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Toto Wolff ha admitido públicamente que recomendó a Max Verstappen su fichaje por el programa de jóvenes pilotos de Red Bull vistas las limitadas posibilidades de que el joven piloto holandés obtuviera un asiento titular a corto plazo junto a Mercedes AMG en la Fórmula 1.

Max Verstappen asegura que la perspectiva de debutar en la Fórmula 1 con tan sólo 17 años de edad no le produce vértigo, pues está decidido a demostrar su valía ante el resto de la parrilla.

La Fórmula 1 regresa de sus vacaciones para el Gran Premio de Bélgica, una carrera que la teoría dice que no favorecerá en absoluto al RB10 de Red Bull, fuerte en las curvas lentas pero débil en las rectas.

Max Verstappen es el nombre de moda en la Fórmula 1, y es que ayer mismo se confirmaron los sorprendentes rumores que desde principios de mes lo situaban en un volante titular de Toro Rosso de cara a la próxima temporada.

Max Verstappen se convertirá en el piloto más joven de la historia de la Fórmula 1. El holandés culminará su meteórica carrera hacia la categoría reina de la mano de Toro Rosso, donde sustituirá a Jean-Éric Vergne. Hijo del también piloto Jos Verstappen, sólo lleva un año de trayectoria en monoplazas, pero con su ascenso también pone cuesta arriba el debut a Carlos Sainz, el líder de las World Series by Renault 3.5.

Max Verstappen es la nueva revelación de la temporada. Recién fichado por el Red Bull Junior Team, es segundo en la clasificación general de la FIA Fórmula 3 European Champioship, donde actualmente corre con el equipo Van Amersfoort Racing.

Red Bull encadenó nueve victorias consecutivas a finales del año pasado de la mano de un Sebastian Vettel pletórico coronado campeón del mundo por cuarta vez. En 2014, sin embargo, es improbable que eso suceda.

El equipo Red Bull ha decidido no contratar a un nuevo director técnico que abarque la máxima responsabilidad en la jefatura del departamento de diseño con motivo de la decisión de Adrian Newey de alejarse de forma progresiva de sus responsabilidades en el equipo.

La repentina pérdida de rendimiento experimentada por Sebastian Vettel en 2014 ha supuesto uno de los temas de mayor interés para la opinión pública de la Fórmula 1. Triunfante ante los cuatro títulos consecutivos obtenidos a lo largo de los últimos años, el de Heppenheim se ha topado con un nuevo reglamento adverso a sus capacidades al volante que, más allá de ensalzar su capacidad de adaptación a los nuevos retos técnicos, ha terminado por generarle una oleada considerable de críticas visto su pobre rendimiento a los mandos del RB10.

Red Bull es el único equipo de la parrilla que posee dos escuderías al mismo tiempo, un hecho que los austríacos han sabido aprovechar para potenciar el crecimiento de nuevos pilotos y ultimar su preparación para la élite de la categoría reina.

Spa-Francorchamps y Monza, dos circuitos de motor que teóricamente no deberían beneficiar al RB10 de Red Bull, aunque el equipo austríaco ya ha desafiado a la lógica en años anteriores y cosechado victorias en ambos circuitos.

Renault Sport F1 se encuentra en una desesperada búsqueda de mejoras drásticas que frenen la oleada interminable de incidentes registrados en su unidad de potencia, concretamente en el rendimiento del software y otros sistemas de menor relevancia, y cuya gravedad ha llegado a comprometer en gran medida la fiabilidad de sus equipos cliente.

Christian Horner cree que la primera mitad de temporada de Red Bull fue muy buena si se tienen en cuanta las limitaciones del motor Renault, ya que ambos pilotos subieron en diferentes ocasiones al podio y Daniel Ricciardo incluso ganó dos carreras.

Los Fórmula 1 son máquinas delicadas, muy delicadas, y el actual líder de la GP3 puede dar fe de ello.

El dominio de Mercedes en lo que va de temporada no quita la ilusión al piloto de moda de la Fórmula 1, Daniel Ricciardo. El ganador del Gran Premio de Hungría ha mostrado su tremenda alegría al asegurar que todavía será candidato al título, y ha asegurado que intentará ganarlo hasta que las matemáticas digan lo contrario.