Abad sobre Alonso: "El talento no tiene fecha de caducidad"

El propio Alonso ya restó importancia al asunto tras afirmar que su intención de ganar el Campeonato Mundial permanecía intacta pese a la crisis deportiva de McLaren. En línea con las palabras del bicampeón, su mánager ha confesado al periodista Pablo Juanarena que "el talento no tiene fecha de caducidad" en la Fórmula 1, desmintiendo así las especulaciones sobre su posible pérdida de habilidad al volante después de 15 años de actividad ininterrumpida en la parrilla.

Por otra parte, Abad insiste en que Alonso se encuentra al "110%" de sus capacidades a falta de una semana para el Gran Premio de Rusia tras completar la última carrera en Shánghái sin apenas molestias físicas sobre la zona afectada por el accidente. "Lo más importante y en lo que no hay dudas es que todo salió afortunadamente bien, que ha competido perfectamente en China y si ahí ya estaba al 100%, en Sochi estará al 110%", apunta.

Pese a que Alonso consiguiera pasar los exámenes médicos de la FIA en China, el proceso de recuperación no estuvo extento de complicaciones desde el punto de vista burocrático, y es que el veredicto oficial tardó casi cuatro horas en salir a la luz. El motivo principal se atribuyó a un retraso en los trámites con la Federación Española de Automovilismo, circunstancia que analizan con resignación desde el entorno del piloto

"La primera obligación para la FIA es que los pilotos estén en las mejores condiciones posibles cuando se suben al coche para no poner en riesgo al resto, pero la puesta en marcha es siempre complicada porque hay constantemente un volumen de normas cruzadas entre Federaciones nacionales e internacionales que hacen muy complicado pasar por todos estos requisitos", lamenta Abad.

La prensa alemana especuló con la posibilidad de que la visera de Alonso se abriera durante el accidente en Albert Park según indicaban unas imágenes recopiladas por la FIA, pero Abad afirma no tener constancia de la veracidad de esta información. "¡No me creo todas las que yo no he visto y el resto sí ha visto!", apuntaba entre risas. "En demasiadas ocasiones se convierte el texto como pretexto y no lo sé, no sé si se abrió", añade.

Sobre la situación actual de la Fórmula 1, el representante del asturiano lamenta que la extrema complejidad del reglamento bajo la tecnología de los V6 Turbo reduzca el atractivo de las carreras para los aficionados. "Ahora es muy difícil para el espectador saber qué demonios está pasando. En muchos casos, incluso desde dentro es difícil valorar noticias que leo constantemente sobre el MGU-K y otras piezas. Hay cosas que escapan al conocimiento y al deporte".

No obstante, Abad se abstrae de los problemas estructurales de la categoría para defender abiertamente el espectáculo en los Grandes Premios. "Cuando abandonamos todos la parrilla y se quedan los coches y los pilotos, se bajan las viseras, empieza un deporte que es absolutamente espectacular. Y eso no va a conseguir evitarlo por mucho que nos pongamos con los brazos en cruz, cuál sea la realización televisiva ni dónde se desarrolle la carrera... El otro día ya vimos una carrera en Shánghái espectacular", explica.