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Toro Rosso está teniendo un fin de semana para olvidar en el Gran Premio de Austria. Daniil Kvyat partirá 18º mañana tras no poder pasar de la Q1 al pisar uno de los pianos polémicos del circuito y romper la suspensión del STR11. El ruso ha tenido un accidente fuerte pero ha salido ileso. Carlos Sainz también ha tenido mala suerte: tras el accidente de Kvyat, el madrileño ha roto el motor que ya había cambiado tras un fallo eléctrico en los Libres 3. 

Red Bull encara la carrera del GP de Austria con una visión abierta acerca de sus posibilidades. Daniel Ricciardo partirá 5º, por delante de Rosberg y Vettel, y espera que con las gomas superblandas puedan estar en la lucha por el podio. Max Verstappen saldrá 8º y ha recordado a todos los pilotos que pasaron de sus críticas sobre los pianos ayer que tenía razón vistos los incidentes con las suspensiones hoy. 

Force India ha tenido un día de encontradas sensaciones en Austria. Nico Hülkenberg ha sido de los pilotos más ágiles y que mejor se ha adaptado en las condiciones cambiantes de la pista al término de la Q3 y ha marcado el tercer mejor tiempo, aunque saldrá segundo por la sanción a Rosberg. En cambio, Sergio Pérez ha sido una víctima más de los polémicos pianos del Red Bull Ring y saldrá 15º al romper su suspensión en Q1 pero pasar el corte por marcar el tiempo antes del accidente. 

McLaren-Honda ha tenido una de cal y otra de arena en la clasificación del GP de Austria. Mientras que con Jenson Button han acertado y el piloto inglés ha sacado a relucir todo su talento en condiciones mixtas para lograr el quinto mejor tiempo en Q3 y partir mañana 3º por las sanciones a Rosberg y Vettel; con Fernando Alonso las cosas no han salido bien: en Q2 han sacado al asturiano con neumáticos usados y no ha podido pasar a Q3.

Sauber sigue en su particular pozo sin salida. Aparte de los problemas económicos, también los hay en pista; pues hoy ha vuelto a ser el equipo más lento de toda la parrilla. La escuderia de Hinwill no ha podido hacer frente a la enorme competencia de Manor, sobre todo en manos de Pascal Wehrlein; y Renault parece que ha mejorado un poco desde el último Gran Premio celebrado en Bakú. Mañana esperan que el coche de seguridad o la lluvia les ayude a remontar. 

Renault termina la clasificación del Gran Premio de Austria en las puertas de Q2 pero con la sensación de que podrían haber hecho más. La bandera roja provocada por Daniil Kvyat y la posterior bandera amarilla por Carlos Sainz han condicinoado los intentos de vuelta rápida de Kevin Magnussen y Jolyon Palmer, los cuales afirman con seguridad que hoy era posible pasar a la Q2. 

El equipo Williams ha tenido un día cortado por la mitad. Debido a la lluvia se ha perdido tiempo clave para entender el nuevo asfalto del Red Bull Ring, aunque en general el equilibrio del coche ha dejado contentos a ambos pilotos del equipo de Grove. Por esto motivo, ambos se ven capaces de mejorar mucho más mañana y poder luchar por la tercera fila de la parrilla frente a los Red Bull.

Ferrari ha comenzado la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Austria con sensaciones positivas. Por la mañana, Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen han sido 3º y 4º, y por la tarde 4º y 8º, respectivamente. Ambos pilotos están satisfechos con el rendimiento del coche hasta ahora y esperan poder mejorar mañana en los Libres 3 al pulir los reglajes haciendo tandas de clasificación y carrera que no pudieron hacer hoy por la meteorlogía. 

Toro Rosso llega al GP de Austria, casa de Red Bull y por extensión del equipo de Carlos Sainz y Daniil Kvyat. El piloto español, aún pendiente de confirmar su futuro, tratará de seguir mostrando su valía a los mandos del STR11 en un trazado que le gusta mucho.

El equipo Renault quiere dejar atrás cuanto antes el mal fin de semana que vivieron en Bakú y confían en hacerlo en Austria, donde el circuito Red Bull Ring debería adaptarse mucho mejor a las características de su RS16 y, con ello, poder obtener mejores sensaciones y resultados.

Manor ha tenido una carrera para olvidar. Después de lograr una gran clasificación el sábado con Rio Haryanto en 17ª posición; un toque en la primera curva ha condicionado la carrera del piloto indonesio mientras que los frenos han provocado la retirada de Pascal Wehrlein por razones de seguridad. 

Red Bull sabía que no podría mantenerse en las más altas posiciones, pero los coches no han ido tan mal como esperaban. Ricciardo salía 2º, pero por detrás tenía a los Ferrari y a los coches con motor Mercedes, que sin duda han funcionado mejor en Bakú. Verstappen tampoco ha podido sacarle mucho partido al Red Bull, pero ha acabado en una satisfactoria 8º posición y conseguir la tercera vuelta más rápida de la carrera.

El equipo Sauber no ha podido aprovechar las pocas oportunidades que han dejado los cuatro abandonos en Bakú y se marchan de allí sin puntos con un casillero que permanece a 0 esta temporada. Felipe Nasr ha finalizado duodécimo ganándole la batalla a Romain Grosjean y a los Renault mientras que Marcus Ericsson solo ha podido ser decimoséptimo.

Toro Rosso ha tenido un Gran Premio para olvidar en Azerbaiyán. Ambos monoplazas se han visto obligados a abandonar por un problema en la suspensión trasera del cual el equipo todavía sigue investigando sus causas. Aún así, el STR11 estaba siendo menos competitivo de lo habitual ya que sufrían en las largas rectas con el motor Ferrari de la temporada pasada. 

Cara y cruz en Red Bull. Si por un lado Daniel Ricciardo ha logrado sacarse de la manga una vuelta estratosférica que le ha valido para una segunda plaza con la sanción de Sergio Pérez; por el otro lado Max Verstappen se las ha tenido que ver con Valtteri Bottas que le ha impedido mejorar sus cronos. Mañana promete ser una carrera con muchos adelantamientos y repleta de acción en pista.