercedes en los entrenamientos libres, pero lo de hoy es ir más allá. De hecho, ¡Lewis Hamilton estaba en la primera posición tras su primer intento de la Q3!

Si bien al final no han podido arrebatar esa Pole a Max Verstappen, el hecho de haber sellado la segunda y la tercera posición y, además, con una diferencia tan pequeña, es más que destacable para la marca de la estrella.

Falta por ver si mañana tendrán buen ritmo de carrera o si han apostado por una configuración más concentrada en la clasificación. No obstante, a buen seguro podrán jugar sus cartas en el ‘dos contra uno’ que tienen en la salida contra Verstappen tras el incidente de Sergio Pérez en la clasificación.

Red Bull, eso sí, ha estado en otra liga en las tandas largas en los dos primeros Grandes Premios de la temporada. Salvo sorpresa, Verstappen tiene vía libre hacia la victoria, pero también es cierto que los problemas de fiabilidad también han aparecido.

En definitiva, mañana puede pasar de todo. En la Fórmula 1 puede pasar de todo. Mercedes ha batido hoy a los Aston Martin y a los Ferrari… y va a por Red Bull. Aún queda mucho campeonato.