La mala suerte se vuelve a cebar con Alonso y Sainz en Imola

La carrera ha comenzado en condiciones de mojado y Carlos Sainz se ha visto fuera de juego en la primera vuelta tras el mencionado toque con Daniel Ricciardo. Para más inri, Fernando Alonso también se ha visto golpeado por Mick Schumacher al intentar salvar la situación y su carrera se ha terminado en la relanzada posterior al coche de seguridad, ya que su Alpine tenía serios daños en el pontón.

Se trata, además, de una carrera en la que ambos tenían buenas opciones. Carlos podría haber peleado por el podio, sobre todo si tenemos en cuenta el error que ha cometido Charles Leclerc al final de la carrera; Fernando, por su parte, estaba justo detrás de Valtteri Bottas tras la primera vuelta, así que la sexta posición –ocho puntos–, como mínimo, no era una utopía.

No está siendo la temporada con más suerte para los pilotos españoles. Sainz venía de un ‘cero’ en Australia y tenía que remontar el vuelo aquí, pero se ha encontrado con un abandono en la primera vuelta al verse golpeado por el McLaren. Además, aquí estrenaba su segunda unidad de potencia tras el abandono de Australia y no ha podido aprovecharla.

Pero el caso de Alonso es aún peor. Fueron tres unidades de potencia las estrenadas en los tres primeros Grandes Premios por problemas de fiabilidad, algunos de ellos en momentos cruciales –sobre todo los fallos mecánicos de Arabia Saudí y Australia–, pero esta vez se ha visto fuera de la carrera por un leve toque en el costado de su monoplaza.

Para Sainz, los dos abandonos consecutivos han significado caer a la sexta posición del Mundial; para Alonso, los continuos problemas de fiabilidad y el abandono de hoy han supuesto que sólo tenga dos puntos en el campeonato y esté lejos de su compañero de equipo, pese a que ha demostrado un buen rendimiento en este inicio de temporada.

Como dijo el asturiano en Australia, a lo largo de la temporada deberían tener mucha suerte ambos, porque ya han tenido que gastar toda la mala en el inicio. ‘Bromas’ aparte, la buena noticia es que la temporada es muy larga y tienen tiempo para ‘volver’.